Los días pasaron volando; Stephen y yo creamos una rutina en muy poco tiempo y me acostumbré a que estuviera a mi alrededor como cuando íbamos en la secundaria, sabía a donde se movería antes de que lo hiciera y parecía ser que él se había acostumbrado a tenerme en su entorno también; la habíamos pasado de maravilla y debía admitir que me encantaba tenerlo ahí, así no me sintía sola y cada día lo hacía divertido.
El miércoles por la tarde nos pusimos a arreglar nuestras respectivas maletas, él se había ido su casa para recoger más ropa y algunas cosas extra, yo me había quedado en mi departamento guardando todo lo que creía necesario; empaqué un short de mezclilla, un par de blusas, mi pijama, ropa interior y un vestido para la cena de ensayo - que obviamente era diferente al que usaría el día de la boda -, también guardé unas sandalias "elegantes" que usaría en la ceremonia ya que se llevaría a cabo en la playa, de igual modo metí unos tacones pequeños para el atuendo que usaría en la cena de ensayo, esa sería dentro del hotel así que no había problema alguno; guardé también un par de calcetines y unos tenis blancos, metí un traje de baño de dos piezas por si llegaba a necesitarlo y luego metí todas mis cosas de higiene personal en una bolsa pequeña, por último, guardé mi cosmetiquera con el maquillaje exacto que usaría. El vestido para la boda venía aparte, cubierto con una funda negra, no podía guardarlo en la maleta porque eso lo arruinaría al tener que meterlo doblado, así que ese tendría que entrar en la cajuela del auto al último y encima de todo junto con el traje de Stephen.
Nos encargamos de todo lo que corresponde al departamento los días anteriores, como no dejar nada de comida que pudiera echarse a perder y que antes de salir debíamos dejar todo muy bien cerrado, incluidas las ventanas; además el mismo miércoles, mientras Stephen se había ido a su casa, fui a ver a Wendoline para dejarle una copia de las llaves de mi departamento, le había pedido que fuese a ver qué todo estuviera en orden de vez en cuando; claro que cuando le dije que saldría de la ciudad en un viaje con Stephen no pude evitar el enorme interrogatorio que surgió y con paciencia respondí a todas sus preguntas, la primera pregunta fue si había hablado con él y cuando le expliqué lo que sucedió el día que hablé con ellas, cuando encontré a Stephen en mi puerta, Wen entendió perfectamente por qué no lo había hecho pero eso no evitó que me recordara que debía hacerlo y me hizo prometerle una vez más que lo haría.El jueves llegó, nos duchamos, vestimos, desayunamos, luego bajamos las maletas y en lo que Stephen las acomodaba en la cajuela del auto yo subí otra vez al departamento para sacar unas cuantas botanas, dulces y bebidas que habíamos comprado para el camino; el viaje sería de unas 5 o 6 horas y aunque no fuese demasiado tiempo era suficiente para que nos diera hambre en el camino; tomé la bolsa con la comida y esperé a que Stephen volviera para que él tomara su traje y mi vestido y yo pudiera cerrar con llave; cuando llegó yo ya estaba parada en la puerta así que entró rápidamente tomó la ropa, se aseguró que no hubiera ventanas abiertas y luego se acercó a mí.
- ¿Lista?
- Por supuesto - salió y bajó las escaleras en lo que yo aseguraba la puerta. Al llegar al auto Stephen ya se encontraba dentro de este y casi en cuanto entré arrancó el auto y empezó a moverse mientras ponía mi cinturón.
Eran las 7:30 de la mañana y nos esperaba un largo viaje por lo que prepare una playlist para escuchar en el camino, eran canciones que me gustaban a mí, otras que le gustaban a él y otras que nos gustaban a ambos para que fuera justo; conecté mi móvil con el cable y después de prender el radio seleccioné la lista y la reproduje aleatoriamente, me gustaba así porque nunca sabría que canción seguiría luego aunque por alguna razón a algunas personas les causaba conflicto que lo hiciera.
"Never go back" de Dennis Lloyd sonaba cuando nos detuvimos en un semáforo, miré a Stephen y lo vi tamborilear con los dedos sobre el volante, estaba ansioso y podía decir incluso nervioso así que puse mi mano sobre su hombro y lo acaricié subiendo por su cuello hasta colocar mi mano en su mejilla y acariciarla con mi pulgar en un gesto reconfortante.
- Todo irá bien - le dije con una sonrisa, el volteo a verme un par de segundos antes de fijar su vista al frente de nuevo.
- Espero que así sea.
- Solo no dejes salir al demonio - bromeé con él esperando que entendiera a qué me refería. Mientras él estuviera tranquilo, que no decidiera pelear con medio mundo y pensara en hacer una tregua, todo saldría bien.
Él solo se rió y asintió con la cabeza, dándome la razón y acelerando en el momento en que la luz cambió a verde.
![](https://img.wattpad.com/cover/178023138-288-k505328.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Opuestos
Teen FictionNunca sabes lo que el destino te depara y menos en cuanto de amor se trata. Yo aprendí eso como todos lo hacemos en algún punto de nuestras vidas; algunos lo aprenden por las buenas y otros por las malas. En mi caso... creo que fue por las buenas...