One-Shot's Yaoi Captain Tsubasa.

#18

Pareja: Kojiro Hyuga × Hikaru Matsuyama.

Advertencias: Hard

Género: Yaoi.

Los personajes de Captain Tsubasa no me pertenecen, yo solo los utilizo para esta historia.

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-Eres un completo idiota.- dijo Hikaru con el seño fruncido.-

-¿Estás molesto?.- preguntó Hyuga-

-Oh no, molesto no es la palabra que yo usaría.- respondió furioso.-

-No es mi culpa.- se defendió el tigre.- Ya no estés enojado conmigo.-

-¿Ah no? Esto es absolutamente tu culpa Hyuga, mejor cállate o me enojaré más.- dijo fulminándolo con la mirada.- Además... ¿Que clase de excusa fue esa?.-

-¡Fue lo primero que me llegó a la mente!.- respondió fatigado.- Dijiste que mantuvieramos lo nuestro en secreto y eso fue lo que hice.-

-Pues vaya manera de hacerlo, ahora estamos castigados por "pelea física".-

-Pues es mejor eso a estar castigados por "follar en los vestidores".- dijo con una sonrisa arrogante.-

Matsuyama solo lo fulminó nuevamente con la mirada y se acomodó mejor en la silla en la que estaba sentado.

Su relación había comenzado unas semanas después de formar la selección juvenil de Japón. Ambos resolvieron sus diferencias del pasado e iniciaron una relación amorosa. Decidieron que dicha relación sería un secreto entre ambos, aún lo confiaban ni tenían suficiente confianza con el resto de los jugadores. Todo marchaba bien para ambos hasta la tarde de ese día...

Unas horas antes...

Buscaba desesperadamente una toalla para secarse el sudor del cuerpo en aquel angosto cajón. Inconscientemente en su búsqueda movía sus caderas y trasero en un lento vaivén de lado a lado.

-¡Tsk! ¿Dónde está?.-

En medio de su concentración no notó la presencia de alguien más hasta que sintió una fuerte nalgada en su glúteo derecho. Se volteó, ya sabía de quién se trataba.

-¿Qu-Qué haces?.-

-Te estaba azotando el trasero.- respondió tranquilo.-

-¿Y lo dices así? ¿tan tranquilo? Eres un descarado.- respondió indignado.-

-Vamos, se que te gusta.- respondió dándole otra nalgada, un poco más fuerte.-  

-¡P-Por supuesto que no!.- rápidamente se movió del lugar.-

-¿En serio? Pues a mi si me gusta, pero aún más cuando  no traes ropa y puedo tocar tu piel.- le dijo suavemente al oído.-

-Aquí n-no al-alguien podría vernos..-

-No te preocupes tanto, nadie vendrá.- 

Estaba detrás de Matsuyama, empezó a besar delicadamente el cuello del chico. Hikaru liberaba suaves suspiros en respuesta a sus caricias, que pronto se convirtieron en gemidos. Dirigió sus manos nuevamente al trasero del chico y lo apretó con fuerza a la vez que lo besaba con pasión.