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Jungkook arrugó su entrecejo al verse sentado en su despacho esperando respuestas que no debía exigir y era conciente de ello. No era estúpido, era lo suficientemente grande para entender que estaba sintiendo cosas por su empleado. Si, cosas, aun no sabía bien que.

Nunca había sido un gran conquistador ni nada por el estilo. Fue un ratón de liblioteca durante la universidad y solo en su ultimo año logro tener novio y fue su novio y difunto esposo quien lo perseguia a él. Nunca habia sido un detallista o un romantico, pero comenzaba a sentir que podría serlo. ¿Siquiera le atraia a Jimin?

-¿Señor Jeon, puedo pasar?- El muchacho llamó a la puerta distrayendolo de su  conversación interna.-Bueno ya entré.-  rió nervioso Jimin ante la seria mirada de su jefe.-¿Me mandó a llamar?

-Si, lo hice.-dijo mirándolo de pies a cabeza.  Jimin se vestía mas atrevido que antes y había cambiado de color de cabello por segunda vez. El rosado sin duda resaltaba su dulzura.- ¿Y bien?

- Has estado saliendo sin mi permiso durante todo este tiempo.- no preguntó, afirmó, a lo que Jimin solo asintió sin entender el punto.-¿Te parece bien?- le preguntó.

-Bueno usted me dijo que podía hacer lo que quiera con mi tiempo libre.- se encogió de hombros.

-Bueno al parecer mis hijos no son suficiente trabajo para usted.

- Y tampoco seria mucho para usted si tan solo los viera mas.- murmuró Jimin.

-  No murmure- le desprendió poniéndose de pie.- ¿Donde a estado?

- Con mi prometido, en su negocio.

-Esta bien pero que no se rep-...espera, espera. ¿con quien dices que estuviste?- le habló tan exaltado que olvidó las formalidades.

-Mi prometido- Jimin no reprimió su sonrisa.-Oh, señor, debió de ver como me lo propuso-Jimin rompió el espacio entre ellos y abrazo a su jefe bien y triste al mismo tiempo. Le quería, por supuesto, pero sabia que su jefe y él estaban en mundos diferentes. Yoongi, por su parte, le entendía, era bueno con él y aun le quería..un poco. Así que decidió tomar la oportunidad  de formar su familia; aunque, extrañaría a sus niños.

-Jimin, suélteme.- reaccionó notando que su jefe estaba mas rígido de lo normal y ni siquiera había respondido a su abrazo.

- Lo siento señor...

- Deberías. Te di mi confianza para que salgas un día con tu amigo y ahora, ¿te vas a casar?-JungKook no cabía en su cuerpo. Jimin se iba a casar y su pecho dolía con tan solo pensarlo.

- Quizá piensa que enloquecí, pero no. Mi prometido es mi ex.-Le dijo tranquilamente.

- ¿Ex? ¿Al que insultaste toda tu estadía aquí y me decías que te perdió por idiota  y además  te despidió para poner a su nueva conquista? ¡¿Ese ex?!- sin querer terminó casi gritando, sorprendiendo al niñero.

-Bueno...si- Jimin hizo una mueca- Que mas da, volvió por mi y ya no estoy en la edad de hacerme rogar.

-Jimin, solo tienes 25 años.- le dijo entre dientes.

- ¡Lo se! Estoy acabado- hizo un puchero. 

-¿Que hay de mi entonces? -preguntó JungKook luchando contra una sonrisa.No podía enojarse con ese hombre.

-  Oh no, señor. Usted esta muy pero muuuuy lejos de estar acabado. ¡Mírese! Joder, que me muera si no esta buenisimo. -respondió mordiéndose los labios. JungKook avergonzado desvió la mirada.-Lo siento, no me escuche.- Jimin estaba sudando por lo nervioso que se sentía y además  estaba  muy avergonzado por sus palabras.
  
-Yo enserio...- Jimin se sorprendió al escuchar la carcajada de su jefe- No puedo contigo- JungKook suspiró para luego tomar asiento mientras Jimin solo lo miraba.-¿Que hará ahora?

The Nanny(KookMin)    TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora