Danniel Gamble es un adolescente que tiene un padre científico el cuál es enviado a investigar un extraño artefacto en Heidelberg, Alemania que podría acabar con la raza humana. Ahí se dará cuenta de que su vida cambiaría drásticamente internándolo...
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Era un día como cualquiera en el receso, el sol brillaba, el cielo estaba despejado, había una suave brisa cálida que azotaba levemente a las ventanas de la escuela ocasionado suaves sonidos, la naturaleza primaveral se hacía notar por las abundantes flores púrpuras que caían de los árboles y se podían observar a los inocentes pájaros volando en el cielo de esa hermosa mañana de Jueves.
Yo el bohemio y soñador -jajajjaja, supongo que esto de escribir mi historia ha comenzado a afectar mis funciones cognitivas y abierto el lado creativo de mi corazón. Ahora que cursaba el tercer grado de Secundaria y que había cambiado de escuela nada permaneció de igual modo.
Mi niñera y a la vez señora de servicio, Gerta a la cual mi papá contrató porque sus compañeros de trabajo que ya habían venido a Heidelberg le dijeron que ella era muy buena con los niños y les tenían confianza me envió de comer mis alimentos preferidos: waffles con jugo de durazno de la mejor cosecha alemana y de postre: ricas gomitas frutales cubiertas de azúcar. ¡La combinación perfecta! Lo sé, lo sé, no es el desayuno más saludable del mundo pero me gusta disfrutar el tiempo que me queda de delgadez antes de que sea adulto y si aumente de peso. Les voy a hacer un chiste de comida bueno, este va a así: ¿Cómo se llama el compuesto químico para no engordar?
Nitrato de comer.... Entendieron, no, OK. Creo que solo me da risa a mí ¡Al chile con mis bromas!
Se podría decir que en ese día no pasaría nada fuera de lo común que cambiaría mi vida por completo, después de todo, una persona sobretodo un adolescente de 14 años como yo, nunca esperaría que un hecho tan simple desencadene una serie de eventos tan diversos. Pero antes de contarles lo que aconteció, les narraré sobre mi extraña realidad. Voy a mencionar algunos datos interesantes sobre mi reputación escolar en ese momento de mi existencia.
La mayoría de la gente me consideraba como el niño extranjero con el papá excéntrico, que apenas y tenía amigos que estuvieran conmigo, que se preocupaba su seguridad o integridad física y era un completo Geek en todos los ámbitos existentes y por haber ¡Raro, lo se! Pero a pesar de todo, lo único bueno era que la mayoría no sabía que les podía hackear sus computadoras cuando yo quisiera, ¡Pero esto queda entre nosotros querido lector por favor que me mandan a prisión si los demás se enteran! Otro factor importante es mi pasión por crear inventos o de replicar los ya existentes. Disfruto demasiado la electrónica y crear mecanismos con mis propias manos.
El hobby tecnológico surgió desde que mi madre Abigail que como ya les había, no estaba conmigo. Ella me regaló un kit de piezas de robótica, ¡El mejor obsequio de todo los tiempos! Aún tengo unas cuantas piezas que guardo y que protegeré como recuerdos de su presencia por el resto de la eternidad. Una de las tuercas que traía el kit me la puse como amuleto sostenido con una vieja cuerda toda desgastada por el paso de los años que se colocaba alrededor del cuello, lo hice porque a diferencia de las demás, esa en especial tenía una dorada apariencia y su extravagante color me atraía.
