Aparece un nuevo personaje.
Se le observa preocupado y no dejaba de tronar sus dedos de la mano observaba una cicatriz que tenía en una de sus muñecas.
- ¿Dónde estará?.- Pensaba en su mente.
Aparece Balam y se queda observando la cara de la otra persona.
- ¿Que haces aquí?.- Decía Balam con un tono muy incómodo.
- Pues todos vivimos aquí, entiendo que esté sea tu "cuarto" si es que a esto se le puede llamar así.
- Bueno, pues no es lo mejor pero por lo menos tenemos un lugar donde estamos seguros.
- Necesito preguntarte algo muy importante.
- Claro, pregunta no preocupes.- Decía Balam mientras buscaba unas cosas.
- ¿Crees que Vladimir tenía razón?....
Balam deja de buscar y lo observa con una mirada penetrante.
- Mira la verdad tal vez si, pero no íbamos a arriesgar todo lo que tenemos actualmente y además ese idiota le ha pasado de todo.
- Lo sé pero pienso que si lo hubiéramos ayudado desde un inicio, todo esto ya hubiera terminado, recuerda cuando atacamos nosotros a Mictlantecuhtli éramos 10 dioses y asesinó a la mitad de nosotros, pudimos sobrevivir pero a mí hasta esta fecha no me sana la herida que me dejó en el brazo, si lo pensamos por un momento ese tipo es demasiado fuerte.
- Eso ya lo se Tlaloc, por eso tenemos que observarlo cuidadosamente, ¡Pero si tú así lo decides te puedes ir con el y arriesgar tu vida y la de tu dios sin lograr absolutamente nada!...- Al terminar de hablar se volvió un silencio muy incómodo.
- No, yo estoy bien con ustedes además se qué vamos a salir adelante y vamos a recuperar Tenochtitlan.
*Balam se acerca a él y le da un apretón de manos*.
- Verás que si hermano, corre ve a seguir haciendo tus tareas.
Cuando salió Tlaloc de la habitación, Balam seguía buscando y encontró un libro con un mapa y una foto de Vladimir pegada, además tenía cruces que eran los lugares donde se logra entender los movimientos que a tenido al rededor de este tiempo.
- ¿Dónde carajos estás?.- Decía Balam
*Unas horas después de lo sucedido en el capítulo anterior*
Se observa a Vladimir durmiendo en su cama, totalmente relajado, pero de un momento a otro se empieza a mover cada vez más, acelerando su respiración despierta de una manera muy desesperada y cae al suelo.
- No mames que buen madrazo.- Decía Vladimir mientras se sobaba la cabeza.
De repente se escuchó música a lo lejos cada vez más acercándose y una camioneta frena cerca de la casa de su abuela y sus luces brillaban totalmente contra el cristal, al asomarse un poco Vladimir solo ve a la camioneta estacionada mirando hacia la casa, entonces se levantan 2 hombres de la parte de atrás con una arma cada uno de ellos y empiezan a disparar contra la casa, se escuchó un grito que venía del cuarto de su abuela.
- ¡Abuela no se levanté!.- Gritaba Vladimir.
Entonces Vladimir tomaba la parte de abajo de su cama lanzandola contra la camioneta golpeándola y haciendo parar las balas por un momento pero llegaba otra camioneta y seguían disparando, uno de ellos saca una granada de su bolsillo y la lanza rompiendo la ventana, al ver esto Vladimir sale corriendo de la habitación pero la explosión lo alcanza y sale disparado contra la pared, se levanta y sube corriendo a la habitación de su abuela.
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El Retorno De Los Dioses Prehispánicos
Ciencia FicciónHola yo sé que no soy el mejor escritor pero la verdad eh estado pensando en un trabajo de este tipo hace como 1 año más o menos, ojalá y les guste porque yo estoy muy interesado mucho en el tema de la edad prehispánica me gusta más saber que hubo m...