Parte 11: Deseos "deseables"

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11-Deseos "deseables"

**Ichigo**

No hay nada mejor que disfrutar un poco de la piscina en estos días tan calurosos. Por fin hemos podido coincidir unos cuantos amigos para ir aunque yo casi siempre me junto con los mismos, Chad, Haruka y Tensa y eso que estos últimos son más pequeños que Chad y que yo, pero nos llevamos genial.

-Uf...está a tope y eso que hemos venido pronto- resoplo con lástima al ver el bullicio que hay en la piscina y Haru pone una expresión muy parecida a la mía mientras que Tensa se entretiene lamiendo su helado de nata.

-Ichigo, vamos a buscar sitio-

-Ok, Chad. Peques ¿no os mováis vale?- Haru y Tensa me lanzan una mirada furiosa haciéndome reír, pero antes de separarnos veo como Chad está mirando en dirección hacia un hombre robusto y de piel oscura que está batiendo su brazo en forma de saludo hacia nosotros.

-¿No es tu abuelo, Chad?-

-Sí...- veo como a Chad se le cae una gotita de sudor en cuanto su abuelo llega hasta nosotros y sonríe apartándose el puro de entre los labios. Juraría que a la entrada de la piscina pone que no se puede fumar...

-¿Qué onda chavales? ¿Venís a pasar la tarde?-

-¿qué...onda?- Haruka frunce el ceño intentando pronunciar las palabras que el abuelo de Chad ha pronunciado y éste se echa a reír.

-Sado, creo que tus amigos no me entienden con este acento-

-Yo a veces tampoco, abuelo....-

-Se nota que eres mitad japonés como ellos, pero a mí aún me cuesta hablarlo pese a que llevo años viviendo aquí. A ti te conozco Kurosaki y este par de pequeños...mm... ¿nietos de Ginrei y Yhwach?-

-Más quisiera ser el nieto de mi padre- Tensa resopla dejando de lamer su helado aunque luego vuelve a mordisquearlo ignorándonos.

-Conozco a vuestras familias lo suficiente. ¿Os venís? Tengo sitio cerca de la piscina, yo no necesito ponerme a la sombra, pero estos chicos, con lo blancos que son se quemarán-

-No me extraña que Chad y usted no necesitéis sombra...- no hay más que ver que tanto mi amigo como su abuelo tienen la piel tan oscura y morena que no podrían quemarse aunque se quedaran todo el día al sol. Sin embargo Haruka y Tensa son como dos copos de nieve y no solo lo veo yo, sino todo el que pasa por su lado y se les queda mirando. Aunque no creo que sea por su color de piel precisamente.

-JAJA!! ¡Trátame de tú, chico!! A mí los formalismos japoneses no me van, los amigos de mi nieto, son mis amigos ¡vamos!-

Casi tengo que aguantar la risa al ver como Chad parece un poco incómodo con su abuelo tan animoso pero la verdad es que a mí el hombre me cae bien y no es tan exagerado como venir con mi padre a la piscina. Con él la vergüenza está asegurada.

Chad no tarda ni dos minutos en meterse en el agua pese a lo fría que está y yo intento animar a Haruka a quitarse la camiseta y meterse con nosotros. El moreno suspira algo reticente a meterse, pero al final se queda en bañador haciéndome abrir los ojos al ver que usa uno largo

-¿Qué miráis tanto?-

-Eh....pensábamos que tú llevarías un bañador slip...-

-¡Vosotros lleváis bañador de pantalón corto! ¿Y yo por qué no?-

-Porque eres más...pequeño... ¿bajito con encanto?- Tensa sí lleva bañador tipo slip. Le señalo hacia la toalla donde Tensa se ha quedado terminándose su helado con el abuelo de Chad dándole conversación. Haruka nos mira ruborizado y molesto mientras se mete en el agua y se queda en una esquina de brazos cruzados hasta que Chad y yo nos acercamos a él.

"Pantalones del revés"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora