Matthew entró a su habitación de nuevo, después de una larga charla con Sam. Cerró la puerta, para cuando pudo voltear…_____________ traía una toalla de baño enredada en su cuerpo. Con algunas gotas de agua en el hombro, el cabello húmedo, y una sonrisa insaciable en los labios. Dios mío, qué mujer…que hermosa era después de hacer el amor, se veía más guapa. Al natural.
- Hola. – le dijo, al notar que él no hablaría por lo absorto que estaba al verla, con tan solo una diminuta toalla de baño atada al cuerpo.
- Perdón por irme…me hubiera gustado verte despertar…- admitió él. Se acercó a ___________, rodeándole la cintura, leve…para que esa prenda de baño no se le cayera, aunque en verdad le hubiera gustado muchísimo. ______________ lo besó en los labios.
- ¿Perdón? No me pidas perdón Matthew…después de lo de anoche debería ser yo quién te pida perdón…
- ¿Por qué?
- Porque tú estuviste increíble y yo…
- Dios mío, nena. ¿Lo dudas? Ha sido el mejor momento de toda mi vida. – saboreó sus labios una vez más, ______________ trató de hablar mientras lo besaba.
- ¿De verdad?
- De verdad. – afirmó él. Sonriéndole. Entonces se apartó, abriendo los cajones de ropa, sacando un Jersey y unos pantalones largos con camuflaje verde.
- ¿A dónde vas?
- Quiero que te quedes con Sam un momento, ¿sí? Será rápido. – se sentó en el borde de la cama, acomodándose los pantalones. ______________ enredaba las puntas de su cabello con su dedo índice, tenía algo para decirle.
- ¿Estás apurado?
- Un poco. – la miró a los ojos, aún concentrado en ponerse la ropa rápidamente. Se puso de pie, apunto de colocarse el Jersey, cuando _____________ empezó a rozarle el torso con las manos.
- ¿No tienes ni siquiera cinco minutos? – le pidió. Se pegó más al cuerpo de Matthew, quien no pudo evitar sentirse atraído por la propuesta que vendría después. ______________ se acercó a su oído. – Quiero que me hagas el amor… - murmuró. Matthew dio un suspiro, con los ojos cerrados. Jadeante, le acarició el culo, mientras sus manos incontrolables rodeaban la cintura de su hermosa chica. La juntó a él, besándole el cuello.
- Dilo más fuerte…
- ¡Fóllame! – gritó, sin miedo a nada. Matthew solo pudo ponerse más agitado. Le gustaba lo atrevida que era siempre.
Entonces, no perdió el tiempo. La estampó a la pared, quitándole con brusquedad aquella toalla color perla, irreconocible, solo cuando tenía tantas ganas de follarla. Perdía el control. Perdiéndolo ahora…______________ le bajó los pantalones al mismo tiempo que accedía con los bóxers. Dejándoselos a mitad de pantorrilla. La erección afuera, superpuesta, al borde de la locura. Matthew la abrió de piernas, ______________ se dejó hacer por él como siempre, pegada a la pared empezó a recibir lo que tanto deseaba: embestidas continúas de su dura polla. De su hombre. De Matthew. Salía y volvía a entrar con tanta fuerza, fue entonces cuando las piernas de ____________ rodearon la espalda de Matthew, y el miembro de él entró aún más a sus entrañas, unidos…como uno solo. _______________ gritó alto, la voz la tenía más ronca que nunca, y eso solo explicaba cuanto es que había gritado anoche. Matthew empezó a besarle los senos, sus labios calientes, al igual que su cuerpo, succionaron sus pezones, haciéndola gozar más…muchísimo más. ______________ lo estrujó más hasta sus pechos. Sintiendo adentro de ella, el miembro de Matthew, entrando y saliendo de una manera increíble, con tanta velocidad, pero a la vez pausado y a su manera, tocándola y dejándola con ganas, lo tenía todo, lo poseía todo... tocaba el cielo con los dedos, con las manos.
- Nena…tengo que irme…- se excusó, parando en seco.
______________ lo apretó de las nalgas, haciendo que su pene volviera a entrar en ella. Un poco, pero delicioso.
- Ven rápido… - le rogó. Besándolo en los labios. – te necesito.
- No sabes cuánto te necesito yo a cada segundo. – le acarició los labios con los dedos, ___________ se los besó. – no sabes cuánto me gustas ___________.
___________ sonrió enternecida. Para luego recobrar la cordura, recogió la toalla de baño, enredándola en su cuerpo, Matthew se subió los pantalones. Quedando como antes, como si nada. Los tibios y pequeños labios de ella besaron a Matthew en los suyos.
- Vale…ya ha sido mucho… ve a hacer lo que tienes que hacer, guapo.
Matthew dio un suspiro, controlándose, ¿Cómo haría para no salir con esa erección? Si __________ lo había dejado con ganas. Muchas. Le apretó la cintura, besándola por última vez.
- Ya vuelvo, mi amor.
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I'll Be Your Protector - Matthew Espinosa Y Tu
FanfictionMatthew se aclaró la garganta. - ¿ Matthew? - murmuró el presidente. - ¿Me mando a llamar, señor? - preguntó rigiendo bien su cuerpo. Con compostura. - Sí, sí...ven pasa. Abrió un poco más la puerta, y entró. Bajo la cabeza, sin querer ser indis...