Capítulo 3: Juego de herederos

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- ¿Que rumores?

- Pues verás - Akihiko se paró y fijó su vista hacia la ventana, dejó salir humo de su cigarro y comenzó con su diálogo.

- Isaka planea su retiro y una de las familias dueñas de las provincias será elegida para darle el reino de Marukawa, al parecer quiere una familia con hijos, pues quiere asegurar un largo linaje.

- ¡¿Que?!

- Lo escuchaste, recuerda que desde el incidente del rey  Asahina, que en paz descanse ya no fue capaz de concebir hijos, ahora busca a alguien joven para darle el reino.

- Ese hombre está loco.

- Lo sé, pero que se puede hacer, es el rey de Marukawa.

- Así que por eso están casándose como locos.

- Así es, y puedo apostarte mi mejor libro a que ninguno de esos matrimonios durará un año.

- ¿Por qué lo cree?

- Estos jóvenes son unos tontos, para dar un paso tan grande como ese, necesitas tres cosas, que te ame, te conozca, y te desee, y lo que han hecho es simplemente bárbaro, espero y tú no tengas esa mentalidad con tu omega.

- No señor, si bien es cierto mi matrimonio es arreglado, no lo presionaría a hacer tal cosa.

- Así se habla, ahora quiero que me prometas algo.

- Usted dirá.

- Quiero que seas tú el que herede Marukawa, y cambies estás tontas costumbres.

Kou no pensó que su homólogo le fuera a pedir tal cosa, él era muy joven para tomar tal responsabilidad.

- ¿Y por qué no lo hace usted?

- Misaki y yo ya no formamos parte de eso, desde que me casé con él, además, de todos los herederos, tu eres el mejor que he visto.

- ¿Por qué lo dices?

- Me acabas de contar que no has sometido a tu omega, algo que los demás han hecho por ese trono.

- Pero... Señor

- Si no quieres que en un futuro a más personas las sometan como a ti o a Shouta, mejor haz tu mejor esfuerzo, Misaki y yo los ayudaremos.

Ahí Kou entendió, que esa era la única manera de liberar a todos del régimen del rey de todos, a ellos y a los bebés que están a punto de venir, lo decidió, el sería quién liberará a todos.

Extendió su mano a su homólogo, este entendió lo que Kou quiso decir y estrecharon manos inmediatamente.

- Se lo prometo señor Usami.

- Gracias, le estás haciendo un gran favor a Marukawa.

*****

Regresaron a su casa y pospusieron las visitas para mañana, Shouta sólo quería descansar, pero Shinobu le insistía en que, si no iban a visitar a las demás familias, por lo menos que hiciera actividades dignas de la realeza.

- Mi señor, por lo menos busque una actividad digna de realeza, como... Tejer o pintar.

- Shinobu, no soy un títere o algo por el estilo - Se dirigió a su habitación apresuradamente. - Ahora ve que nadie me moleste.

- Ni siquiera su...

- ¡Ni siquiera Yukina! - Le cerró la puerta en la cara, y se lanzó a su cama.

En cuanto fijó su vista en la mesa de noche, vio que tanto él como Kou tenían correspondencia, revisó sus cartas, la mayoría de sus conocidos felicitándole por su "perfecto matrimonio", pero hubo una en particular que llamó su atención.

Matrimonio Forzado (Yaoi) (Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora