Enamorándome De Ti

Difícil de alcanzar

A partir de la resolución de Tony, los días empezaron a transcurrir rápidamente, y con ellos, la frustración de Tony.

Había resuelto tratar de enmendar las cosas con Steve, pero al parecer el universo se estaba en su contra, pues sus tiempos nunca coincidieron con los de Steve.

Las obligaciones que había dejado de lado en todo este tiempo finalmente terminaron por caer sobre él, y se vio pasando los últimos días encerrado en su oficina, reunido con una gran cantidad de tipos desagradables que solo buscaban hacerse con una parte de su compañía o en viajes relámpago a diversas partes del planeta.

Y cuando no se trataba de industria Stark, se trataba de misiones aisladas que Fury le asignaba regularmente.

Por su parte, la mayor parte del tiempo de Steve se iba cuidando de Peter, entrenando al nuevo equipo de vengadores o a los agentes de Fury, y recuperando el tiempo perdido con el estúpido fósil robotizado del demonio, del que, para poner la guinda al pastel, había Sido encargado para estricta vigilancia y cuidado.

Con este panorama enfrente, cada intento o posible intento de socializar con Steve se iba por el desagüe y a medida que avanzaba el tiempo su paciencia empezaba a menguar.

Pero, si era del todo honesto consigo mismo, este castigo se lo tenía más que merecido. Seguramente Steve tuvo que pasar por algo similar o mucho peor con él, luchando para obtener un poco de su atención y recibiendo como premio desplantes y groserías de su parte.

Tenía grabados a fuego en su memoria todos y cada uno de los momentos en los que le hizo algun desplantes a Steve y se maldecia en gran medida por ello. Fue un completo bastardo.

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Las palabras de Bucky no dejaban de dar vueltas en su cabeza una y otra vez.

Tomando en cuenta su convicción acerca de ver las grabaciones, le pidió a Jarvis que le permitiera el acceso a ellas y que las enviara a la tableta personalizada que tenía en su poder para verlas en sus tiempos libres.

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"—¿Cómo demonios se pone esta maldita cosa?— fue lo que recibió de introducción en el vídeo, observando a un desesperado Tony, tratando de ponerle el pañal.

Cada uno de los intentos era más patético que el otro y al parecer, entre las grandes habilidades del inventor no estaba el poner pañales, sin embargo había una belleza en sus errores que asombro a Steve, que miraba con atención a la pantalla.

Fueron necesarios tres intentos más, hasta que el pañal estuvo puesto de forma correcta.

—por fin, Steve. El pañal está donde debe estar— comentó con orgullo, muestras colocaba las prendas del rubio nuevamente en su sitio. —perdóname por el daño que te cause con mis acciones, fui egoísta e idiota, y también perdóname si no soy perfecto en este momento y si no se llevarte de la forma adecuada. Se que otros cuidarían mejor de ti de lo que yo lo estoy haciendo, pero te juro que estoy haciendo mi mayor esfuerzo. Me asusta tenerte así, siempre fuiste un hombre fuerte, que se valia por si mismo. Así fue como te conocí y como te ví toda mi vida, y ahora estás así, delicado y frágil, donde quien quiera puede lastimarte y me aterra. Espero que no permanezcas por siempre así, porque no sé por cuánto tiempo sea capaz de sobrellevar la carga yo solo— murmuró contra las rubias hebras, mientras lo arrullaba para que se duermiera finalmente"

Steve se quedó mirando la pantalla fijamente, incapaz de creer que ese Tony Stark que veía en la pantalla era el mismo que le ofendia en cada oportunidad que tenía. En el vídeo podía apreciar perfectamente la expresión de arrepentimiento, miedo y cariño del castaño.