No eres peligrosa-Bbrae-

Capitulo 6: Extraños desconocidos

El camino es silencioso, demasiado en realidad, no lo sé, hay algo que no me da buena espina con este hombre. Aprieto la mano de Gar preocupada, este me mira de igual manera, pero a pesar de todo sonríe. Sin pensármelo me acercó y tomo su mano de mejor manera. Él parece sorprendido pero me acepta.

-¿Y bien?, ¿ustedes sin novios?-Pregunta finalmente el hombre, pero ninguno responde.-¿Son algo tímidos verdad chicos?, no importa, comprendo el porqué, y pueden estar tranquilos, no les haré daño, solo quiero ayudarlos, ayudo niños como ustedes, perdidos.-Nosotros nos miramos entre nosotros con disimulo. -Por cierto mi nombre es Elias.-Solo asentimos. El viaje sigue hasta que llegamos a una gran casa de color blanco, Elias nos ayuda a bajar, y nos guía hasta la casa, pero en ningún momento suelto la mano de Garfield. Elias deja su abrigo sobre el sofá de la entrada y nos da un tour por su casa.-Este es el salón y aquí la sala de estar de la primera planta.-¿Primera planta?.-Síganme. Les presentaré a alguien.-Lo seguimos hasta lo que parece ser la cocina y allí hay una mujer cocinando, está se voltea y nos mira sorprendida.

-¿Cariño, quienes son?.-Nos apunta

-Mi vida, ellos son invitados nuevos, los encontré a la orilla de la carretera, no se ven muy bien.-La mujer se acerca a nosotros y toma nuestro rostro en sus manos.

-Ohh Dios. Pobrecitos. Deben estar exhaustos, ya no tienen que preocuparse más, querido, muéstrales sus habitaciones para que descansen y luego bajen a cenar, la comida estará lista.-Ella nos sonríe.-Por cierto, soy Miriam. Oh y cariño.-Llama a su esposo.-Avisa a los demás que la comida está casi lista.-Elias asiente y nos guía hasta el segundo piso. En donde paramos frente a una de las tantas habitaciones qué hay, esta es la tuya pequeña.-Me sonríe y abre la puerta, dejándome anonadada con lo qué hay dentro, es hermosa. Entro y miro a mi alrededor, Gar esta igual que yo.-Espero que estés cómoda querida, sígueme hijo, tu habitación está en la plata de arriba.-Me detengo y abro mis ojos de par en par, Gar no estará en el mismo piso que yo, eso no me agrada. Al parecer el noto lo mismo que yo, ya que miro a nuestro anfitrión sorprendido.-¿Que sucede chicos?

-¿Estaré lejos de ella?.-Pregunto Gar volviendo a tomar mi mano.

-Lamentablemente no tenemos habitaciones cercanas en este piso disponibles, pero no se preocupen, no pasara nada malo, se los prometo.-Mire a Gar preocupada, esto no me gustaba para nada.-Pueden visitarse siempre que quieran, ademas, arriba esta la sala de juegos y algunos chicos con los que se que te llevarías genial hijo.-Nos sonrió amablemente, y no se porque, pero hay algo en esa sonrisa que me da mala espina. Pero no podía hacer mucho, así que mire a Garfield y asentí, dejando que se vaya, y que entendiera que todo estaría bien, al menos por ahora. El asintió y siguió a Elias hasta su cuarto, yo por mi parte entre al mio y deje mis cosas, aun no conocía todo aquí, pero si se algo, debo irme con cuidado, algo me dice que ellos no son precisamente lo que dicen ser.

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3 días después...

Desde que llegamos aquí las cosas han sido extrañas, estas personas son realmente misteriosas, por momentos siento que nos ocultan cosas, y por otros parecen normales, aunque extremadamente perfectos, eso no es normal. Con el paso de los días he ido conociendo al resto de los chicos que aquí viven, todos son simpáticos, pero también son raros, aunque no como Miriam y Elias, ellos son los mas extraños aquí. Cada noche, después de terminar de comer Elias se va y no vuelve hasta el amanecer, no se que hace o donde. Y cada noche se escuchan muchos ruidos del sótano. Asustada salgo de mi cuarto y bajo para inspeccionar. Los ruidos se hacen más fuertes a medida que me acercó. Cuando por fin logró entrar lo que veo me deja helada, hay un montón de utensilios extraños, máquinas, camillas y jaulas. ¿qué demonios está pasando aquí. Rápidamente subo de nuevo y corría mi habitación, este lugar es escalofriante, ¿que será lo que hacen allí?, lo tengo que averiguar.
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Termino de ordenar mi cama y saco la ropa que me pondré, dicho sea de paso que me han dado mas ropa, cosa que agradezco, aunque no sea muy mi estilo, agradezco tener ropa limpia. Me ducho y visto rápidamente y decido bajar para ayudar a Miriam, la encuentro en la cocina como cada mañana preparándonos el desayuno.

-Buenos dias Rach.-Me saluda ella con su usual tono tierno.

-Buenos días Miriam.

-¿Has dormido bien?-

-Si, gracias, ¿Necesitas ayuda?

-Claro, podrías poner los hot cakes y el café mientras termino de preparar los huevos y las tostadas?-Yo asiento y hago lo que me pide. De la nada escucho un ruido que viene de la planta de abajo, siempre escucho ruidos de allí, cosa que me parece extraño, pues, según Miriam y Elias solo usan ese lugar para almacenar cosas. Le resto importancia y termino de ayudarle. Tras unos minutos el resto baja, incluyendo a Gar, el cual he tenido pocas oportunidades para siquiera hablar con el, baja riendose junto a Tommy, uno de los chicos de nuestra edad. El desayuno transcurre normal, al terminar los chicos se van, incluido Gar, como siempre que acabamos de comer, por mi parte decidí ir a la biblioteca por un libro, al tenerlo volví a mi cuarto, donde suelo pasar la mayoría del día, si es que no estoy ayudando a Miriam. Cuando voy por la mitad del libro alguien toca mi puerta.

-¿Quien?-Pregunto sin apartar la vista del libro.

-Rach.-Es Gar.-Soy yo, ¿Puedo entrar?...