A media noche escucho un cristal romperse abajo, me asusto y abro la puerta de mi habitación para ir a ver qué está pasando. Cuando salgo al pasillo pregunto: ¿Mamá? ¿Matías? ¿Quién está ahí? Alguien me sorprende por la espalda y me tapa la boca de repente susurrándome: shh o te mueres... Me quedo paralizada, helada. Siento una ligera picadura en el cuello y pierdo el conocimiento.
Despierto con un intenso dolor en el cuello y con la garganta totalmente seca. Esta todo oscuro y húmedo, estoy absolutamente despavorida, tirada en una pequeña cama. Solo hay un destello de luz que proviene del techo donde hay una ventana y se loga ver la luna. Debido a ese destello, puedo notar que las paredes son de metal. Me llevo las rodillas al pecho y me quedo mirando la luna. Eso me tranquiliza. No sé porque estoy aquí, no sé quién me trajo aquí. Y lo peor, no se si mi familia esta bien.
Luego de varias horas muerta de miedo, veo la puerta abrirse. Me muevo hasta la pared de atrás, aterrada. Entra una mujer con largo pelo castaño y ojos azul profundo. Viste de blanco, lleva una bata azul y lentes negros. Se me hace conocida. Es la mujer con la que he estado soñando.
-Olivia Martin, ¿Cierto? -Me dice esbozando una sonrisa. -Soy Sofia Palmer, estaré cuidando de ti e instruyéndote.
- ¿Instruirme para qué? ¿Qué hago aquí? -Le digo con mucho pánico. –¿Quién eres?
-Estas aquí porque así lo ha pedido el doctor P. No te haremos daño, lo prometo. -Me dice con la sonrisa anterior intacta.
- ¿Doctor P? -Le pregunto.
-Si, el doctor R lo llamamos. Es el líder del consejo de doctores y científicos de Málaga. Verás, hace años, tu madre le robó algo, y él lo sufrió mucho. Pero se le ha ocurrido un plan para encontrar a tu madre y ha dado frutos. -Me dice ladeando la cabeza hacia la derecha.
-Peterson. -Digo con la voz entrecortada.
-Así es mi querida Olivia. El doctor Peterson, el doctor al que tu madre le destrozó la vida, al que le robo algo en lo que había trabajado toda su vida. Y lo convirtió en un virus mortal, algo que pretendía ser una cura para el cáncer, ella lo llevó a hacer una enfermedad más mortal que este. -Me dice mirándome fijamente.
-Todo lo que hizo mi madre fue para protegernos. Para salvar a su familia ¡Siempre ha sido así! -Le grito.
-Y ahora la destruirá, que pena. -Me dice dando media vuelta para irse.
- ¡Dime que hago aquí! ¿Qué hiciste con mi familia? -Le grito desde lo más profundo, ahogada en el llanto.
Cuando sale de la habitación la escucho decir: sédala y vístela. Vendré por ella en veinte minutos.
Una enfermera entra con una jeringa media de una sustancia. Me resisto y grito:
- ¡No! ¡Por favor no lo hagas!
Me clava la aguja en el cuello y otra vez, pierdo totalmente el conocimiento. Me despierto otra vez con un fuerte dolor en el lado izquierdo de mi cuello y sedienta. Miro mis brazos y tengo un suéter blanco, miro mis piernas y tengo puesto un pantalón blanco. Estoy completamente vestida de blanco.
Me voy a volver loca, estoy aquí y no tengo idea de donde esta mi familia. Sollozo durante minutos. Pero luego me digo a mi misma "Tranquila, todo saldrá bien. No ganas nada llorando, lo resolveré"
Vuelve a abrirse la puerta de metal y me aterro aún más que la vez anterior. Entra nuevamente la mujer, Sofia. Me aferro a una de las barras de la cama, y cuando se acerca logro pegarle un puñetazo en el estómago. Sofia grita diciendo:
-Guardias, ¡Llévensela al doctor! Seguro estará encantado de verla. -Dice esbozando una sonrisa, pero aferrándose a su estómago por el golpe que le he proporcionado.
Me resisto, pero no puedo pelear más, lo que me han inyectado me ha puesto débil, así que me siento cansada y paro de resistirme. Abren una puerta de metal, y me arrojan dentro de una sala completamente blanca, con grandes ventanas de cristal que dejan ver el sol. Y con máquinas tecnológicas que jamás había visto. Es un laboratorio inmenso, reconozco algunos utensilios. Mientras me levanto del suelo, un hombre sale de una máquina, desprendiendo un vapor.
-Me alegra verte, Olivia Martin. Hija de Carol Martin, o... ¿Roberts? Cuanto admiraba a aquella chica, era tan inteligente y capaz de todo... Hasta de robar. Esa mujer robo mi trabajo de años. No dormía por trabajar en ese proyecto, y ella solo lo robó y lo convirtió en un virus, vaya inútil. -Me dice frotándose las manos de un pañuelo.
-No llame así a mi madre. ¡Ella tuvo sus motivos! Solo quería ayudar a su familia. -Le digo.
-Pudo pedir mi ayuda, yo se la hubiese dado, pero prefirió traicionarme por un puesto y unos cuantos euros. -Me dice entrecerrando sus ojos.
- ¿Dónde está ella? ¿Dónde están todos? Estaban en casa conmigo, me trajeron a mi aquí. ¿¡Donde están ellos!?
-Tranquila, no les haré daño. O tal vez si... No lo sé, nadie nunca sabe. -Me dice susurrando la última parte.
Se me pone la piel helada. Peterson levanta su mano derecha y me señala un pasillo.
-Acompáñame Olivia. -Me dice mientras se da media vuelta.
ESTÁS LEYENDO
2074
General FictionLa historia se sitúa en el futuro postapocalíptico de Olivia Martin, en la ciudad distópica de New York, donde luego de muchos años destruyendo nuestro planeta con la desforestación, la contaminación y esos factores que todos conocemos, finalmente L...