Así fue como finalmente Chris y yo iniciamos oficialmente y esta vez real nuestra relación, nuestros sentimientos también lo eran.
Decidimos hacer nuestra boda, que esta vez también iba a ser real, y no era una boda en sí, si no una simulación de esta estando solo nosotros dos, ni siquiera había un sacerdote, no había nadie. Solo nos volvimos a poner nuestros atuendos, yo mi vestido y el su traje. Hicimos todo esto en nuestro jardín realmente estábamos locos por hacer esto, pero me emocionaba aún más de saber que esta vez, sería de verdad
—Elya ¿aceptas a Chris como tu legítimo esposo? Para amarlo y respetarlo, estar en las buenas y en las malas —dijo Chris haciendo otra voz.
No pude evitar soltar una risita pero asentí
—Acepto —sonreí. —Y tu Chris ¿aceptas a Elya como tu legítima esposa? Para amarla y respetarla, estar en las buenas y en las malas
—Sí, Acepto —respondió con una sonrisa.
—Ahora los declaro marido y mujer, Chris puedes besar a tu novia —habló Chris de nuevo con la otra voz.
El me tomó de la cintura y me besó, yo estaba muy contenta no pude evitar sonreír en medio del beso, luego gritamos emocionados y aventé un ramo. Después, fuimos a comer a un restaurante, estábamos muy contentos disfrutamos de la comida entre risas y miradas.
Cuando regresamos a casa vimos a Joe afuera de la puerta con un cachorrito pug.
—Hola Joe —hable emocionada, no esperaba verlo, y realmente me daba alegría verlo de nuevo.
Ya había pasado tiempo desde la última vez que lo vi, yo esperaba con ansias algún mensaje de él o una llamada, verlo por algún lado y reír como lo hacíamos, pero no fue así, me sentí triste, pero recordé que, si sería muy difícil para él, yo lo entendía.
—Hola Elya —contestó Joe sonriendo.
Joe aún se sentía un poco triste, pero llegó a la conclusión de que, si la persona que amaba era feliz sin importar que fuera con él o no, él también lo sería.
—Hola —habló Chris.
—Hola —respondió Joe.
—¿Cómo has estado?
—Muy bien ¿Y ustedes?
—Muy felices —respondió Chris mirándolo, yo solo reí nerviosa.
—Bueno, pasa, pasa —dije abriendo la puerta y haciéndome un lado para pasar.
Podría apostar que Evans estaba celoso, ¿pero de qué? Él sabe claramente que me enamoré de él y lo que pasó con Joe fue lindo pero quedó en el pasado.
—¿Y ese cachorrito? —dije acercándome con él para acariciarlo.
—Mi abuela quiso regalárselo, de hecho, es hija de Frida
—Owwwww ¿en serio? Que hermoso muchas gracias —sonreí abrazando al perrito, me sentía muy feliz y esto era muy significativo, por todo lo que pasé con su abuela al cuidar a Frida y el cómo conocí a Joe.
—De nada, mi abuela lo hizo de corazón —susurró con una sonrisa.
Sonreí conmovida, su abuela siempre fue buena conmigo y ahora con el nuevo cachorro sería de una familia para mi y para Chris.
Al despedir a Joe y acompañarlo a la puerta, lo observaba mientras se alejaba, vi cuando mi vecina y el chocaron accidentalmente, se disculparon y se quedaron mirando un rato para terminar de reír, quizás, el haya encontrado a su media naranja también
Meses pasaron y nos encontrábamos muy feliz con nuestra relación, ahora mismo nos encontrábamos en un lugar donde siempre quisimos ir, besé a Chris y el me sostenía de mi cintura, sonreí ampliamente de la felicidad que sentía
—¡Chicos volteen! —habló mi amiga Kate con una cámara en su mano.
Estábamos justo en frente de la famosa Torre Eiffel, nos habíamos venido de vacaciones a visitar a nuestra amiga. Nosotros volteamos y sonreímos para la foto, luego nos besamos.
Nunca pensé que me enamoraría así de perdidamente de mi mejor amigo, de pasar por lo que habíamos pasado, actuar un matrimonio para finalmente hacerlo realidad y terminar enamorados fue algo increíble, el haber conocido a Joe quien terminó siendo un buen amigo de nosotros. Estaba muy agradecida de todo lo que había pasado y no me arrepentía de que las cosas hayan pasado como lo fueron.
FIN
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Ahora, Casados [Chris Evans] (editando)
Short StoryElya y Chris Son un matrimonio feliz, y no, no es por lo que piensas. Son mejores amigos desde la primaria, ellos hicieron la promesa de que si llegaban a la edad de 27 años y estaban solteros se casarían. ¿Acaso la promesa perdurará? Una promesa es...