20. Plan perfecto

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Mis cálculos no fallaron, mis padres estarían en el aeropuerto a las once de la mañana, Tom fue por mí, y luego al lugar de encuentro.

Yo quería lucir bien ante ellos, quería que vieran que su pequeña había crecido y estaba mejor que nunca, además con un pretendiente buen mozo, no lo niego y de buen carácter. Me había puesto un lindo vestido, un buen par de zapatos y peiné mi pelo, incluso pareciera ser que iba de conquista y no a ver a mis padres, obviamente mi atuendo era sobrio, tampoco es que quisiera parecer una payasa tratando de llamar la atención, lo califique como algo elegante para el día, aunque mi abrigo lo taparía por completo, eso no importó.

Dejamos el auto en el estacionamiento y caminamos al lugar de espera, pudimos observar cómo la gente salía con sus carros llenos de maletas, yo nerviosa por supuesto, hacia alrededor de tres años que no veía a mis padres y los extrañaba muchísimo. Acomodaba mi vestido y mi cabellera

-estas preciosa cariño- susurro Hiddleston arrimándose a mí, aquello había hecho que me sonroje, pero decidí darle un codazo, podría oírlo reír.

Minutos más tarde observé como mi madre salía, por detrás mi padre acarreando algunas maletas

-mamá!- exclamé yendo con los brazos abiertos, ella respondió cariñosamente aquel abrazo, siempre había admirado a aquella mujer, de unos cuarenta y nueve años, pelo corto y castaño, de ojos oscuros, y siempre bien vestida, era profesora de literatura en una universidad prestigiosa de mi país.

-y a mí no me saludarás?- pregunta un hombre algo canoso, delgado, vistiendo casual, un tanto más alto que mi madre, cincuenta años, arquitecto, pero jubilado, dedicaba sus días a diseñar para muestras y asesorar a colegas mas jóvenes, de todas maneras era parte de una sociedad constructora y recibía sus ganancias. Solté a mi madre y me dirigí hacia él, quien algo más bajo que yo, dado a mis zapatos de tacón, me besa en la mejilla

-que gusto verte Zoe, no sabes cuánto te hemos echado de menos- el abrazo concluía y me olvidaba de algo importante que había dejado plantado por ahí atrás.

Me acerque a él, como tomándolo por la espala con una de mis manos

-él es Tom- sonreí nerviosa, mis padres se quedaron mirándolo, como sorprendidos, ¿acaso era lo que esperaban? No pude descifrar sus rostros y quedé congelada allí mismo, sin saber que más decir, pero Hiddleston siendo un buen caballero y sacando su amabilidad y calidez para con las personas se adelantó a saludar

-buenos días, soy Tom, Tom Hiddleston- saluda primero a mi madre dándole un apretón de manos, pero ella se anima a abrazarlo levemente, luego de una sonrisa se dirige a mi padre, también ofreciéndole su mano.

-es bueno conocerte- responde Al con tono serio

-es bueno conocerlos, Zoe habla tanto de ustedes

-yo no entiendo como no nos contó de ti- agrega mi padre

-es… es que- yo trate de inventar algo, pero Tom se apresura a responder con aquella sonrisa compradora

-es que, esto es muy reciente, la relación, Zoe quiere estar segura de lo nuestro

-claro, si con lo último que le ha pasado en sus relaciones amorosas, no te culparía- mi madre se me acerca a tomarme el brazo

-permítame ayudarle- Hiddleston toma unas maletas, mi padre otro par y nos dirigimos al estacionamiento, una vez allí guardamos las cosas en el maletero y nos vamos rumbo al pequeño hotel en donde mis padres se hospedarían, había arrendado una habitación para ellos, además el lugar quedaba cerca de mi apartamento, podría ir a verlos cuando quisiera. Ayudamos a acomodarse a la pareja, Tom me había dicho que tendría aquel fin de semana libre así que estará a mi disposición como prometido.

Como Tú (Tom Hiddleston Fanfiction)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora