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- ___________________. ¿Puedo pasar?.
Hablo Shōto al otro lado de la puerta mientras que esperaba la afirmación del Alfa.
- Claro, pasa.
_______________________ habló desinteresadamente mientras que leía los papeles sobre la misión que le acababa de entregar.
Shōto paso hacia la oficina, mientras que de manera inmediata miraba al Alfa, una pequeña sonrisa se creó en sus labios, aquella pequeña acción le recordó a cuando ambos aún iban a la academia. Negó ante la cabeza; se estaba desviando del tema, con ambas manos posicionadas en su abultado vientre camino hasta el escritorio de ______________________.
- Ya está lista la cena. Te estamos esperando para iniciar.
Los orbes negros de _____________________, hicieron contacto con los suyos.
- Lo siento tanto Shō-kun. Pero creo que deberán de iniciar sin mi, ahora mismo me encuentro algo ocupado con la misión.
Un suspiro de frustración salió de la boca del heterocromatico, y sus feromonas delataron su tristeza; _______________________ había estado desde hace un mes ocupado con la investigación de la misión que no les prestaba atención y el próximo lunes se iría de viaje y no quería ni imaginar cómo serian las cosas.
- Está bien, si necesitas algo no olvides en llamarnos.
- Está bien...
Dijo mientras que regresaba su mirada a los papeles sobre su mano.
Shōto asintió y sin más se dirigió a la puerta, después de salir una pequeña lágrima escapó de sus ojos, últimamente estaba más sensible de lo normal y el hecho de que su Alfa le ignorará le hacía sentir peor.
- Solo es por un corto tiempo, papá se encuentra algo ocupado.
Hablo Shōto hacia sus cachorros que aún se encontraban en su vientre, una de las cosas que más le ayudaban en estas situaciones era hablar con ellos.
Y sin más se dirigió al comedor en donde se encontraban Katsuki e Izuku.
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