¡Dr. Sonrisitas! 🌈 2Jae

🌈 Capítulo Ocho 🌈

YoungJae abrió sus ojos, aún era de madrugada. Un ruido fuera de la habitación lo hizo sentarse en la cama.

JaeBum seguía durmiendo y bastante profundo a su parecer, ya que el sonido había sido algo fuerte y no se movió ni un centímetro.

Decidió ir a averiguar, caminó con sigilo por el pasillo hasta que el ruido volvió a escucharse. Provenía de la habitación de EunJae.

Preocupado, tocó dos veces la puerta.

  — EunJae-ssi, soy YoungJae. ¿Todo está bien?

No respondió.

  — ¿Bonita?

  — Oppa … entra.

YoungJae abrió la puerta en cuanto escuchó la voz de la pequeña. Ahogó un leve grito al verla sentada en el suelo.

  — ¡EunJae! ¿Qué pasó? ¿Estás bien? ¿Te lastimaste?

La pequeña negó con la cabeza, sosteniéndose de los hombros de YoungJae cuando éste la cargó para recostarla en su cama.

  — Quería ir al baño. Intenté pasarme sola a la silla e ir a buscar a papi, pero la silla no tenía el seguro en sus ruedas y se movió.

  — Y te caíste. — EunJae asintió, apenada. — ¿Te lastimaste?

  — No, oppa. Estoy bien.

YoungJae le acarició el cabello, haciéndola sonreír.

  — Sé que has tenido avances y muy rápido, EunJae-ssi. Pero debes ser cuidadosa y evitar hacerlo todo tú solita, por lo pronto. Podrías lastimarte y a nadie nos gustará eso.

  — Lo entiendo, no lo haré de nuevo. — dijo EunJae, aún sonriendo. — ¿Podrías no decírselo a papá? No quiero que se preocupe y de verdad no volveré a hacerlo.

  — Prométeme que no lo harás y guardaré el secreto.

  — ¡Lo prometo! — EunJae alzó su meñique, el cual YoungJae enlazó con el suyo con una sonrisa.

  — Yo también lo prometo, bonita.

JaeBum carraspeó desde la puerta.

  — ¿Qué hacen a las casi 3 de la mañana?

YoungJae y EunJae se miraron, antes de que el mayor formulara una solución.

  — Me levanté al baño y me pareció que EunJae estaba despierta así que vine a ver si estaba bien.

  — ¿Y lo estás, mi amor? ¿Te sientes bien? — JaeBum se acercó a su pequeña.

  — Quiero hacer pis.

JaeBum rió junto a su amigo.

  — Bueno, te dejó para que vayas con papá. — YoungJae se levantó de la cama. — Buenas noches otra vez, bonita.

  — Buenas noches otra vez, Doctor Sonrisitas. Gracias por tu ayuda.

YoungJae dejó un besito en la mano con la que EunJae le acarició la mejilla desde los brazos de su padre.

🌈

JaeBum entró de nuevo a su habitación después de ayudar a EunJae a conciliar el sueño.

  — ¿Se durmió?

  — Sí, ya.

YoungJae se cubrió de la nariz hacia abajo con la manta, viendo como JaeBum se acomodaba para dormir.