Fernanda Anderson.
Cuando Andrés y James se fueron fui con todos los chicos al garaje, les pedí que pusieran a Cahil encima de la mesa que estaba cerca.
-Rafael-me miró-¿Puedes traer el microondas que está en la cocina?-él accedió y yo me encargué de Cahil.
¿Qué harás con eso?-preguntó Luis.
-Preparar algo, hasta que despierte este baboso.
Busqué entre las herramientas algo filoso pero pequeño, como un bisturí. Simplemente encontré un cuchillo pequeño, parecía más una navaja. Yo creo que sí servía. Tomé mi celular que y entré a galería, entre las fotos encontré algunas fotos que tomé de los libros de medicina de Andrés.
-¿Qué va a hacer?-preguntó Sebastián, simplemente moví mi mano quitándole importancia a la situación.
Cuando logré entender lo que decían las imágenes procedí a ponerlo en práctica. Pero antes de hacer el primer corte, el celular de Sebastián suena, provocando que mi corazón se acelere por el susto.
-Lo siento, es Ariane...-me miró.
-Dame el celular-extendió su mano para darme el celular, noté que era una video llamada.
-Hola...disculpa, solo quería decirte que estoy bien, aún están atendiendo a las chicas, pero te avisaré cualquier cosa, quería ver qué hacías con ese animal...
-Me ahorraste el trabajo de grabarlo, si vas a estar en esta llamada por favor no hagas ruido, no sé exactamente lo que haré pero lo intentaré...espera ¿Está Andrés a tu lado?
-Sí...
-Quiero hablar con él.
-De acuerdo-la imagen se movió y me permitió ver a mi esposo-Hola, amor.
-Hola-dije sonriendo como tonta, extrañaba que me diga así-Sebastián, sostén esto y mueve la imagen hacia mis manos ¿De acuerdo?-él accedió.
-Aquí está-Rafael entró cargando el microondas-me costó mucho desconectarlo.
Colocó el aparato sobre una mesa y me observó, suspiré y me dirigí a Andrés.
-Quiero cortar tendones o nervios, lo que sea, pero vi en tus libros de anatomía que si se cortaban era incapaz de moverse.
-Son los tendones, eso sujeta el cuerpo, por así decirlo-dijo un poco obvio.
-Recuerda que eres tú quien sabe, yo estudié algo totalmente diferente. Ahora, dime qué tengo que hacer.
Comenzó a explicarme qué tenía que hacer para saber dónde cortar, como yo quería inmovilizar todo su cuerpo tardamos un poco, y Cahil ya empezaba a despertar, por suerte él reaccionó cuando habíamos acabado.
Cahil comenzó a quejarse y a mover la cabeza, parece que había hecho bien el trabajo de dejarlo inmóvil.
-¿Qué...?-abrió los ojos
-¿Me ayudas a recorrer esto?-le dije a Rafael, él movió su cabeza afirmando.
Movimos una pequeña mesa y la pusimos pegada a la mesa donde estaba Cahil, mas detalles, en la parte de su cabeza. Puse el microondas en esa mesa y Rafael me ayudó a mover su cuerpo.
-¿Qué? ¿Cómo es posible?-dijo mirándome cuando lo movimos.
-Tranquilo, hoy es el ultimo día que me verás.
-Pero, yo vi cómo moriste, yo te vi...no es posible-tartamudeó mientras me miraba.
-Nada es imposible, menos para mí. Ah, por cierto, yo maté a todos tus amigos, espero que no te moleste-dije sonriendo de forma irónica, su respiración comenzó a agitarse.
-¿Por qué no puedo moverme?-dijo entrando en desesperación.
-Oh...yo...pues, básicamente corté tus tendones , ahora, por más de que vivas, quedarás inmóvil de por vida-lo miré fijamente, no sabía si eso era verdad, pero estoy segura de que él tampoco lo sabía.
-Sé que me vas a matar, pero por lo menos dime qué me harás.
-No, quiero que sea sorpresa...Aunque...quizás debería hacerlo...Está bien, pero durante el proceso-volví a sonreír con ironía.
Moví su cabeza dejándola dentro del microondas.
-Bueno, pues, voy a provocar "temperatura" en tu cerebro-hice comillas con mis dedos- Así el calor hará que sientas dolor de cabeza, bastante fuerte, comenzarás a entrar en pánico, y en pocos segundos...-hice un ruido de explosión acompañado con el movimiento de mis manos.
-O sea...-Luis me miraba sorprendido.
-Como una palomita de maíz, para que sea más claro, voy a hervir su sangre hasta que su cerebro no dé más y necesite oxígeno y todo eso, su cerebro empujará su cráneo y lo reventará-dije con tranquilidad.
-¡¿QUÉ?!-gritó Cahil.
-No seas exagerado, solo serán...-me quedé pensando unos segundos- quizás sean menos de un minuto, no te dolerá tanto-mi tono era de madre tranquilizando a su hijo cuando le iban a colocar una inyección.
-Eres una perra loca-su rabia era muy notoria.
-Gracias-sonreí.
Conecté el microondas y me aseguré que su cabeza quede en la posición perfecta, lo miré una vez más y comencé a imaginarme lo que pasaría, todo esto era una simple deducción mía, ojalá funcione, de todas formas va a morir, pero espero que no tarde demasiado...aunque si se demora, él sentirá más dolor. Cualquier situación es perfecta.
-Ahora sí, espero que lo disfrutes, fue pensado especialmente para ti, espero no verte en ninguna vida, por tu bien, sabes que nadie se mete conmigo y mucho menos con mi familia-esta vez hablé con seriedad.
Había olvidado que Andrés y Ariane estaban viendo y escuchando todo esto por una video llamada, pero de eso se encargó una pequeña parte de mi cerebro, el resto esta enfocado en Cahil.
-Al fin podré deshacerme de ti, maldito baboso. Sé todo lo que hiciste con mi hija, y esto no es ni el 10 por ciento de lo que mereces, pero ya no tolero ver tu cara, no tolero saber que existas, me desespera tu presencia, así que, sin nada más que decir-programé el microondas para que funcione dos minutos-Adiós, Cahil.
Me alejé de él y le dije a los chicos que también se alejen, deduje lo que pasaría debido a que el microondas tiene una cocción que desde adentro hacia afuera, entones el resultado sería al igual que una palomita de maíz. Antes de que comience a hacer escándalo, puse música desde mi celular y comenzó a sonar Walk de Pantera. Hace mucho tiempo no escuchaba esta canción.
Cahil comenzó a desesperarse, incluso suplicaba, yo simplemente lo miraba fijamente, ni siquiera sentía qué expresión tenía en mi rostro. Adoré cuando Cahil comenzó a llorar, era la mejor parte, noté cómo sus venas comenzaban a dilatarse, movía su cabeza de un lado a otro en busca de liberarse.
-BASTA, POR FAVOR-gritó con desesperación, yo simplemente aumenté el volumen de la música y a disfrutar de ese hermoso ritmo.
-PERDÓN-gritó más fuerte, comencé a tararear la canción.
-Respect, walk, what did you say? Respect, walk, are you talkin' to me?Are you talkin' to me? Are you talkin' to me? Walk on home, boy
En las notas finales de la canción fue cuando todo sucedió, su cráneo se abrió totalmente, fue como si estuviera hecho de un material de poco valor, simplemente explotó, sin impedimentos, nada, la sangre estaba por todos lados, incluso en mi rostro. segundos después la alarma de que se habían acabado los dos minutos sonó.
ESTÁS LEYENDO
Mi Oscuro Pasado (3° temporada) ✔
Ficção Adolescente¿Esto no acaba? ¿Siguen buscando venganza? Nadie de esta generación tiene idea de lo que les espera por su pasado, sus padres no quieren que ellos sepan "por su bien" aunque ellos pasarán por problemas peores que los de sus hijos pero ellos son los...