seven

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—No me digas que...

—¿Este es el fin del mundo?—terminó la pregunta, 5.

—No.—soltó con un tono de desesperación 0. —Esto no es el fin del mundo.—ella se levantó de dónde sea que estuvieran e hizo con sus manos un movimiento circular, dónde se hizo un hoyo que dejaba ver una calle de alguna ciudad.
Gente pasaba, caminaba y hablaba normalmente. 0 volteó a ver a 5 un poco confundida, ¿qué era este lugar?

—¿Qué mierda es ese lugar?—preguntó el chico.

—No lo sé.—contestó 0. —Pero deberíamos ir a revisar en vez de perder el tiempo. No podemos quedarnos mucho tiempo aquí.

5 asintió y se levantó, la chica repitió el acto y caminaron hacía aquel círculo, estando frente a él se miraron mutuamente. El ojiverde tomó la iniciativa y salió de aquel círculo, ofreciéndole la mano a 0 para que saliera ella también. La chica tomó su mano y comenzaron a mirar el lugar y sus alrededores.

Gente caminaba por las banquetas, sin duda su ropa no era de la época de la que venían. Habían más bicicletas que carros, niños gritando y jugando, un arcade muy antiguo y otras tiendas.

—Esto no es en nuestro tiempo...—fue interrumpido ya que la voz chillante de un niño sonó.

La voz provenía de un chico con lentes acompañado con otros 3 niños. Todos eran altos, pero particularmente el de lentes llamaba aún más la atención porque eran realmente grandes. 0 y 5 miraban al niño, sus insultos sonaban tan altos que estaban esperando a que el chico se callese y continuar hablando.

—¡Vamos, Eddie Spaghetti! Te he ganado durante toda la vida, ¿una vez más te sorprendió?—decía el ya mencionado.

El grupo de amigos venía saliendo del arcade, caminaban a dirección de 0 y 5. Por alguna razón les llamó mucho la atención el grupo de amigos, mantenían fija la mirada a ellos.

—Oh, miren. Una chica nueva.—dijo el de lentes, parándose justo frente a 0.

—También hay un chico, Richie.—un chico de cabello castaño y ruloso habló. Pareciera que se desesperaron por el comentario de Richie.

—Richie, vámonos de aquí. Recuerda la última vez que hiciste esto, terminaron diciéndole a nuestras madres y nos perjudicaste a todos. Déjala en paz.—susurraba un pequeño niño a Richie, pellizcandole la camisa.

—No, no hay problema. Mi hermano y yo estamos un poco perdidos. ¿Podrían decirnos cómo se llama esta ciudad? Sólo veníamos de paso, venimos de un viaje en carretera.—les dijo 0 a los chicos, retorciendo para estar a lado de 5.

—Bienvenidos a Derry, nena.—contestó el chico. —Te puedo dar un tour, sí quieres. Uno por mi habitación.—5 rodó sus ojos al oír eso.

—Aggggh, aléjate cuatro-ojos.—renegó un chico de cabello lacio, pero este tenía un color de cabello dorado, se veía muy bien cuidado. Con su mano hizo hacia atrás a Richie y se puso frente a 0.
—Lo siento, es un poco tonto. Están en Derry, ¿necesitan ayuda? Sí lo que buscan es comida, creo que tienen mala suerte, en Derry los domingos nada está abierto.

5 abrió sus ojos como plato y puso su mano en la frente. Tomó del brazo a 0 y la alejó de aquel grupo de chicos.

—Mira su ropa.—le dijo 5 y 0 volteó a mirarlos.—No son de nuestra época. Aquí es Domingo. ¡En nuestro tiempo era sábado!—0 rascó su nuca y volteó a mirar al grupo.

—Disculpa...—0 hizo una pausa, en realidad no sabía su nombre. —¿Qué día exactamente es hoy?

—Hoy es Domingo 21 de Abril.—contestó el ruloso alto, algo confundido.

—¡Lo ves!—dijo exaltado 5. —Espera... Aquí es antes. Es una semana menos. En nuestro tiempo era Sábado 27. Algo está mal. ¿Y si alteramos el tiempo? ¿Y sí nuestro tiempo ya se destruyó y lo arruinamos todo?—decía desesperadamente 5. Al fondo los chicos alcanzaban a escuchar y tenían una cara confundida.

—Manten la calma, 5. Sí estamos vivos es porque no ha sido el fin del mundo. Aquí... Es una línea temporal diferente. Tenemos que investigar qué hacemos aquí y por qué. Tú sólo tranquilizate.—le dijo 0. Soltó los hombros de 5 y caminó de regreso con el grupo de amigos.
—¿Cuáles son sus nombres?—les preguntó ella.

—Yo soy Bill, él es Eddie, él de lentes que dice palabrotas cada 2 segundos es Richie, y no menos importante Stan. ¿Cómo se llaman ustedes?

—Aahh... Él se llama Aidan. Yo soy Eliza.—contestó ella nerviosa. 0 le dio una mirada de confusión, ella disimuladamente le dio un golpe con el puño.

—Pudiste escogerme un nombre mejor.—susurró.

—Suenan a nombres del futuro.—dijo Richie. Los hermanos sonrieron nerviosos. —Cool.—añadió riendo.

—¿Saben de algún lugar donde podamos quedarnos a dormir?

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—¿Por qué no me dijiste que podías hacer aparecer dinero de la nada? Deberías estar en las listas de las personas más millonarias del mundo, tienes todo el dinero que quieras.—le dijo 5 a 0, mientras se quitaban los zapatos. Ya estaban en una habitación de hotel.

—No es algo de demasiada importancia para mí.—le dijo 5 a 0, levantándose de su cama. —También puedo hacer esto.—tocó el pecho de 0 con su dedo y mágicamente cambió de vestuario, ahora él tenía una pijama. Hizo lo mismo con ella misma y entró al baño.

—Mierda. Debí conocerte antes.

000 ; «Número 5»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora