Capítulo 4. Bienvenido Quetzalcoatl

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Aparece una muchacha corriendo por un corredor de hospital muy preocupada, está alterada con muchos nervios y por un descuido tiraba su credencial de elector.

Llega hasta un cuarto del hospital y ve a la madre de Vladimir junto a su padre en una camilla conectado a un monitor de signos vitales.

-¿Que pasó aquí mamá?.- Pregunta la hermana de Vladimir

-Tu padre sufrió un pequeño infarto cuando estábamos buscando a Vladimir se puso muy mal, porque se enojo con un policía que no nos quería dejar revisar las cámaras de seguridad del hospital.

-¿Entonces tampoco saben nada de Vladimir?.- Preguntó la hermana con algunas lágrimas en los ojos.

-No, ojalá y este bien porqué no quiero que salga con sus estupideces de que no quería llegar a la casa, solamente le pido a Dios que no le haya pasado nada grave.

-Tu tranquila mamá, no te preocupes por Vladimir el es muy fuerte y pues no es tan idiota para que lo secuestren o algo así.- Decía la hermana muy segura de que su hermano estaba bien.- Tú ahorita no te preocupes por el mamá, vas a ver qué va a regresar sano y a salvó.

MIENTRAS TANTO EN EL LUGAR DESCONOCIDO:

-¿Es en serio eres tú?.-Preguntó extasiado Vladimir.

-Ahora veo que no necesito presentarme, pero aún así lo haré.- Voz desconocida.

-Si claro no hay problema tu cuéntame ¿Qué es lo que pasa?, ¿Porque me escogiste a mi?, ¿Porque tengo estas grandiosas habilidades

-Comó ya sabes soy Quetzalcoatl más conocido como serpiente emplumada, soy el Quinto sol el último que creo a la humanidad, fui traicionado por mi hermano Tezcatlipoca porque según el me quedé con todo el crédito al matar a Cipactli para poder crear el universo, me hizo tomar una bebida llamada pulque y pues me emborracho y terminé teniendo relaciones sexuales con mi hermana y me tuve que ir de Tenochtitlan porque ya no tenía derecho a estar ahí, entonces decidí convertirme en la estrella más brillante en el cielo cuando decidí regresar observé que Tenochtitlan ya no era lo mismo ahora estaba gobernado por gente de otros lugares con un Dios qué no sabía quién era, pero por alguna razón los pobladores decidieron creer en él y dejar de creer en los dioses mas poderosos de México.

-Wow, que gran explicación enserio estoy muy nervioso, pero una pregunta.

-Si, dime muchacho.

-¿Por qué me elijes a mi cómo un dios?, ¿Porque lo merezco?.

-Te eh observado muy de cerca llevo años tratando de escojer a alguien que merezca este poder y pueda usarlo para el bien.

-Wow ¿En serio me lo merezco?.- Pregunto sorprendido Vladimir.

-Si, tú eres el indicado para controlar este poder con el corazón puro que tienes podemos lograr muchas cosas tú y yo.

-Okey, estoy de acuerdo pero la pregunta ahora es, ¿Cómo carajos salimos de aquí?

-Bueno Vladimir los poderes que te eh dado han sido a distancia y son solo los principales que te puedo transmitirte.

-¿Y qué podemos hacer para poder obtener las demás habilidades?.- Preguntó nervioso.

-Perdon pero esto tal vez te duela.- Dijo Quetzalcoatl.

-¿Que cos....... Ahhhhhh joderrrrrr.

Quetzalcoatl en ese momento entro al cuerpo de Vladimir atravesando su pecho hacia sus órganos, Vladímir empezó a gritar por los dolores que sentía en la cabeza, piernas y brazos.

El Retorno De Los Dioses PrehispánicosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora