Dos

504 60 4
                                    

Dos: Frío.

El reloj de la pared seguía sonando constantemente mientras era contrastado por el sonido de la mochila al moverse de lugar.

Cuatro en punto.

Yoongi suspiró mientras finalmente ataba sus zapatillas y se acomodaba su mochila, caminando fuera de su hogar.

Mientras sus pies generaban un pequeño eco con el cemento, pudo escuchar a lo lejos una risa bastante familiar. Con los pelos de punta, se giró hacia un parque.

Taehyung estaba ahí, con un spray en su mano mientras se reía de alguna cosa que habría dicho Namjoon.

Bastó un parpadeo para que la imagen se volviera difusa. Ellos no estaban ahí realmente.

Yoongi comenzó a hiperventilar, su mente pareciendo estar dispuesta a nunca dejarlos ir.

Namjoon giró su vista, y sintió que ya era su fin.

Volvió a negar con la cabeza mientras caminaba, no quería que se acercaran, no quería que le hablaran.

— ¡Yoongi!—  Su corrida se detuvo cuando escuchó el grito, se giró lentamente. En frente suyo venían corriendo los dos chicos.

— Diablos Yoongi... Es verdad—  Namjoon le miraba asombrado mientras Tae sonreía de oreja a oreja.

— ¡Kookie tenía razón! ¡Puedes vernos! ¡Puede verme!—  El castaño comenzó a sacudir a Namjoon lleno de alegría—  Puedes verme ¿cierto? — Yoongi no reaccionaba a sus palabras— ¡Mírame! ¡No quiero ser el único al que no veas!

— Si puedo verte, así que deja de gritar— Por un segundo el rubio se sintió preso en la nostalgia, pensó que nunca en su vida iba a volver a regañar a Kim Taehyung.

Taehyung volvió a gritar de la emoción mientras volvía a sacudir el hombro de su amigo. Namjoon miró a Yoongi a los ojos y este supo de inmediato la pregunta del azabache.

— No, no estoy bien— Yoongi comenzó a negar, su mirada fijándose a su alrededor, esperando que nadie lo viera— ¿si quiera esto es real, Joon? ¿Si quiera puedo afirmar si ustedes son algo real? ¡Se fueron hace dos malditos años!

— Dos años y tres meses, en realidad.

— ¡Eso no mejora nada Namjoon! —El rubio se sujetó sus cabellos durante unos segundos, antes de suspirar. — Pásenme sus manos.

Ambos chicos miraron curiosos a Yoongi, quien mantuvo su mirada baja mientras extendía las sus manos.

— Yoongi...

— ¡Háganme caso!— Ante el grito los dos se alteraron. Obedeciendo ante las palabras del mayor.

Yoongi sintió que las lágrimas se iban a escapar de sus ojos.

Pudo sentir las manos, ambas sobre las suyas. Pero estaban frías, demasiado frías.

— ¿Porqué están aquí?— Yoongi se separó de ambos chicos tratando de evitar que las lágrimas salieran de sus ojos.

— Yoongi...— Taehyung trató de acercarse, mas el rubio se lo impidió.

— No quiero nada de lástima, de ninguno de los dos— Yoongi los miró seriamente, advertencia alumbrando su mirada— N-Nada en mi vida es igual desde que desperté, todo se siente demasiado vacío, demasiado aburrido y yo...— Yoongi tuvo que cubrir su rostro para evitar que las lágrimas cayeran— Quiero volver a estar con ustedes, chicos, quiero volver a estar seguro, quiero que la gente deje de mirarme con pena ¡No estoy sólo maldita sea! Si ustedes siguen aquí, no estaré sólo...

Yoongi bajó la mirada a sus pies, sus ojos picando cada vez más.

— ¿De verdad estás sólo?

Un escalofrío recorrió su cuerpo antes de volver a alzar la mirada, Taehyung ya no estaba, Namjoon sólo le miró un segundo antes de girar y desaparecer.

Ese día, hubo mucho frío.

AloneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora