Cap.18 [Editando]

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-¡Alice! -la regañe por décima ves-

-¡Quiero ver como se ve! -se escuso como niña pequeña-

-Deja que se mida el vestido tranquila, además de que si sigues así terminarán echandonos de aquí. -habló Rosalie, ella siempre me entiende-

-¡Pero quiero verla!

-Ya, ya, estoy lista -salí del probador mostrando un vestido azul largo de noche, tenía un gran escote en la espalda que llegaba por encima de la cintura, era hermoso pero no me convencía-

-No -fue lo único que dijo Alice, mire a Rosalie, ella solo dijo un no con la cabeza, suspire cansada-

-¡Ya son como 20 vestidos y ninguno les gusta!

-No es nuestra culpa, es de las diseñadoras que no hacen bien su trabajo. -rode los ojos, tome el vestido que me tendía Rosalie esta sería el último que me provaria y mi última opción.
Ya que hemos hido a todas las tiendas de ropa que hay en PortAngeles y ninguno nos gusto, o almenos a Alice, aún recuerdo que dijo: "Si no encontramos uno, yo te diseñare uno totalmente hermoso", solo espero poder contar con este último, temo a lo que pueda crear Alice.

Me coloque el vestido, no baje la mirada a mi cuerpo, no quería ver si me quedaba bien o no, salí del vestidor topandome con dos miradas sorprendidas de mis amigas.

-¡Lo he encontrado! -exclamó Alice emocionada, suspire alivada-

-Será ese entonces -aclaro Rosalie ala chica que nos ayudaba en este caso a buscar los vestidos-

-Por fin -susurro, entre de nuevo al vestidor, quite el vestido volviendome a poner de nuevo mi ropa, pagamos el vestido y salimos del local.

Regresamos a casa, bueno de los Cullen no mía, ya tenía que regresar a casa a ver a mi familia.

Hable con los Cullen sobre eso, estuvieron de acuerdo, decía que ya era hora de afrontar las cosas, tome las bolsas de ropa que Rosalie me compró y las subí al auto, maneje alejandome de la casa directo ala reserva, a lo lejos pude notar a los chicos correr hacia mi casa, ¿que estará pasando?, se detuvieron a medio camino al notar mi auto, subí los vidrios impidiendo la vista hacia dentro del coche, pude notar una pisca de desconfíanza en Sam.

Acelere más levantando en polvo en el trayecto, estacione enfrente de mi casa, Leah salió junto a mamá y Seth, se quedaron viendo el auto muy raro, los chicos igual miraban raro el auto pero a una distancia considerable, el sonido del motor los debió de haber llamado, era un poco fuerte, y más para nuestros oídos desarollados.

Muy bien, es hora, respire hondo y apague el motor, abri la puerta del auto despacio, saque una pierna, mire hacia los chicos viendo quienes eran los que estaban, todos menos Jake y Paul. ¿Donde se metió Jake?.

Baje por completo del auto, la mirada de mi madre fue de sorpresa, yo sonreí melancólica, la había extrañado mucho, camine hacia ella y en minutos ya me encontraba abrazando a mi mamá y a Leah, Seth me abrazaba por la espalda, era una escena hermosa para cualquiera que pasará y viera esto.

-Te extrañamos mucho hija -dijo mi mamá con la voz algo rota-

-Saben que fue lo mejor, aún que la verdad me arrepiento un poco -dije aún en el abrazo-

-Yo igual, nunca debi de alejarte, debi de haberte hecho afrontar las cosas como buena Clearwater.

-Deberías ser un poco como Leah hermanita -todos reimos-

-Soy una maldita, debes saber y ser eso también tu -habló Leah ganandose un golpe en la cabeza por parte de mama-

-Mide tus palabras Leah -la regaño mama, Seth soltó una carcajada muy sonora- eres una señorita descente.

-Oh vamos, si es verdad -el abrazo término, Leah se me quedo viendo- tu debes de tener una pisca también, por algo eres una Clearwater y de descente no tengo nada.

-Aun que no creas, eres más amable hermana -Dijo Seth despues de tanta plática, escuchamos un carraspeo, rode los ojos sabiendo quien era esa persona-

-¿Terminaron? -pregunto con seriedad-

-Eso a ti que te importa -¿Quien se cree para llegar de ese modo?-

-Soy tu Alfa, Beth, Manten respeto hacia mi -me habló de una manera que nunca había escuchado de el-

-Y tu manten respeto hacia ella, que no tengas familia con la que pasar tiempo es muy tu problema, a ella dejala tranquila -Sam se giro dejandome ver a un Paul flaco y ojeroso.
Ahora tenia unos jeans recortados por la rodilla y una camiseta blanca, pero aún así se podía notar que su cuerpo no era el mismo de siempre, ya no tenia esos músculos de antes.

Su mirada viajó a la mía, tenia un brillo único cuando me vio, su mirada viajó hacia Sam dedicando una de furia y enojo mezclado para un solo cuerpo, mucho para un Paul.

-¿Ahora le defiendes?, ¿despues de todo lo que hizo?

-Lo que hizo fue lo correcto, yo hubiera reaccionado de la misma manera, Sam.

-Vaya el gran Paul Lahot haciendo acto de presencia, ¿Como has estado amigo? -Se burló Sam, admito que esto no me esta gustando-

-Eso no es de tu incumbencia, Sam, ¿Como ha estado Emily?, me entere que tuvieron un "problema". -contra atacó Paul, note como Sam apretaba sus puños con Fuerza-

-Mamá, has que todos se vayan despues de lo que are. -susurre muy cera de ella, ella solo le atinó a asentir.

Empuje a Sam con fuerza quitandolo de mi camino, se que al último me arrepentíre de hacer esto, pero ya es muy tarde para arrepentirme, a paso rápido sujete la mano de Paul y lo lleve dentro de la casa de mamá, subimos a la que antes era mi habitación o sigue siendo mia, entramos y cerré la puerta detrás de mi con ceguro, camine a paso rápido a la ventana y la cerre junto ala cortina, no quería a chismosos o a algunos fijones en mi ventana.
Me apoye en la pequeña mesa donde antes hacia sus tareas Seth con ayuda mía, cerré mis ojos soltando un gran gruñido y tratando de controlarme, estaba molesta, muy molesta por esa estúpida actitud que Sam tomó.

Desde un inicio nunca me callo bien, pero siempre intente hacer lo posible por llevar la fiesta en paz, lo hacía por los chicos y mi madre, aún que ahora ya no sea posible, ¿Donde estara Jacob?, el hubiera sido un buen Alfa, ¡el si me agrada!.

-¿Estas bien? -pregunto Paul, su vos era la de siempre, aun que ahora hablaba mucho más bajo.

Yo solo asenti, me gire aun con los ojos cerrados y mi cabeza baja, me apoye en esa mesita pereciendo estar sentada en ella, no abri en ningún momento mis ojos, no tenía la valentía suficiente como para ver a Paul.

-¿Estas molesta? -pregunto de nuevo, asenti, esto se está haciendo incómodo-

-¿Conmigo? -abri mis ojos, note de reojo como su mirada buscaba la mía, pero aún mantenía yo mi cabeza agachada-

-Contigo ya no, ahora sólo siento culpa, me siento mal. -dije sincera-

-¿Culpa de que?

-Ve como estas, no te reconozco Paul, has cambiado mucho. -me relaje, mi vos sonaba triste-

-Pero no es tu culpa Beth, se que lo que hice estuvo muy mal, fui un estúpido.

-Y yo una idiota, no soy perfecta -Al fin levante mi cabeza, sus ojos toparon con los míos mandándome una descarga por todo mi cuerpo, es increíble como con tan solo una mirada el puede lograr en mi lo que sea.

Beth Clearwater [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora