Carrera contra el tiempo. (Zeldris x lectora)

Capítulo 7

Consejos de doble sentido.

De camino a casa de Derriere, ninguno dijo nada, a pesar de que querían hablar de lo que paso minutos atrás.

No podías negar que Zeldris te atraía bastante, era amable contigo, divertido y considerado.
Tampoco podías negar que era bastante atractivo, su cabello negro alborotado, ojos verdes, alto y ancho de espalda, tenia muchas razones para hacer un hombre deseado.

-¿estas bien?- te preguntó sacandote de tus pensamientos.
- Sí, lo estoy, ¿porque?- respondiste.
- estas algo roja - comento divertido,pues le gustaba verte así.
- no es nada - dijiste avergonzada.

Al llegar frente a la casa de tu amiga, al ver que estabas por abrir la puerta, te detuvo.

-¿que pasa?- preguntaste al verlo.

No respondió, simplemente se arriesgó al actuar.
Acerco su rostro al tuyo y te besó.
Abriste los ojos sorprendida, era la primera vez que te besaban, por lo que no sabias como reaccionar, solo cerraste los ojos, pero no correspondiste el besó, por lo que Zeldris se separó.

-¿es todo?- preguntaste decepcionada, haciendo que él te mirara confundido - creí que duraría más.
-¿querías que durara más?- preguntó confundido - pero no reaccionaste al beso.

Tu sonrojo empeoro, y bajaste la mirada al piso completamente avergonzada, mientras que él te miraba curioso por tu reacción.

- bueno....yo....- comenzaste a balbucear - es que....yo....- no sabias como decirle, pero al ver su mirada simplemente lo soltaste - nunca he besado a alguien.
-¿nunca?- preguntó y te vio negar - entonces es mejor que empieces a practicar - dijo mientras volvía a besarte.

Fue un beso suave, se movía de forma lenta y pausada dándote tiempo a poder actuar al corresponder.
Tus labios se movían de forma torpe, pero poco a poco le fuiste agarrando el ritmo y empezaron a profundizar el besó.
Por desgracia sus pulmones exigieron oxígeno y tuvieron que separar sus labios, pero Zeldris recargo su frente en la tuya.

-¿que te parece si mañana te invitó a salir?- susurró con una sonrisa.
-¿hablas de una cita?- preguntaste y lo viste asentir - me encantaría.
- vendré por ti a las siete - comentó.

Saliste del auto y cuando abriste la puerta viste que lo encendió y comenzó a irse.
Entraste a la casa, cerraste la puerta y te apoyaste en esta, parecías estar en las nubes.

- por la cara que traes te fue muy bien el día de hoy - comento Derriere.
- como no tienes idea - respondiste alegre -¿que mis padres están aquí?- al verla asentir resoplaste fastidiada.

Tu madre se había echo la víctima e insistía en que regresarás a casa, y claramente te habías negado, no querías volver a poner un pie en ese lugar.
Finalmente lograste hacer que se fueran y pudiste decirle a Derriere lo que te había pasado con Zeldris, por lo que no dejo de gritar por la emoción.

- llamare a las chicas para que vengan mañana, iremos de compras a conseguir te algo bonito - dijo emocionada.

Al caer la noche ya estabas en la habitación que Derriere te había dado, estabas por apagar la lampara cuando te llego un mensaje, era de Zeldris.

"descanza Ally, nos
vemos mañana 💖"
"hasta mañana Zel😳💝".

Después de responder su mensaje, apagaste el celular, realmente sentías que estabas en las nubes, jamas habías tenido novio, por lo que no eras muy buena sobre el tema, por lo que necesitarías algo de ayuda y ya sabias a quien recurrir.

*****
Finalmente era viernes y muchos ya estaban esperando el termino de clases para poder ir de fiesta.
Durante las primeras horas Zeldris no dejaba de mirarte, no te incomodaba, pero si te avergonzaba bastante.

Al dar el toque de descanso, saliste del salón para buscar a cierto rubio, a quien encontraste en las mesas de la cafetería con los pecados y otras dos chicas que no conocías.

- Hola Meliodas - saludaste para llamar su atención - hola chicos.

Ellos asintieron con la cabeza y respondieron al saludo, pero Meliodas hizo algo diferente.

-¡mi cuñada! Hola, ¿como estas?- respondió y eso fue suficiente para hacer que tu rostro se pareciera a un tomate por lo avergonzada que estabas.
-¡no lo digas en voz alta!- le reclamaste molesta.
- solo bromeo, al menos por ahora - respondió alegre - pero sientate, dime que necesitas.
- bueno.... Quería ver si tu y los pecados podían darme algún consejo - respondiste mientras te sentabas - los chicos me dieron unos consejos esta mañana, pero creo que no les entendí mucho.
-¿de que se trata?- preguntó Merlín.
- bueno....nunca he tenido novio y esta seria mi primera cita....no se que hacer - respondiste decaída.
-¿los mandamientos no intentaron ayudarte?- preguntó King.
- digamos que no son muy buenos dando consejos para principiantes - respondiste al recordar que uno de los consejos que te habían dado era atar a Zeldris a la cama y hacer con él lo que quieras.
- con el capitán tampoco creo que logres algo, es igual o peor que ellos - comentó Ban divertido.
- cierto, pero esto es serio y quiero que ella tenga una velada mágica con mi hermano - respondió animado - Merlín, ¿que consejo le das?

La maga sonrió y el resto del descanso tenias un sonrojo por todo el rostro, sus consejos eran iguales o peores a los que te habían dado los mandamientos.

Merlín te había sugerido actuar de forma seductora y que con suerte lo harían en el auto.
Diane había sugerido en algún motel con una habitación romántica.

"¡¡¿acaso no piensan en otra cosa que en eso?!!" pensaste avergonzada.

Al salir de la cafetería, una de las dos chicas que no conocías se acercaron a ti.

-¿estas bien?- te pregunto la albina - no creo que sus consejos te hallan servido.
- en realidad no me sirven de mucho - respondiste decaída.
- hace algunas semanas, Meliodas me invito a salir antes de pedirme ser su novia formalmente - comenzó a decirte - y al igual que tu yo también estaba nerviosa y no sabia que hacer - comentó alegré - pero conforme avanzaba la cita entendí que solo tenia que ser yo misma - puso su mano en tu hombro y sonrió - solo tienes que calmarte y todo estará bien.
- gracias - respondiste.
- me llamo Elizabeth, si necesitas otro consejo puedes decirme y con gusto te ayudo - comentó.

Volviste a agradecer y regresaste a tu salón, ya estabas más tranquila para la cita de esa noche. Al entrar a tu salón viste a Zeldris nuevamente con esa chica.

-¿piensas darme celos con esa chica?- la escuchaste decir - porque si es hací, no es necesario yo quiero regresar contigo.
- primero: esa chica tiene nombre y es Alison y segundo: no la invite a salir para darte celos, la invite porque me gusta - respondió - lo que yo haga ya no tiene nada que ver contigo.

Cuando Gelda vio que te estabas acercando sonrió con arrogancia y se lanzo a los labios del moreno.

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Hasta el próximo capitulo.

Sayonara.