Un mundo de magia y fantasía dominado por cinco reinos. Cuando el norte ataca a central nuestros protagonistas comienzan una aventura llena de obstáculos y romanse junto a sus amigos.
《Los personajes de Inuyasha le pertenecen enteramente Rumiko-sen...
(Espero que el vídeo se haya cargado, es el ending del animé Historias de fantasmas, me gusta mucho y quería compartirlo ^-^)
La dulce melodía de un pasado y un presente
-Matenlos, menos a la princesa, a ella llevenla al norte- ordena Magatsuhi. Sus ojos ya no eran los de un hombre endeble, ahora brillaban con una maldad insana y aterradora -Yo iré por el Dragon elemental del Oeste
Hoy no tendrían escapatoria...
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Reino del Norte, hace 19 años
Los gritos de la mujer resuenan en la pequeña choza, la partera lucha por mantenerla con vida a ella y a la criatura que está por nacer. Ésa noche, estaba particularmente silenciosa, brillante, los monstruos y bestias prescentian lo que se acercaba, era algo que no ocurría hace muchísimos años. En cada reino muchos niños estaban naciendo, pero dos serían marcados por la fortuna o la desgracia, las tinieblas estaban saliendo del averno para fundirse con cualquier ser vivo, era una profecía olvidada. Algo maligno, algo traído desde las sombras del inframundo, algo que buscaba su regreso.
La partera exige a la mujer pujar con más fuerza, la mujer, ya exhausta, puja por última vez. Entonces el horror.
La anciana sacó a lo que debió ser un bebé pero que no tenía aspecto de un recién nacido.
Un chillido ronco salió del bebé, el padre se horrorizo, la madre se sentó, a pesar del dolor, para ver a su hijo. Sus ojos se abrieron de par en par.
-¡¿Qué es éso?!- gritó.
La partera dejó a la criatura humanoide en el catre de su mamá Pero ella se puso de pie, casi cae al suelo por la prisa. Los tres en el lugar no entendían lo que éso era, el ser lloraba con su voz grave mientras los adultos morían presas del pánico. La partera no podía más con el horror, se fue histérica.
Los padres decidieron abandonar a ésa cosa parida de los infiernos en el bosque implorando muriera pronto.
Pero la criatura fue encontrada por los seres sin rostro. Entidades vaporosas que no pertenecen ni a éste mundo ni al otro, bestias sin interés diferente a sus necesidades, pero, extrañamente decidieron criar al bebé, porque era la mitad de algo que sí les interesaba. Era el comienzo de una era ya experimentada, era lo que traería de nuevo las tinieblas al mundo, era solamente la sangre de algo más grande.
Éso era él, un ser sin nombre y sin nada más que un anhelo. Destinado a traer delirio y sangre, muy pronto conocería hasta donde sus habilidades lo podrían llevar.
