Hablar con Hyukjae acerca de mi abuela más temprano la puso de nuevo en mi cabeza. Recordé lo que fue perder a mis padres y luego ser enviado a quedarme con la mujer que había vivido en la misma ciudad, pero que rara vez aparecía. Cuando la veíamos, ella y mamá peleaban.
Recordé que mamá dijo una vez que siempre había sido cerrada, que nunca le había ido bien con las emociones. Pensé que por eso mi
madre había sido de la manera en que fue. Ella había creído que si amabas a alguien, lo decías. Las personas solían pensar que caminaba con su cabeza en las nubes, y supuse que mi abuela la veía de la misma manera.Pero luego papá y mamá se fueron y yo la necesitaba. Necesitaba a alguien, solo que ella no había podido estar ahí para mí de esa manera.
Me pasé una mano por el cabello antes de guardar las sobras.
Habíamos terminado de jugar cartas y luego cenamos. Hyukjae fue la primera persona con la que había estado durmiendo que comía y charlaba conmigo en mi apartamento. El imbécil estaba infiltrándose en cada parte de mi vida con sus habilidades ninjas.
—¿Qué pasa? —preguntó Hyukjae—. Estás tenso.
—No estoy tenso.
—Ahora estás mintiendo. No pensé que fueras de ese tipo.
La cosa es que Hyukjae era lo que me acosaba. No, eso no era del todo cierto. Era el hecho de que había visto a mi abuela. Que ahora estaba repentinamente hablando con él sobre ella, sobre mi pasado, y eso me estaba abriendo a una avalancha de emociones que me asaltaban.
Maldito hombre sexy y su magia vudú que hacía que mi polla se pusiera dura y frotaba el botón mágico de mi culo de la manera correcta.
—Solo estoy... pensando acerca de la mierda que te dije. —Me apoyé contra el mostrador.
—Lo siento.
Le eché un vistazo.
—¿Por qué lo sientes?
—Traer recuerdos negativos. Te di un orgasmo primero. ¿Eso ayuda?
Sonreí.
—Sí, lo hace. Los orgasmos siempre ayudan.
—¿Puedo preguntarte algo? —cuestionó Hyukjae.
—¿No me has preguntado lo suficiente esta noche? Cristo, te he derramado mis entrañas.
—No me dijiste mucho —respondió él.
—Te dije más de lo que le digo a la mayoría. —Lo que también había hecho ahora. No debería haber admitido eso.
—Creo que es obvio que hay una conexión entre nosotros. Tal vez no lo entendamos y tal vez sucedió rápidamente, pero está ahí.
Simplemente deberíamos ir con eso y no cuestionarlo. Al menos hasta que nos cansemos de dormir juntos.
Lo cual estaba seguro que ya estábamos haciendo. Hubo un mínimo cuestionamiento de nuestra situación y mucho contacto y conversación.
—Está bien, una pregunta más, Ninja, y luego es suficiente.
—¿Por qué crees realmente que el sexo es tan fácil para ti?
Una risa salió de mi boca.
—¿De qué te ríes? —Se cruzó de brazos y fingió hacer pucheros—. No te rías de mí.
—Lo siento, nunca antes alguien me había preguntado por qué el sexo era tan fácil. Es sexo.
—Sexo con un hombre por primera vez. Meter algo en tu culo por primera vez. Muchos hombres tienen problemas con eso. Sé que lo hablamos antes, pero... simplemente no lo entiendo. —Empujó la silla y se apoyó en la mesa frente a mí.