ㅤㅤㅤㅤO2. we need protect him.

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      LOS DÍAS PARA LA JOVEN JUNIPER habían pasado como arena entre sus dedos así que de un parpadeo el tan horrible y a la vez ansiado lunes había llegado hacia ella, había sido difícil convencer a su amigo Beetlejuice de que su inclusión a una preparatoria no era una mala broma de su parte y que ahora podía presumir que se levantaría temprano todos los días junto a su padre y madre y ser más productiva que dedicarse a otras cosas, pero no era novedad que el troll fuese tan desconfiado y a fin de cuentas alegaba que le tendría un ojo encima a la chica.

Aunque sí, Juniper admitía que era extraño asistir a clases a una hora tan temprana, pero si eso significaba conocer a más personas con las cuales relacionarse creía que hacer esos pequeños sacrificios valían por completo la pena.

¡Y ahora mírenla todos! desayunaba pan con mermelada y malteada de chocolate, mientras que su padre conversaba con su madre mientras que en el fondo los acompañaban las noticias que el televisor anunciaba. Todo en conjunto les daba un ambiente típico de las películas y series que veía en ocasiones.
Por lo que no podía pedir más con tener ese momento pacífico en familia, claro... antes de que el sonido de una motoneta interrumpiera sus pensamientos de una familia perfecta.

—Creo que han llegado por ti, Joon. —Anuncio su padre, mientras que su madre se dedicaba en mirar por última vez sus notas para la clase con sus próximos alumnos nuevos.

—¿Por... mi? —Preguntó por primera vez, limpiando los restos de pan tostado de sus mejillas.

—Sí, mi amigo me ha comentado que su hijo te recogería en su motoneta, ¿no te lo había dicho?

La adolescente estaba a punto de responder con un inquietante respuesta negativa cuando de nuevo el sonido de la motoneta se escuchó, interrumpiéndo sus palabras

—Es mejor que te vayas ya Juniper, no querrás hacer esperar al muchacho. Los Sturgeon siempre damos una buena impresión.

—Mhm... sí, mamá. —Respondió tomando su mochila con todo preparado, se despidió de sus padres y abrió la puerta principal; el no saber aún lo que le esperaría desde esos segundos hasta el culmine del aquel día era algo que le ponía los pelos de punta.

Afuera de su propiedad se encontraba un muchacho alto, rubio y al parecer de su edad que no despegaba la vista de su celular.
Dedució que el chico era dueño de la motoneta, pues llevaba un casco en su mano y otro más en la parte de atrás del transporte.

Lo primero que pasó por la mente de la jovencita fue el típico estereotipo del chico atlético y a su vez apuesto… y no dudaba de eso último, no obstante, todo adolescente visualmente perfecto tenía algo desagradable, y en caso de ese clichés lo suyo era ser el típico chico malo que golpea y quita el almuerzo a los más débiles. Juniper respiró al mismo tiempo en que mostraba una sonrisa forzada, al divisar su perfecta cabellera rubia deseo enormemente que no fuera un chico malo.

Por su parte, y cuando los pasos de la muchacha fueron llegados a los oídos del rubio fue cuando este ultimo finalmente alzó su mirada hacia ella.
El chico carraspeo su garganta, sonrió mostrando una media sonrisa coqueta y abrió la boca dispuesto a ser el primero en hablar.

—Uhm, tú... ¿Jed Sturgeon?

—Mal, —Respondió ella, nerviosa simplemente por corregirlo.— Jeddediah... Jed, es m-mi hermano, yo soy Juniper Sturgeon.

—Oh... —Las mejillas del mayor tomaron un color rosado intenso, gracias a la vergüenza de haberla confundido.— Perdón, pensé que Jed era un apodo de…

—¿Chica? Lo se, lo dicen muy a menudo —Realmente nadie solía decirle aquello, pero siempre quiso usar esa frase.— ¿y tú eres...?

—Steve, el entrenador me dijo que te recogiera por temas de que eres nueva y eso... así que toma.

⸙ ㅤ 𝐍𝐈𝐌𝐔𝐄.  ──  ⲧⲅⲟⳑⳑⲏⳙⲛⲧⲉⲅ⳽Donde viven las historias. Descúbrelo ahora