El hilo rojo es un hilo que conecta a dos personas que son almas gemelas o están destinadas a estar juntos, El hilo se puede tensar y enredar pero nunca romper.
¿Pero porque el destino conectaria a dos personas que están destinados a matarse?
¿Porqu...
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JESSICA
Aun no puedo creer lo que paso hace apenas dos dias, ¿Como pude ser tan estupida? es la pregunta a la que nunca le tengo una respuesta, como pude ser tan imbecil como para seguir a un jodido cuervo. Y aun peor, como pude ser capaz de hacerle daño gravemente a Kayla, por mas que la odie y la deteste tampoco se merecia eso... O tal vez si pero esa no es la manera de solucionar las cosas, la violencia solo atrae mas violencia y miedo pero esa voz en mi mente, se me era tan familiar, tan calida y placentera que me era imposible detenerme, como si no fuera la primera vez que la escuchara y eso es lo que mas me confunde.
Tambien esta esa imagen de esas personas, Lisbeth y Bord, todo es tan confuso ¿Porque sueño con ellos? ¿Quienes son? ¿Porque esa chica tiene mi mismo apellido? ¿Porque tiene los ojos blancos? ¿Porque el cuervo me llevo a ese mismo barranco? son tantas preguntas y ninguna con respuesta.
Por otro lado esta el, el hombre que me hace perder la cordura y me hace desearlo de una manera intensa y descarada, aun no me saco de la cabeza el momento en el que las cosas se salieron de control, pero mas el momento en el que mi cuello comenzo a picar y arder cuando puso sus labios en esa zona besandola y aliviando mi dolor. El como sus manos estaban en mi torso, o el como con sus roces me erizaba la piel... La dureza de su miembro al chocar con mi sexo y yo solo queria provocar mas de esa friccion.
Jess basta.
Llegue a mis propias conclusiones, y es que con todo lo que ha pasado, desde el momento en el que Orlando me otorgo esta habitacion y Carly dijo que era reservada para su mate y luna de la manada, el secretismo con todos los demas hacia mi y la manera tan intensa con la que son las cosas junto a el me atreveria a decir que yo soy su mate, su pareja de vida. ¿Que otra cosa podria ser?.
Tenia dudas pero en el momento en el que mi cuello reacciono de esa forma se aclararon mis dudas, mi cuerpo me pide ser marcada por el. Pero...¿Yo quiero que me marque?
-Señorita la cena esta servida.-Salgo de mis pensamientos al escuchar la voz de la chica del servicio en el umbral de mi puerta con la cabeza gacha mostrando respecto y las manos enlazadas en sus piernas, si no me equivoco se llama Angela.
-Gracias, bajo en un rato... ¿Angela?-Digo y le dirijo una sonrisa a la chica antes de ponerme los zapatos deportivos y soltarme el cabello, ella solo asiente con la cabeza y se disculpa por cortesia antes de retirarse, estos dias que me ha estado atendieno y tratando muy bien he conversado un poco con ella y pedido que dejara a un lado las formalidades pero parece que se hizo oidos sordos. Dejo a Prinn en la cama con unas nueces y ella las tomas con sus manitas para ir corriendo a ocultarlas en un estante del armario. En el momento en el que volvi inconciente en los brazos de Orlando para dejarme en la habitacion se percato de ella y me dejo tenerla conmigo sin oponerse en ningun momento, cosa que me hizo abrazarlo de euforia. Incluso le compro una jaula por si en algun momento queria asegurarme de que no escapara junto a nueces y un collerin de placa, con mi nombre escrito en el y la direccion de la casa. Cierro la puerta cuando salgo de mi habitacion y camino por el pasillo en direccion al comedor.
