Capítulo 25

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Orlando baja lentamente una de sus manos por mi cintura y con la yema de sus dedos va rozando mi abdomen hasta llegar a mi pelvis la cual acaricia con movimientos circulares por encima de la tela de la camisa, arrebatandome un suspiro por la marav...

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Orlando baja lentamente una de sus manos por mi cintura y con la yema de sus dedos va rozando mi abdomen hasta llegar a mi pelvis la cual acaricia con movimientos circulares por encima de la tela de la camisa, arrebatandome un suspiro por la maravillosa sensación que causa en mi ese simple roce, mientras que su otra mano se queda a la altura de mi abdomen.

-Despertaste.-Digo con la voz un poco ronca por la excitación tratando de que no se note tanto, y es que no puedo creer que solo con un roze de sus dedos pueda calentarme de una forma inexplicable.

-Como quieres que no despierte cuando mi luna hace aproximadamente siete minutos dejó de acariciarme y se alejó de mí como si fuera la peste.-

¡¿Que?!

De una manera muy tierna descansa su cabeza en mi hombro haciendo que sus labios queden muy cerca de mi cuello causandome escalofríos. 

-¿Cuánto tiempo estuviste despierto?-Le pregunto un poco preocupada, No quiero que piense que me queria aprovechar de que estaba dormido...O eso era lo que pensaba.-

-Lo suficiente-

Vale esa no es la respuesta que esperaba.

Dejó el tenedor al lado de el sartén y casi me quemo de los nervios, este hombre produce mil cosas en mi, Y siento miles de mariposas en mi estómago cuando me toca o está cerca de mi, se que si el se sigue acercando asi no podre contener más mis ganas de correr y saltar arriba de sus brazos para probar por fin esos peligrosos labios que me invitan a pecar.

Y es como si el pudiera escuchar mis pensamientos o de alguna manera supiera lo que deseo y quisiera que perdiera el control, ya que la mano que estaba en mi abdomen la aleja para empezar a descender por mi brazo lentamente hasta llegar a mi mano y entrelazar nuestras manos, el por encima de la mía.

Y es como si el pudiera escuchar mis pensamientos o de alguna manera supiera lo que deseo y quisiera que perdiera el control, ya que la mano que estaba en mi abdomen la aleja para empezar a descender por mi brazo lentamente hasta llegar a mi mano ...

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Pero de pronto se aleja de mí bruscamente lo cual me descoloca, Yo extrañada me volteo y veo en sus ojos puedo ver el arrepentimiento reflejado.

¿Se arrepiente de tocarme? ¿Hice algo malo?

-Yo, Lo siento Jessica-És lo que dice antes de correr hacia la puerta que da al patio, y me duele, ¿El no me desea como yo a el? ¿Le parezco fea acaso? ¿Hice algo mal? Pero no dejaré que se valla asi como si nada, Apago el sartén sin importarme si algo le pasa a las arepas y salgo corriendo detrás de él.

Ojos De LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora