¿Hay Mañana?// INCOMPLETA

Capitulo XVIII: Sin Rumbo

Cooper freno en la puerta del hospital. El Bus era largo, aproximadamente 40 metros de largo, quizá más. Era completamente de color amarillo. Le faltaban algunos asientos, algunas ventanas, y parte del techo, Un agujero, justo en los últimos tres lugares de atrás. Solo habían pasado 40 minutos de la llamada de Cooper, había tardado ya que había llenado el bus de provisiones, lo que nos daría varios días más de supervivencia. Al llegar, comenzó a tocar bocina con desesperación, algo había pasado. Di la orden para que preparan a Presto, aunque aún no había despertado. Todos ayudaron, prepararon todo, los botiquines, la camilla, algunas sábanas, todo para que viajará lo más cómodo posible.
Salí yo solo al encuentro con Cooper, había que estar seguro de todo. El perímetro, lo que nos esperaba afuera, todo.
-Tomas! Los vi. Demonios, ví la nave dirigiéndose para el pueblo. Saben que estamos aquí, vendrán por nosotros.
Cooper comenzó a gritar y a desesperarse. Veía el miedo en sus ojos, el no quería morir.

-Tranquilo hombre- Lo agarre por los hombros, y lo mire fijo a los ojos- Cargaremos todo e iremos.

De repente, me quede estrupefacto. Mis ojos no creían lo que veían. Y en ese momento, mis ojos tambien se llenaron de miedo. Cooper se aterró, y vi como su expresión decía que el no quería darse vuelta y ver lo que mis ojos veían. Pero su subconsciente pudo más, y termino por darse vuelta.

-Ya llegaron- Fue lo unico que llego a decir, antes de salir corriendo para adentro del hospital.

Una nave enorme se acercaba por el extremo norte del pueblo, justo la dirección en la que debíamos partir. La nave tenía un largo de 200 metros, quizá mas. Tenía forma de rombo, un color gris que se reflejaba con las luces del sol, que comenzaba a amanecer. En algún punto te vislumbraba. Unas luces de color verde oscuro, y emanaban una señal constante. No sabría decir a que altura estaba, pero por la sombra que emitía en el pueblo, debía estar muy alto. No se si nos estaban buscando, pero en verdad no quería que nos encontraran.

Entre corriendo al hospital, Cooper estaba frente a todos. Nadie hablaba, todos estaban congelados. Cuando entre todos me miraron, y vi el pánico en la mayoría de ellos. Kerlos, por su parte, no tenía miedo, era una soldado, su deber estaba allí afuera, y si debía morir, lo haría sirviendo.
Me acerqué a ellos, apoye mí mano en el hombro de Cooper, los mire a todos, y dije
-Los Lumis nos han encontrado, y ya están aquí. Su nave está sobrevolando el pueblo. No pasará mucho tiempo antes de que nos encuentren.
-¿ Y que podemos hacer?- Pregunto la doctora Bagher.
-Creo que podemos pensar un plan de escape- Dije, todos miraban al piso y nadie levantó la mirada- Cooper, quiero que traigas el bus a la parte trasera del hospital, allí debe haber una puerta, subiremos todo al bus por ahí, y veremos cómo salir de esta maldita trampa mortal.
Cooper, sin levantar su mirada, asintió en silencio, y se dirigió a la puerta. Los demás fueron dentro de la habitación para buscar a Presto.
Kerlos me miró, y se acercó lento hacia mí.
-Sabes que no todo saldrá bien- Dijo, mientras me miraba fijo y yo bajaba la miraba.
-No vi esto- Dije, mientras me daba vuelta, y miraba para el lado de la salida. Una luz la cual estaba sobre nosotros se apagó. Ya estaban desconectado la electricidad, la luz del sol entraba por las ventanas y nos iluminaba- No tuve ninguna visión. No soy el elegido, ni el preparado, ni nada. En estos momentos soy un humano más, estoy solo con ustedes.

-Preparémonos para morir entonces- Dijo, y comenzó a caminar hacia la puerta trasera del hospital. El silencio, un silencio extraño recorrió todo el lugar. Ni la mas mínima respiración se oía. Un silencio de muerte.

De repente y sin previo aviso, un grito provino de la puerta del hospital.

-¡TOMÁS!

Era Cooper, quien grito aterrado. Kerlos reacciono antes que yo, y comenzó a correr hacia la puerta delantera, detrás fui yo.