Not Everything Is Darkness TERMINADA

Cap41

TaeHyung, después de unos minutos, volvió a la casa con bolsas de comidas para todos. No pude evitar notar que había tención entre él y Myeong.. Pero él parecía no saber que era. Cuando todos terminamos de comer me separé de ellos diciendo que iba para el baño lo cual era mentira, en realidad me fui detrás de Myeong y Tae para saber de qué iban a hablar.

La puerta del cuarto de Tae estaba entre abierta, no se podía ver mucho a no ser que estuvieras muy cerca lo cual hice. Me asomé para ver que era lo que hacían y escuchar mejor, aunque no logré ver casi nada puesto que no estaban en la esquina que tenía a la vista, pero estaba escuchando.

– ¿Me puedes decir por qué carajos tienes esto en tu closet? – mi hermana sonaba enojada. ¿Qué será lo que tiene? – Esto no es un juego, Tae, puedes salir jodido por tener una maldita revólver en tu closet –

Abrí mis ojos como platos y tapé mi boca para no hacer ningún ruido, lamentablemente por mi rápido movimiento, como estaba muy cerca de la puerta, al moverme para taparme la boca, mi panza golpeó un poco la puerta llamando la atención de Tae y Myeong. Me giré disimuladamente para irme pero ellos abrieron la puerta encontrándose conmigo de espaldas.

– ¿Estabas escuchando? – preguntó Tae –

Me giré lentamente con una sonrisa tonta en mi cara.

– No, nada más quería quedarme parada frente a la puerta.. Dicen que ayuda para el parto –

– No seas sarcástica, entra – Myeong me hizo paso así que obedecí, entré y me senté en la orilla de la cama de Tae – ¿Qué sucede aquí? –

La mirada de Myeong delató a Tae. Es como que cuando ella lo miró se supo que era algo con él. Tae bajó la mirada y acarició su brazo derecho, al parecer Myeong lo había golpeado.

– Deja el abuso con él canto de loca – la reté y esta frunció el ceño – Tae, ¿estás consciente de los problemas que puedes causar por tener una arma sin permiso en tu closet? Además, ¿dónde mierdas la conseguiste? –

– Un amigo... Se la pedí prestada – nos miró – ¿Alguna vez han pensado como se sentiría matar a alguien? – Myeong y yo nos miramos preocupadas – No es justo que MoonBin siga vivo después de todo lo que ha hecho. Iré a matarlo personalmente, por mi hermana y por el hermano de ustedes.. No me importa que me cueste la vida –

Me levanté de la cama con el ceño fruncido y lo empujé hasta hacer que azotara con la pared.

– ¡¿Estás de coña?! – alcé mi voz – Tú no harás nada. No sabes lo peligroso que es eso. Deja las cosas como están... Harás que todo sea peor – miré a Myeong – Tú no estás de acuerdo con él, ¿verdad? –

Esta negó pero se le notaba insegura. Lo había pensado, me gustaría matarlo yo, personalmente... Pero no podía dejar que Tae muriera, todos se devastarían, en especial Myeong y ella ya estaba bastante mal como para tener otra carga más así encima.

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No me pude quitar las malditas palabras de Tae de la mente. No me dejaba dormir así que me arrodillé en la cama y miré por la ventana. Hubieron unos segundos de silencio, en esos segundos comencé a acariciar mi bulto grande pero no tan grande (xD). De repente sentí una mano acariciar mi panza también lo que me sobresalto. Bajé mi mirada y vi que Jin estaba despierto mirándome.

– ¿Todo está bien? – preguntó algo preocupado – ¿No puedes dormir? – su mano subió de mi panza a mi mejilla – Amor... –

Su vista se entristeció cuando me vio. No podía aguantar más. Todo este tiempo he intentado estar firme para Myeong pero lo que realmente hacía era ahogarme.

– Mi amor, tranquila.. – se recostó del espaldar de la cama y me jaló hacia donde él con mucho cuidado – todo está bien. Te dije que no debías guardarte las cosas –

– Quería estar fuerte para Myeong – dije con mi rostro en su pecho – Si yo lloraba todo sería más complicado –

Sus manos suaves comenzaron a acariciar mi cabello azul nuevamente teñido. Tenía miedo, estaba reconsiderando lo que Tae había dicho. Tal vez si asesinábamos a MoonBin todo sería mejor.... Más fácil, le haríamos un favor al mundo. Por otro lado estaba nerviosa porque sabía que ocultárselo a Jin era una muy mala idea, pero no tenía otra opción. No estaría tranquila si no hacíamos tal cosa.

– Oye bebé – dijo sacándome de mi trance –

– ¿Mm? – solté para que supiera que lo escuchaba –

El silencio invadió el cuarto de repente lo que me pareció extraño, creí que se había quedado dormido hasta qué......

– ¿Te casas conmigo? –

Quedé en shock. No sabía ni qué decir. Por segunda vez la habitación quedó en un tremendo silencio, uno muy incómodo el cual pareció incomodar a Jin.

– No tienes que responder ahora – sonó calmado – Puedes responder cuando quier.. – no lo dejé terminar ya que me giré y lo besé – JinHyung.. –

– Sí.. me quiero casar contigo – agarré sus mejillas y este sonrió con emoción para luego empujarme hacia atrás haciendo que quedara acostada en la cama –

Jin quedó sentado al lado mío, me miraba con una sonrisa, esa bien charming que él tiene.... La cual me mejora los momentos. Este colocó su mano derecha encima de mi mano izquierda la cual estaba en mi panza, luego se acercó a esta y comenzó a hablar.

– ¿Escuchaste eso? Mami se va a casar conmigo, ¡que emoción! –

Comencé a soltar carcajadas por las caras que él hacía. Después de varias "bromas" hablando con nuestro hijo, cuyo sexo no sabíamos aún, terminé rendida en la cama con Jin a mi lado abrazándome.

Cuando desperté seguíamos en la misma posición lo cual me pareció adorable, y más él. Me levanté con mucho cuidado de la cama y me coloqué un pantalón largo de dormir, el cual solía ser de Nam, para caminar hacia el baño, lavarme la boca y luego bajar a desayunar. En el trayecto hacia el baño me encontré con la persona que no me sacaba de la mente anoche, TaeHyung. Este, al verme, aumento el pasó pero logré alcanzarlo y detenerlo.

– ¡Tae! – agarré la manga de su abrigo naranja – ¿podemos hablar? – este me miró nervioso – No te haré nada. Solo dejame lavarme la boca y comer, cuando terminemos vamos a tu cuarto y discutimos algo –

– Buenooo.. – dijo nervioso –

– ¿Sí? Ok, gracias – y me adentré al baño –

Cuando terminé, salí del baño y bajé a la cocina donde estaba Jimin y YoonGi haciendo desayuno juntos. Jungkook estaba sentado usando su celular mientras que los mayores hablaban mientras cocinaban.

– Huele rico – dije tomando asiento al lado de Jungkook quien me echó el brazo a la que me senté –

– Gracias. Hey, rata, quita tu brazo... Es mía, no tuya – dijo dándole una mirada de muerte al menor el cual solamente le sacó el dedo del medio – Que malos modales –

– ¿Qué sabes tú de modales? – dije riendo –

Este soltó una risa sarcástica y me entregó el plato con comida. Había revoltillo con tostadas, bacón y jugo de naranja. Comencé a comer de lo más feliz... Comer me subía los ánimos.