Matrimonio Forzado (Yaoi) (Omegaverse)

Capítulo 10: Peligros inminentes

Dedicado a: Labocht
Gracias por querer oír mi situación, al rato te diré.
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- Misaki-san, bienvenido.

- Gracias Shinobu...

Misaki tenía un propósito por el cual estar ahí, sucede que todos los dueños de provincias poseen un criado, anteriormente, el chico fue el criado de Akihiko, a quien casarían con alguien a quien no quería, debido a ser el único que lo vio en sus momentos tristes y felices, una buena relación surgió en ellos, y posteriormente, surgió algo más fuerte, un amor incondicional.

Claro que tuvieron sus problemas, pero el juicio de los otros era lo que menos les importó, para ellos, nada ni nadie podía separarlos, y ya que era omega, Isaka aprobó su unión.

Pero había algo que nadie más que él sabía de Akihiko, y es que el hombre es infértil, pues anteriormente intentaron tener hijos, pero Misaki nunca quedaba embarazado, por lo cual Usami decidió chequearse, dándole ese triste resultado, pero no importaba, Misaki siempre estaría para él.

¿Y por qué está ahí? Debido a su pasado de criado, ya tenía una amistad con Chiaki y Shinobu, y no le costó pedirles que cuidarán a sus dueños, pero esta situación se presentó, y ahora más que nunca deben procurar de hacer bien su deber.

- Traje comida para todos, pero ¿Donde están Kisa-san y Yukina-san?

- Están en su habitación, junto con el pequeño.

- Bien, iré a verlos, mientras ustedes vigilen que nadie venga por estos lugares.

- Está bien...

Había una razón para proteger a esta pareja en específico, pues alguien tenía que tomar el control de Marukawa, y con esta guerra suelta, era más que seguro que los rebeldes se desharian de cualquier miembro de la realeza, pero no a ellos, no al único que ha Sido aprobado por el mismísimo Usami.

Misaki entró a la habitación, y la vista le conmovió en sobremanera, hubo un tiempo en el cual pensó que así podría verse una familia con su amado Akihiko, pero ahora no podía ser, así que solo le quedaba ver esa bella vista de Kisa, Yukina y el pequeño que había que resaltar, se parecía en algo a él.

- ¿Interrumpo algo? - Dijo atrayendo la atención de los que se encontraban dentro.

- Para nada.

- Bien, primero, me alegra ver que ustedes están bien, créanme que después de todo ese revuelo en la plaza, todo allá afuera es una anarquía.

- ¿Por qué los dices? - Preguntó Shouta algo alterado por la situación.

- La guardia de Isaka no puede controlar la rebelión, los rebeldes cada vez se están apoderando de más, lugares y para colmo...

- ¿Que lugares están tomados? - Ahora preguntó Kou, temiendo que algo le hubiera pasado a su madre o a su hermano.

- No te preocupes, Marimo, Japun están bien... Emerald y Saga están hechas un desastre.

- ¿Emerald? - Preguntó Kisa ¿Habrá sucedido algo allá? ¿Y sus padres? Si bien era cierto, le hicieron mucho daño físico y mental, pero eso no quitaba el hecho de que eran sus padres, y como hijo era natural estar preocupado.

-... Emerald fue tomada después de que los rebeldes asesinaron a los señores Kisa, y Saga pues, ya que ni Ritsu-san ni Takano-san sobrevivieron pues...

- Ya entendí - Dijo Shouta levantándose de la silla y poniendo a Ryu de regreso a la cama. - Si me disculpan, me iré a otro lugar... - Dijo con la voz algo entrecortada.

- ¿Te encuentras bien? - Preguntó Kou al escuchar su voz, juraba que su chico quería llorar, y no era para menos.

- Si, solo necesito un segundo... - Y salió de esa habitación buscando un lugar para desahogarse, no quería que nadie lo viera llorar, ni siquiera Kou, además quizá nada de lo que trate de decirle lo ayude a olvidar su dolor.

Primero su mejor amigo, al que consideraba su hermano metafórico, y ahora sus padres, solo faltaba perder a Kou o a su hijo en medio de todo este desastre.

***

Quiso ir detrás de él, pero el bebé que los acompañaba empezó a llorar al sentir que ya no estaba en los brazos de Shouta, por lo cual lo tomó y comenzó a arrullarlo esperando que con eso se calmara.

- Lo siento, no creí que esto fuera a lastimarlo tanto.

- No es tu culpa, de todas formas teníamos que estar al tanto de todo lo que está pasando.

- Aún así...

- Tranquilo, estará bien, algo me lo dice - Dijo observando a Ryu quién estaba bostezando, ya entraba el sueño en él.

- Si que eres bueno con los niños... - Habló Misaki de repente.

- Algo así, tengo una sobrina y cuando estaba en mi casa la cuidaba de vez en cuando.

- Ah, eso lo explica...

- ¿Te gustaría cargarlo?

- ¿Eh?

- Misaki, se te nota que eres tú el que quiere arrullarlo, vamos tómalo y duermelo, ya le falta poco.

Entonces Misaki tomó a Ryu quién lo miraba con curiosidad, pues era la primera vez que lo veía, pero al sentir que lo mecía de un lado a otro con mucha dedicación, fue suficiente motivo para que al fin durmiera.

- Tu también eres bueno con los niños Misaki.

- Ah, gracias, los criados tenemos que ser buenos en esto.

- Pero tú lo haces con tanta naturalidad.

- Bueno, supongo...

Misaki procedió a poner a Ryu en la cama, a arroparlo, y quién sabe que lo motivó a hacer eso, pero besó la frente del pequeño y le deseó la buenas noches.

- Eso fue muy tierno Misaki...

- Gracias, algo me dijo que necesitaba esto.

- Oye, ahora que lo pienso, si Masamune y Ritsu están muertos... ¿Eso no convertiría a Ryu en el único heredero de la provincia de Saga?

- ¿Cómo puedes decir eso? Apenas es un bebé, y ya estás pensando en hacerlo un esclavo de ese mundo.

- Lo siento, pero, es que eso también pone en peligro al niño.

- Ash... Si, él es el único, pero no debería, tú sabes mejor que nadie lo que conlleva ese destino... ¿Quisieras eso para el?

- No, pero...

- ¡Yukina-san! - Se escuchó el grito de Chiaki desde la sala, al parecer surgió algo y tenía que ir a ver.

- Tal parece que me llama ¿Te quedas con Ryu Misaki?

- Claro - Y entonces procedió a ir a la sala, y una vez ahí vio algo que le preocupó demasiado.

Su Kisa, estaba en el suelo, siendo auxiliado por Yoshino, mientras que este no hacía más que agarrarse el vientre con una notoria expresión de dolor ¿Pero que demonios sucedió?

Continuará