No sé como logré salir viva de Lacrontte, pero afortunadamente pude regresar a Mishnock y ahora mi familia y yo nos encontramos en una reunión en casa con el Barón Russo y Valentine.
—Me alegra escuchar que sus ventas fueron exitosas. —Felicita el hombre, llevándose su parte del trato.
—Estamos muy agradecidos, señor, por su ayuda. —Habla papá.
—Los amigos de mi Val siempre serán los míos. Si hay otro evento con el que necesiten financiación, no duden en enviarme una misiva.
Dominic es muy parecido a Valentine en el carácter y rasgos físicos, sin embargo, este es alto, robusto, con barba oscura y un porte de noble innegable.
—A propósito, señor Malhore, le avisaré cada detalle de lo que ocurra en la reunión con El Mercader. Permanezca tranquilo, yo me encargaré de darle el dinero.
—¿Sabes si él se quedará a vivir en Mishnock?
—No lo veo posible, hasta donde estoy informado pronto se casará con su novia en Lacrontte, por lo que es poco probable que esté aquí en los meses siguientes.
—Eso supone un alivio para nosotros, estamos cansados de sus amenazas.
—Despreocupe y si llegas a necesitar quién cuide de sus recursos, búsquenme —cierra su maletín y le da la mano a papá —. No siendo más, considero que es hora de retirarnos.
—Padre, ¿cree que pueda quedarme? —pide Valentine —Es decir, si a los Malhore no les molesta.
—Por supuesto. Emily —me mira con una sonrisa que causa arrugas al rededor de sus ojos —. Cuida bien de mi hija.
—¿Cómo te llamas? —Le pregunta Mia, una vez Dominic abandona la casa.
—Valentine Mergana Russo ¿Y tú eres hermana de Emily?
—Depende de la ocasión ¿Eres millonaria?
—No seas imprudente —reprende Liz —. Esas son preguntas que jamás deben hacerse.
—Descuida, no me molesta. Tú debes ser la novia del general Peterson ¿cierto?
Es evidente que lo pregunta debido a todos los rumores que hay alrededor de su nombre.
—Liz Malhore, un placer —extiende la mano — ¿Conoces a Daniel?
—Conozco a casi todo el mundo en Palkareth. El general es un gran hombre, muchas desearían estar en tu posición —adula sonriente —¿Querida Emily, podemos ir a tu habitación? Dicen que por medio de ella se puede conocer una persona.
—Claro, sígueme arriba en las escaleras.
A decir verdad, me agrada estar con Valentine, no obstante, mi mente está puesta en otros asuntos que debo resolver con urgencia y en los cuales no había cabida para visitas.
—Este lugar es muy primaveral elogia al adentrarse —. Te gustan mucho los colores pastel al parecer.
Se pasea por toda la habitación observando cada detalle de la misma y se tiene en la mesa de noche para admirar mi pequeña colección de bolas de cristal.
—¿Estudiaste danza clásica? —Pregunta ante la bailarina que está al interior de una pieza.
—No, fue algo que siempre quise hacer cuando era niña, pero mis padres no podían costar las clases.
—¿Por qué no? Ellos son unos perfumistas muy reconocidos, podían pagarlas.
—No siempre fue así. Al principio teníamos que limitarnos en muchas cosas y ahora que ya podemos, creo que desistí de la idea.
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El perfume del Rey. [Rey 1] YA EN LIBRERÍAS
General FictionEmily Malhore es hija de los perfumistas más famosos del reino de Mishnock. Su vida era relativamente sencilla, pero el destino le tenia otros planes al cruzar en su camino al príncipe Stefan, quien queda maravillado con ella. Un conjunto de evento...