Capitulo 10.

2 0 0
                                    


Salimos de la habitación y entramos a la mía, la cual está más cerca de la de mamá. Cuando entramos, nos tiramos en la cama y nos echamos a reír a carcajadas. No había tenido un momento así hace meses. Mamá solo nos da las buenas noches y entra a su habitación inmediatamente.

-Liv, tenemos que encontrar esa llave y descubrir que tiene mamá en ese diario, y por qué es más importante que los demás. -Me dice agarrando mi hombro.

-Ya la encontraremos y lo averiguaremos. -Le digo.

Nos quedamos leyendo en mi cama hasta tarde, nos dormimos por completo.

Me encuentro sola, en un lugar muy frio, oscuro y húmedo, con paredes de metal y una sola ventana, en el techo. Es de noche, solo se ve el cielo nublado y oscuro a través de la ventana. No hay nada de luz. De una puerta sale un escaso destello, y de él, una mujer vestida de blanco con bata azul. Me mira fijamente y me ofrece una caja de madera. Me niego a tomarla. Niego con la cabeza y ella me la sigue ofreciendo. Me sigo negando y se me acerca más, ofreciendo la caja. Hasta que le grito:

- ¡No!, ¡No!, ¡No!

- ¡Debes salvarlos! -Me grita ella aún más fuerte.

- ¡Vamos Liv! ¡Despierta!

Despierto rápidamente, Matías está a mi lado mirándome muy fijamente y preocupado.

-Solo una pesadilla Mati, perdón por despertarte o asustarte. -Le digo agitada mientras me llevo las rodillas al pecho. Estoy muy sudada y mi corazón late muy rápido.

- ¿Qué pasaba en la pesadilla Liv? ¿A quien le gritabas que no? -Me pregunta acariciándome el cabello.

-No quiero hablarlo ahora, vuelve a dormir. -Me doy media vuelta y finjo dormir, pero permanezco despierta. Logro conciliar el sueño cuando ya casi sale el alba. Despierto casi sola en casa. Al parecer ya es tarde y mamá fue a trabajar, Matías debe estar con Susan en algún lado, siempre salen los sábados en la mañana a buscar libros a la biblioteca central. Solo estoy con la nana, debo cuidarla hoy. Voy al refrigerador por algo de tomar y encuentro una nota de mamá que dice: "Cuida a tu nana, la llevé temprano a hacerle los análisis, paso a buscar los resultados más tarde. Con amor mamá" Giro los ojos. Por Dios, claro que la cuido, mamá.

Hoy casi no he hecho nada, he estado vigilando a la abuela y todo bien, se la ha pasado dormida. La ve la ropa porque ya me aburria. Subo a poner la ropa limpia de mamá en su cama. No me puedo resistir y abro el cofre otra vez, sigo viendo cosas y me llama mucho la atención lo que hay en ese diario. Me propongo buscar la llave. He buscando en todos lados y ni señal. Hasta que levanto una pequeña caja que hay en el armario. Estaba debajo. Me dirijo a abrir el diario, lo pienso y creo que está mal... Pero me da mucha curiosidad.

Lo abro. El diario es sobre cosas de ciencia, química y tecnología muy avanzada, no lo comprendo. ¿Por qué mamá tiene todo esto? Y no es de nadie más, es su letra. Formulas químicas con advertencias y notas "importantes". Planos de tecnología avanzada, para maquinas eléctricas muy raras y otras cosas que no comprendo. No hay nada interesante aquí. Cuando cierro el diario para ponerlo en su lugar, caen unos documentos de un compartimento que no había visto. Es un contrato, y un juramento firmado por mamá. Quien firma como... ¿Carol Roberts?

Me detengo a leerlo. Es un contrato de cinco años con la clínica San Judas de Málaga. Un contrato que debe ejercer como líder analista-investigadora de virus mortales. O sea, que mamá es una científica e investigadora de virus mortales y no sabíamos nada, Dios.

El juramento dice que debe mantener en total secreto algo, y dice lo siguiente:

Yo, Doctora Carol Roberts, juro proteger mi trabajo científico. Mantenerlo en secreto. Tanto este documento como mis conocimientos.

Los procedimientos realizados para encontrar una cura contra el cáncer han sido negativos, estos son mis apuntes: El proyecto X, no ha pasado las pruebas biológicas probadas en pacientes con cáncer de ningún tipo. Sesenta y cinco mujeres y treinta y cinco hombres han desarrollado otra enfermedad incurable. Llamaremos a esta Virus X por el momento. Los hemos tenido en cuarentena a todos. Los síntomas presentados son: piel pálida y escamosa, amnesia, hambre voraz y secreción de sangre por la nariz y la boca, en algunos casos, por los oídos. Hemos puesto a un infectado del virus X y a una persona sana en una habitación cerrada, para comprobar si es contagioso. Es negativo, no se contagia mediante el aire. Hemos comenzado las ultimas pruebas. Inyectamos sangre de un infectado a una persona sana y a las 24 horas ha contraído el virus. Solo se contagia por la entrada de sangre contaminada al sistema humano. Hemos ejecutado al treinta y cinco por ciento de los infectados para que no haya riesgos. Se ha inventado una inyección letal especial para ejecutar a los pacientes con el Virus X. Uno de ellos ha escapado el día de hoy en un desliz. Tratamos de encontrarlo, pero no ha sido posible. Hoy hubo un alboroto en la ciudad de Málaga, producido por el temor a un ser que han llamado "repudiado". Lo hemos capturado y ejecutado. Yo, Carol Roberts me comprometo a guardar el secreto y a llevar conmigo toda la muestra recuerda del virus a New York, donde los científicos liderados por Jhon Richards tratarán de tener éxito al encontrar la cura de este. – Doctora Carol Roberts.

Nos ha mentido todo este tiempo, con su nombre, su profesión y sus errores. Ella ha desarrollado y probado el Virus X en humanos, virus que tal vez mi abuela pueda padecer. Y el doctor Richards ha sido parte de esto. 

2074Donde viven las historias. Descúbrelo ahora