Como Tú (Tom Hiddleston Fanfiction)

26. Confesiones

Hola, nuevamente las molesto ehehehe es para decirles que ya tengo planeado terminar este fic y bueno, estaré escribiendo los ultimos capitulos y subiendolos como es costumbre cada 3 o 4 dias. Era solo eso :) Desde ya muchas gracias por leerme, eso me da animos para mejorar. Las quiero! ♥ 

Íbamos camino hacia otro lugar, en quien sabe dónde, para que yo pueda seguir bebiendo, me sorprendía Hiddleston, fomentando mi amor por la bebida, pero sabía que él se había dado cuenta de que estar con las otras dos personas fue bastante amargo para mí, y algo incómodo para él. Llegamos a un lugar, no sabía si era un bar o que cosa, pero vimos unas cuantas personas allí afuera.

Dejamos el auto en la esquina en donde había un aparcamiento casi vacío, y nos dirigimos

-un momento, tengo que fumar antes de entrar, no me dejarán- dije con un cigarro en mi boca

-puedo soportar que te emborraches, pero fumar no- dice quitándomelo

-oye! Es mío, yo pagué por el- quise manotear

-vamos, solo una adicción

-adicción?- pregunto tratando de llegar a su mano que estaba en alto sosteniendo el cigarro, pero ese tipo era alto y quitarle algo se me hizo imposible

-ah!- exclamo dando media vuelta y entrando al lugar

De música algo movida, tenía una pista de baile y algunas personas estaban moviendo sus cuerpos al ritmo de la melodía, del otro lado mesas y un billar

-bailar o quedarse sentado?- pregunta dándome a elegir

-bailar- respondo sin pensarlo dos veces, pero antes dejo mi bolso y mi abrigo en el guarda ropas, él hace lo mismo.

Alrededor de la pista había unas mesas con sus respectivas bancas, las mesas solo servían para dejar los vasos y las bancas para descansar cuando bailabas, pero dudaba de Hiddleston, de sus movimientos y de su gusto por la música electrónica

La música me estaba gustando, más de lo debido, y con tres margaritas encima y un cuarto vaso en camino la alegría estaba presentándose

-puedes bailar si quieres, yo me quedaré aquí- dice tomando un sorbo de lo que pidió

-eso es como dejar a tus hijos en un parque para que jueguen y tu observarlos para que no se hagan daño…- respondí, no estaba molesta, tampoco feliz

–apuesto a que luces bien en la pista de baile

-claro que si… tengo veinticinco años, debería aprovechar que luzco bien, pues cuando sea vieja me arrepentiré- tomé mi bebida y me incorporé

-bailarás o no?- pregunto en voz alta, él niega con su cabeza sonriéndome

Comienzo a moverme un poco al ritmo de la música, luego lo tomo de la mano y lo llevo a bailar

-hace tanto tiempo que no bailo- me dice

-hoy es el día Hiddleston!-

Quinto vaso de margarita, y sabiendo su contenido de tequila, la cabeza estaba dándome vueltas. Pero era divertido, ver a Tom, alguien tan correcto bailar como un jovencito de quince años, divirtiéndose, lo cual me sorprendía.

La música comenzaba a cambiar, no sabía exactamente que sonaba, pero miro hacia mi derecha

-Zoe!- una muchacha de pelo corto, oscuro, la reconocí

-Ria!- salude con un abrazo, por su atuendo sabía que estaba de fiesta, ella fue una de las primeras chicas que conocí cuando llegué a Inglaterra, Matt me la había presentado, bastante loca, pero agradable, un metro setenta tal vez, delgada, de Liverpool solo estuvo un año a nuestro lado, luego volvió a casa de sus padres