Mi Oscuro Pasado (3° temporada) ✔

Cap. 27 (3° temporada)

-No puedo violar a mi propia hija-Leo intentaba no gritar.

-Sabes que si no lo haces todo va a empeorar-Oriana parecía enojada.

Se alejaron de mi mientras se encaminaban hacia la salida, corrí hasta el pasillo en donde estaba Leyla para avisarle, al llegar con ella pregunté por Alex.

-¿Dónde está Alexis?-dije intentando recuperar el aliento.

-Con Bill ¿Por qué?-me ofreció agua.

-Cahil quiere que Leo viole a Alexis-dije después de tragar el agua.

-¡¿Que quiere hacer qué?!-El grito de Leyla llamó la atención de muchas personas.

-Cállate-dije cubriendo su boca-Debemos cuidar más a Alexis...debemos cuidar a todos, tal vez no lo logre con Alex pero puede intentar con otra de nuestras hijas o hacerle algo peor a nuestros hijas, así que todos debemos estar atentos...

7 meses después.

Han pasado 7 meses, los 7 meses más estresantes de mi vida, con el riesgo de que mi sobrina sea violada en cualquier momento, más la intolerancia y bipolaridad de mi amiga embarazada...sentía que quería llorar.

-YA VIENE, AY CARAJO-los gritos de Fer hace que todos nos asustemos.

Alexis Bennet.

-NO ME DIGAS QUE ME CALME, ESTOY A PUNTO DE PARIR Y ME DUELE TODO, CARAJO-los gritos de mi tía Fernanda hacia mi tío Andrés ponían nerviosos a todos.

En el auto de mi tío íbamos, mis dos tías, mis dos tíos, yo sentada en el regazo de mi madre, mi tía Ariane sobre las piernas de mi tío Ricardo, Isabela sentada sobre las piernas de su hermano, en el auto de atrás venían todos nuestros amigos, ya que estaban en el momento exacto cuando mi tía rompió fuente. Mi tía no quería que mis amigos se queden porque "iban a ponerse a beber e iban a dejar su casa hecha mierda" esas fueron sus palabras.

-DATE PRISA ANDRÉS, SE LE SALE EL MUCHACHO-mi tía Ariane no ayudaba mucho en lo que respecta a la tranquilidad.

Cuando por fin llegamos al hospital mi tío Andrés bajó corriendo a abrirle la puerta a mi tía, el resto ya estaba fuera del auto, Mi tío Ricardo fue corriendo en busca de ayuda.

-Siento que me estoy orinando, ay mierda, hace mucho no sentía una cosa así-los lamentos de mi tía junto con sus caras de molestia eran muy graciosas, pero no podía reírme...peor de ella.

-Por andar de caliente con tu pobre marido-Ariane ríe del comentario de mi madre.

-Cállate mierda. Tu estarías igual si no fuera que Bill apenas se controla a sí mismo, ni cagando puede con otro bebé.

-No te burles de mi maridito ¿Ya?-Ambas se miraron mal.

Mi tío Andrés se llevó a su esposa en una camilla, todos nos quedamos en la sala de espera charlando.

-Alex...-una voz masculina escuché detrás de mi.

Giré para ver quien me hablaba.

-¿Logan?-dije confundida-¿Qué haces aquí?

-Quería ver a Luis...no te enojes con él, él no me dijo que estabas aquí.

-¿Y por qué estás aquí?

-Iba a ir a la casa de otro amigo y vi cuando bajaste del auto junto con tu tía.

-¿Y?

-Solo...quería verte, o saludarte.

-Pues ya me viste, ahora...si no tienes nada más que hacer puedes irte, gracias-sonreí de forma hipócrita y me di media vuelta, tomé la botella con agua que tenía y la llevé a mi boca.

-Alex...-al parecer no puedo tomar agua.

-¿No la escuchaste? dijo que te fueras, maldito retrasado-mi tía Ariane lo mira de mala manera y se posiciona a mi lado.

-Pero...-el agua que tenía retenida en mi boca salió directamente a la cara de Logan ya que Luis (que no sé de dónde salió) apretó mis mejillas provocado lo anterior.

-Llévela tía, yo me encargo de este tarado.

Mi tía le hizo caso a Luis, por primera vez, y me sujetó de la mano, llevándome a otra parte. Llegamos a la cafetería y mi tía compró dos cafés.

-Tía...

-Ni se te ocurra decir que no debí tratar así a Logan porque te juro...

-No, no, solo quería pedirte unas empanadas-dije sonriendo.

-Ah...bueno, yo igual quiero.

Compramos unas empanadas y volvimos con el resto, pero mi madre no estaba, fruncí el ceño y me acerqué a Luis.

-Oye...-lo primero que hizo al verme fue morder la empanada que tenía en mi mano-¿Dónde está mi madre?

-Ya nació-dijo con la boca llena.

-¿QUÉ?-mi tía empezó a desesperarse-Yo debía estar ahí.

Luis le dijo dónde estaba y ella fue ese mismo instante. Una enfermera le dijo que no podía entrar pero ella entró de todas formas.

-MI ESPOSO ES EL DOCTOR RICARDO, ESE SEXY NALGÓN-dijo mientras entraba.

Después de un par de horas ya nos encontrábamos en casa de mi tía Fer, mientras mi madre y mis tías admiraban a Raúl nosotros jugábamos guitar hero.

-Quiero aprovechar a que tu madre no está aquí-Sebastián mira a Isabela-odio que me gane.

-Pues por algo soy su hija-sonrió con maldad.

Y sí, ella le ganó a Sebastián, haciendo que él se enoje y se vaya a la cocina.

-No hay nada en la heladera-dije mirándolo-¿me acompañas a comprar algo?

Asintió y ambos salimos rumbo al supermercado más cercano, íbamos charlando de todo mientras reíamos, la gente del supermercado nos miraba por las intensas carcajadas.

-Recuerdo cuando te dije "Sebastián, la psicóloga" y tu te caíste creyendo en lo que te dije-reí a carcajadas al ver su cara.

-Pues yo me sigo riendo de cuando te caíste en la rampa-mis carcajadas fueron sustituidas por una cara seria, ahora era él quier reía.

-Mejor voy a orinar, tu sigue comprando-caminé hacia el baño mientras miraba las notificaciones de mi celular.

Un mensaje de mi madre llegó ese mismo instante.

"Alex, no te alejes de quien esté contigo, por favor, ten cuidado...apresúrate a llegar, no estés mucho tiempo en la calle"

Fruncí mi ceño y entré al cubículo que estaba vacío, le contesté a mi madre y terminé de orinar, cuando salí para lavarme las manos la pantalla de mi celular se encendió, supuse que era mi madre y lo guardé en mi bolsillo, caminé de vuelta a donde le dije a Sebas que me espere, al llegar no lo encontré, comencé a buscarlo por todas partes pero no lo vi.

-Alex...-el padre de Logan me miraba atentamente-¿Buscas a tu amigo?-asentí con mi entrecejo fruncido-Lo vi en caja, pagando sus compras.

No respondí y caminé rápido hacia donde me había dicho, tomé algunas cosas que encontraba en mi camino, vi su espalda que salía por la puerta principal, dejé el cereal que había alzado y corrí hacia él.

-SEBASTIÁN-dije en voz alta esperando que me escuche.

Vi como se subió a un auto y yo me detuve, mi celular sonó, era un mensaje de él.

"Luis vino por nosotros, pero tu tía lo estaba emborrachando, así que yo voy a manejar"

Miré de vuelta al auto al que se había subido mi amigo, ahora él me llamaba con la mano. Caminé y me subí al lado del copiloto, en el asiento de atrás había alguien, encendí la luz que está en el centro del techo y vi a Sebastián, fruncí mi ceño y miré al piloto, me llevé un gran susto al ver al hombre que mis tías y mi madre odian tanto, Cahil. Intenté gritar pero una jeringa en mi cuello hizo que me inmovilice casi al instante, impidiendo que yo consiga algo de ayuda.