Hoy por fin es el día, mi querida Bella se casa con el amor de su vida, después de tanto esperar la ansiada boda, ahora mi hermano, mi madre y yo nos estamos arreglando para ir a su boda, Leah no quiso ir, y la entiendo.
Sam no está de acuerdo en que vayamos, pero me da igual lo que piense, además no puede decir nada ya que dos miembros del Consejo Irán con nosotros, los Cullen son mis amigos y por nada en el mundo los dejaría de lado y menos a Bella y Edward en un día tan especial como este.
Mi madre también irá, ella estará con Charlie algo sospechoso para mi, al igual que Billie quien ira también.
Mi madre desde que llegue he notado que tiene algo con el Cherif, y pues la verdad no me molesta en lo absoluto, es bueno que quiera rehacer su vida con alguien mas yo solo quiero ver feliz a mi madre.
Por otro lado Paul ya está mejor, se ve un poco más gordito, claro que sin perder la forma de sus músculos, Sam aprovechó que ya sale de su casa y come para mandarlo a dar rondas por el perímetro, maldito aprovechado.Hoy abran más vampiros que de costumbre eso me pone nerviosa y por lo que Sam esta muy alterado mandando a los chicos a revisar que nadie cruce el límite hacia nosotros, estoy segura que si por el fuera ya ahora mismo estaría tratando de arrancar Cabezas y pues claro que no puede hacer nada, ya que no es territorio suyo como para llegar en medio de la boda a matar vampiros, no se lo permitirían.
Termine de arreglar y baje ala Sala, me había maquillado algo sencillo, ate dos mechones de cabello atrás de mi cabeza dejando lucir mi cabello ondulado y me puse un vestido largo muy hermoso.
El que Alice y Rosalie habían batallado para encontrarlo, fue una muy buena elección entre las tres, me puse unas zapatillas altas del mismo color.Tome mi bolso, dejando dentro algo de dinero y mi móvil junto a unas cosas más, tome las llaves de mi auto y baje donde mi hermano esperaba por mi.
Charlie había pasado por mamá, después pasarían por Billie, habíamos quedado en vernos todos allá, termine de bajar las escaleras.-Creí que tardarias más.
-No seas quejoso hermano, no tarde nada. -salimos de la casa montandonos en mi auto-
-¿Que las chicas no se tardan siempre en "arreglarse"? -hizo comillas con sus dedos en la última palabra, levante mi mano dándole un golpe en el hombro-
-¿Por que hiciste eso? -pregunto mientras se sobaba su hombro-
-No seas llorón, cuando encuentres a tu impronta veras lo que es esperar a que se termine de arreglar, al último valdrá la espera.
-Si tu lo dices
-¿Como que si yo lo digo? -encendi el auto, pise el acelerador echando a andar el auto, íbamos unos minutos tarde-
-Ya como sea, no hablemos de eso. -rode los ojos y asenti.
Llegamos a la casa de los Cullen, habían varios autos enfrente de esta, mi madre y Billie esperaban por nosotros fuera de la casa, nos bajamos rápido del auto no sin antes poner seguro y la alarma por si acaso.