Después de aquella noche nada fue igual, claro que nada podía ser igual, teniéndolo entre mis brazos, sabiendo que él era mío, que tal vez nada en el mundo pueda separarnos, o al menos era lo que me gustaba pensar. A veces tenía miedo de que me dejase, de que consiguiera alguien mejor que yo, alguien que siguiera sus rutinas que sea igual que él, pero luego recordaba cual era el motivo por el cual Tom me quería, pues era diferente, no saldría a correr con él ni haría yoga, es más esas cosas no se me daban bien. Pero supongo que en la vida uno está con alguien totalmente diferente para aprender del otro y corregir cosas en uno mismo, como cuando compras un paquete de galletas vainilla y chocolate, si a mí no me gustan las de vainilla y a él sí, sé que podríamos compartir el paquete, las galletas que no me gustaban ya no quedarían en la alacena, ya tendría con quien compartir, y eso es lo más lindo, el saber que no estoy sola, si bien creo que una persona nació completa, también afirmo que vivimos en sociedad, necesitamos de otros para vivir, simplemente eso.
Ha pasado un tiempo, mejor dicho, he contado cada día a su lado, nueve meses y siete días, cada uno es distinto, especial, aunque por fuera las rutinas sean las mismas, tengo tiempo para compartirlo con él, Matt está algo celoso, pero le prometí que si algún día decidía casarme con Tom (y espero que me pida matrimonio porque no dudaría ni un segundo en decirle que sí, y si él no lo hace yo lo haré de todos modos!) se lo diría a él primero. Trato de dividir mis tiempos en ellos, además de pasar algún tiempo con la familia de Tom, personas tan correctas como lo es él, entonces ya sé de donde ha sacado sus actitudes, son muy cálidos a decir verdad y me han aceptado bien.
Sigo teniendo el trabajo en la galería, Tom ha terminado su temporada en el teatro y se ha preparado para dirigir otras obras, es muy bueno en lo que hace y siempre le pone el corazón a todas las cosas, es lo especial de este hombre, siempre viendo el lado positivo de cada aspecto, lo admiro.
Aquel departamento que solía tener, ya no le tengo más, felizmente lo dejé, vivo con Tom, lo cual me hace más feliz todavía, en poco tiempo me apegué demasiado a él, y no me arrepiento para nada. Vendí el vestido, era tiempo de que se fuera, lo elegí especialmente para el hombre que se suponía me amaba, pero entendí que las cosas en cierto punto no funcionan, y cuando eso pasa, solo debemos dejarlas ir.
Una vez leí “una mujer sin amor, es como una rosa marchita”, creo que es verdad. Aún sigo maldiciendo a Hiddleston pero son solo tonteras y sonrío al hacerlo, a veces lo odio porque llegué a pensar demasiado en él o porque entre nosotros los sentimientos simplemente son los más puros, porque él sabe exactamente las palabras que le voy a decir, y porque no le importa mi ropa si total para amarme me va a desvestir…
Fin.
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Ah! Que alegría poder terminar este Fanfic ♥
Después de un tiempo sin escribir, retomé este maravilloso mundo de los fanfics. MUCHISIMAS GRACIAS por leerme, las aprecio mucho aun así si no las conozco, espero poder publicar un fic de Loki pronto, ¿Les gustaría?.
Buena vida, no renieguen y siempre sonrían!
Besos y Abrazos. ♥
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Como Tú (Tom Hiddleston Fanfiction)
Hayran KurguZoe era una chica bastante complicada, viviendo en tierras extranjeras. Algo antipática, se valía del sarcasmo para insultar sin ser descubierta. Trabaja en una galería de arte, pero todo cambia cuando decide también trabajar en un teatro local, par...