Como Tú (Tom Hiddleston Fanfiction)

12. Karaoke!

Entré al edificio, un restaurant de comida asiática, y es que a Mel le encantaba el sushi, por suerte a mí también, así que al menos me alegraría comer algo delicioso en la velada.

-Zoe!- Mel parecía volver a respirar mientras veía que yo entraba, como si pensara que yo no aparecería, pero la verdad es que si prometía algo no lo dejaría, y menos por mi amiguita.

-te presento a Dan, Dan ella es Zoe- ambos estrechamos nuestras manos, cuando vi que la chica había pintado una sonrisa de oreja a oreja, ya lo sabía, seguramente Tom estaba detrás mío, y así lo era.

-siento la demora, el transito estaba algo pesado… lo siento-

-no, no te disculpes- ella lo tomo de la mano, y fuimos a la mesa destinada para nosotros.

-Dan es mi compañero de yoga- menciona Mel tratando de darme algo de charla

-yoga?- sonreí “yoga, en serio Mel?...” la miré

-el yoga es bueno- añade Tom, algo me decía que esa noche iba a ser insoportable, además de la risa exagerada de Mel por todo lo que decía Hiddleston.

Llegó la comida, rápidamente para callarme y no decir alguna estupidez me metí uno de los rolls a la boca, realmente eran deliciosos

-entonces… Zoe, que nos cuentas de ti?- pregunta Dan

-soy scort- respondí aun con comida en la boca, el chico solo se limitó a hacer un gesto sonoro poco agradable

-tiene algo de malo?... es un trabajo digno- agregué

-no, solo es que no vas todos los días por la calle y encuentras a una scort

-bueno, esto no es la calle es un restaurant, asiático. Sabías que las geishas eran una especie de scorts?- Mel estaba muy seria, casi sacando un cuchillo para clavármelo en la espalda, Dan se incomodaba al oír mis palabras. Y Hiddleston traficante de cocaína, el solo sonreía.

-y con cuantos has salido?- se atreve a decir Tom

-no lo sé, con cuantos piensas?

-a juzgar por que llevas tres medidas de sake en dos minutos… puedes irte con un hombre hoy mismo…- menciona Hiddleston tomando una pieza de sushi y metiéndoselo a la boca

“un momento! Me está diciendo alcohólica?... y fácil?” rápido atino a responder

-a juzgar por tu parecer, diría que eres muy amable como para irte con una mujer hoy mismo, al menos que esté alcoholizada… cuidado Mel- le mostré una gran sonrisa. Quedamos en silencio por un rato, hasta que Mel sintiendo la tensión en el aire y que era muy fácil de cortar con una tijera exclamó

-quien quiere más sake?- tomo la botella, y sin remordimientos fui la primera en poner el vasito en sus narices para que me sirviera.

-Dan, en realidad yo…- me propuse a decir la verdad, pero… ¿qué hacía yo? Mentía a la gente para que nos de su dinero? –soy contratista y trabajo en recursos humanos- terminé contestando

-que bien- el yogi mostro una leve sonrisa en su rostro.

El resto de la velada hablamos de temas muy comunes, a los cuales yo solo daba una opinión, la opinión que todos querían escuchar, aun teniendo una opinión contraria. Era solo hacerle pie a Mel con Hiddleston, el resto no importaba.

Terminamos, yo sabía que debía preparar una excusa para irme con Dan, pero cual podría ser?. Me dirigí hacia el baño, llamé a Matt pidiéndole que en cinco minutos me llamase y fingiera la conversación, el chico asintió, me debía unos cuantos favores, así que no podría negarse.