I'll Always Be Right There

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Me desperté de golpe, gritando y sudando frío como varias noches ya, pase las manos por mi rostro tratando inútilmente de quitar los residuos de mi pesadilla, obviamente y como veces anteriores no funcionó los recuerdos que conservaba de ese sitio seguían siendo tan reales y retorcidos como el primer día que había veces que temía abrir los ojos y descubrir que nunca había salido de ese lugar, que mi mente me había jugado una broma y en mi locura el estar en el Campamento Mestizo era sólo parte de la alucinación y que yo seguía ahí en el fondo Tártaro.

Con un suspiro me levanté dispuesto a cambiarme la playera y agradeciendo mentalmente que Hazel no se encontrará en la cabaña esta vez mi pequeña hermana solía ser un buen remedio para mis pesadillas, se quedaba hablando conmigo, intentando distraer mi mente pero sabía que le preocupaba la forma en que despertaba gritando como un desquiciado, ¿pero como le explicaba a mi dulce hermana lo que era tener una pesadilla sobre un sitio del que parecía nunca iba a lograr salir? Al menos de forma mental seguía estando en ese foso con la desesperación consumiendo mi voluntad de poco en poco. Un grito me hizo alzar una ceja con un poco de humor y una sensación de vacío.

Mis colegas de pesadillas...

Casi podía ver a Percy salir en pos del grito de su novia me conformaba con saber que al menos ellos no pasaban por el despertar sin nadie a su lado al menos no tenían que explicar lo que pasaba, ellos se limitaban a tranquilizarse entre sí, intentando olvidar. Había gente afortunada en el mundo aunque el que hubiesen caído a ese lugar no pareciera la mejor racha del universo ellos no habían pasado por eso solos en cambio yo si lo había hecho.

Suspire y con un bufido desentierro la autocompasión de mi mente no era el momento para eso necesitaba una aspirina para mi dolor de cabeza iría por esa pastilla e intentaría dormir un poco más. Con eso en mente salí de mi cabaña, agradeciendo el fresco que había dejado la ligera "llovizna" que habían dejado entrar en el campo, «las fresas necesitaban regarse» había sido la única justificación del señor D antes de dejarnos caer una tormenta encima.

Viejo borracho y cretino...

Murmure para mis adentros mientras pasaba mi vista ajustada ya a la escasa luz de la luna por los alrededores nunca se sabía cuando te saldría una arpía por la espalda y definitivamente no quería darle explicaciones a mi padre del por que había una arpía vagando en el inframundo a las tres de la mañana.

Seguí mi camino graciosamente odiaba el olor de la enfermería pero sabía perfectamente como llegar y entrar sin ser detectado.

Otro magnífico don de ser hijo de Hades ¡tomen eso hijos de Hermes!

Pensé mientras entraba sigilosamente en el lugar el olor a antiséptico y ambrosía inundó mis fosas nasales y aspire con nostalgia, la ambrosía sabia diferente para cada semidiós para mí sabia a un spaghetti tradicional italiano sabor a hogar y vagos recuerdos de mi madre, era reconfortante y nostálgico a la vez Jason había usado un término sabiondo para describirlo la única vez que lo mencione él dijo

«Agridulce».

Y el desgraciado tenía razón. Obviamente mi orgullo lo había mandado de paseo pero él me sonrió tan cálidamente que me sentí culpable de inmediato.

«Para mí sabe igual, sé cómo se siente Nico, no estás solo lo sabes ¿verdad?».

El saberlo y demostrarlo no es lo mismo Grace...

Recordé las palabras que él había dicho antes de salir disparado a Nueva Roma aunque ya no fuera un pretor siempre necesitaban la opinión sensata de Jason Grace y por supuesto Jason nunca decía que no a sus conciudadanos.

Percabeth One-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora