Sugar ʚ₍ᐢ. .ᐢ₎ɞ ¡minsung! (EN EDICIÓN)

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11 | Minho

Desperté con Jisung en mis brazos, los dos envueltos en una manta. Jisung seguía dormido, así que traté de estirarme un poco sin moverme demasiado.

Renunciando a mi comodidad comencé a acariciar el cabello de Jisung mientras escuchaba su tranquila respiración.

Noté que Changbin y Felix ya no estaban en el sofá. Probablemente habían ido a la habitación de Felix, así que no me preocupé.

Jisung comenzó a moverse un poco, por lo que asumí que había despertado. Él miró hacia arriba y me encontré con sus brillantes ojos marrones.

Volví a mis sentidos cuando Jisung murmuró un "buenos días" en tono suave y dulce.

Le sonreí, no era capaz de decir algo coherente. Es un misterio como alguien puede ser tan tierno, especialmente cuando acababa de despertar. Jisung era un misterio.

A los pocos minutos de estirarnos y luchar por levantarnos del sofá, nos encontramos en la cocina intentando hacer huevos con salchichas. Yo estaba a cargo de los huevos, así que batí lo mejor que pude.

Comimos nuestros huevos con salsa extra espesa casi en silencio. Miré a Jisung, parecía sumido en sus pensamientos, pero tenía algunos rasgos de preocupación pintados en su rostro.

ㅡ ¿Estás bien? ㅡPregunté entrelazando mis dedos con los suyos.

ㅡ Uh, sí, solo estoy pensando —Respondió Jisung fuera de sí.

Como si fuera a creer eso.

ㅡ ¿Acerca dé?

ㅡ Ti ㅡDijo con una sonrisa maliciosa.

ㅡ No lo creo, tenías cara de estreñido. ㅡbromeé, olvidando la mirada preocupada que tenía Jisung anteriormente.

Esa noche le estaba enviando mensajes de texto a Jisung, pero sus respuestas fueron breves y parecía realmente desinteresado. Terminé la conversación porque parecía que eso era lo que él quería, pero no me sentó bien.

Pasé el resto de la noche preocupado por Jisung, tenía ganas llamarle y decirle que todo estaba bien, preguntarle qué pasaba, pero no quería molestarlo, así que me senté en mi cama y pensé toda la noche. Y cuando digo toda la noche, me refiero a que fui a dormir cuando salió el sol.

Toda la semana le enviaba mensajes y llamaba a Jisung para ver cómo estaba, pero nada cambió. Sus respuestas fueron débiles y sonaba incómodo.

Simplemente no lo entendí. ¿Qué pasó? ¿Por qué me evitaba? Necesitaba respuestas antes de volverme loco. Así que hice un plan para enfrentarlo en la cafetería.

Martes

El martes llegó y yo era un desastre. No sabía qué iba a decir ni nada, pero honestamente no me importaba. Solo necesitaba a Jisung de vuelta.

Me puse una chaqueta antes de salir, caminaba rápido hacia Blues'. Estaba dispuesto a hacer cualquier cosa para recuperar al Jisung que conozco y amo.

Probablemente me vi como un loco cuando abrí la puerta principal de la tienda.

Escaneé todo el lugar, pero él no estaba allí.

Entré en pánico y corrí hasta su apartamento. Lo busqué en todas las habitaciones, pero todo lo que encontré fue a Felix viendo la pantalla de su teléfono.

ㅡ Felix ㅡExhalé.ㅡ¿Dónde está Jisung?

ㅡ Pensé que iba a ir a tocar como siempre, pero se veía realmente mal, probablemente fue a casa de Seungmin.

ㅡ Gracias ㅡSalí corriendo. Felix diciendo que Jisung se veía mal estaba repitiéndose en mi cabeza una y otra vez. Lo último que quería era verlo así. Verlo triste.

Recordé a Jisung diciéndome que Seungmin vivía una calle antes que él, por lo que su casa no podía estar lejos. Caminé rápidamente por fuera de cada casa y establecimiento, mirando por las ventanas en busca de Jisung.

Estaba sudando y me comenzaban a doler las piernas, pero nada podía hacer que me rindiera.

Pasaba por una casa color marrón cuando me detuve en seco. A través de la ventana vi dos figuras acurrucadas en un sofá, una inconfundiblemente era Jisung, la otra supuse que era Seungmin.

Jisung tenía la cabeza entre sus manos, su cuerpo se movía un poco delatando sus sollozos. No quería nada más que entrar y asfixiarlo con afecto, decirle que está yㅡ

Mis pensamientos terminaron abruptamente cuando miré la libreta. Si el diario de Jisung en la mesa de café frente al sofá.

Cuando noté que Seungmin comenzaba a voltear me agaché fuera de su vista. No sabía qué estaba mal en mí para que Jisung me ignorara, pero no quería empeorar las cosas luciendo como un acosador.

Antes de darme cuenta las lágrimas cálidas cayeron por mis mejillas, contrastaban con el frío clima.

Me di la vuelta y comencé a caminar a casa.

De vez en cuando levantaba una mano para secarme las lágrimas, deseando poder estar allí para secar las de Jisung.

Sentí que lo había perdido. De nuevo.