Todo por ti pequeño ╠Joerick╣

10

Joel

Ver a Erick tan cerca de él me enojó bastante y me jodió más que le estuviera sonriendo.

-Erick- Envolví un brazo alrededor de su cintura- vine a llevarte a casa.

Erick parecía muy confudido por mi reacción.

-Joel, dije que tomaría un taxi- Se removió en mis brazos tratando de soltarse, pero yo apreté más mi agarre evitando que se alejara.

-Er, vámonos.

Sus ojos verdes me veían de mal manera, seguramente debe ser porque he ignorado a ese idiota desde un inicio.

-Joel no seas grosero- Estaba enojado- es el doctor Zabdiel de Jesús.

-Mucho gusto- me extendió su mano pero no la agarré- seré el doctor que llevará el control de Erick.

-¡Joel!- Erick me pegó con su codo.

-Sí, como sea, soy Joel el novio de Erick- agarré nuevamente su cintura.

-No es mi novio- aclaró.

-No hay problema Erick

cualquier consulta ya tienes mi número.

-Muchas gracias- respondió con su hermosa sonrisa

Erick era demasiado bonito, tal vez nunca se lo diría, pero cualquiera quisiera estar con él, cosa que me enfurecia pensar que otro tocara lo que es mío.

-Joel no tenías por que ser tan grosero- Dijo haciendo un puchero.

Que adorable y caliente se veía.

Joder, cómo es eso posible.

-Te agende una revisión con una doctora, no con un doctor.

-No fue mi culpa que aquella mujer no haya ido y me ha antendido Zabdiel.

-Vaya, pero cuanta confianza lo llamas por su nombre, pensé que la profesionalidad iba primero.

-Joel por favor- rodó los ojos

Mierda lo hizo otra vez, estacioné el auto a un lado de la carretera, tenía una gran erección y empezaba a doler

Necesitaba probar sus carnosos labios.

-Que...

Junté nuestros labios sorprendiendo a Erick que movía sus labios torpemente, sus labios eran tan suaves como imaginé. No sé por qué no lo había hecho antes.

Quería más.

Su boca se abrió dándome paso, para meter mi lengua, explorando su cavidad bucal.

Pequeños supiros salían de él.

De un moviento lo coloqué sobre mi regazo, empezó a moverse sobre mi pene, aumentando la presión. Nuestro beso se intensificó, bajé mis manos hasta llegar a su culo y apretarlo.

Su mano se coló entre mi ropa interior tomando mi pene dándole un suave apretón.

Ambos soltamos un gemido.

Erick se quitó toda su ropa, quedando totalmente desnudo, su cuerpo era una maravilla quería recorrerlo cada rincón con mi lengua. Su rostro es perfecto y el rubor en sus mejillas lo hacía ver tan inocente.

Todo completamente mío.

Desabrochó mi pantalón, sacando mi pene que chorreaba pre-semen.

Con su mano lo guió hasta su pequeña entrada, sentándose sobre mi pene por completo. Tratando de acostumbrarse a mi tamaño para empezar a moverse.

Mierda.

Me encanta como se siente estar dentro de él. Me estaba montando, demasiado bien.

-Mmm- Gimió.

Tenía su labio inferior atrapado entre sus dientes, aún montándome se veía adorable.

Atrapé con mi boca sus labios, merdiéndolo. Estaba a punto de correrse.

Con mis manos sobre su trasero lo ayudaba con sus movimientos.

-Joel- jadeó.

Corriéndose sobre mi suéter dejándole una gran mancha, sus paredes se contrajeron sobre mi pene expulsando mi semilla, llenándolo por completo.

-Tengo Hambre- Apoyó su frente con la mía.

Su jugosa boca estaba muy cerca, por lo que besé sus labios chupandolos suavemente.

-Que te parece pasta nene.

Tomé del asiento trasero un suéter negro para canbiarme, me lo quité para dárselo y que se limpiara.

-

No, quiero Hanbruguesa con papas- hizo puchero

Lástima que estábamos en mi auto y en una autopista, que por suerte no estaba tan transitada. Sino me lo seguiría cogiendo.

Le di otro beso

-Está bien, hamburguesas y papas para mi bebé.