#12. Un favor

7.1K 389 34
                                    

ERIKA

Terminé de leer la nota de mi mejor amiga, la doblé y la metí en mi bolsillo.

Estaba de piedra. No podía creer que no hiciera la carrera con Noelia, llevábamos planeando esto desde que éramos amigas en el instituto.

«Bueno tranquila, seguro que volverá, es su sueño.»

Inmediatamente cogí mi móvil para llamarla.

—Vamos Noelia, coge el teléfono.

—Buzón de voz... —saltó el contestador y colgué.

«¿Cómo se ha podido ir sin avisarnos?»

Entonces alguien llamó a la puerta.

Pensando que era Noelia apresurada porque se habría dejado algo, corrí a mirar por la mirilla.

Hugo.

— ¿No tienes llaves? —le miré de reojo.

—Me las he dejado. Tampoco me he ido muy lejos —entró con fuerza empujándome—. ¿Y Noelia? ¿Aún no se ha ido?

—Eeeh... Sí, se ha ido hace un cuarto de hora.

— ¿No se ha despedido? Bueno, eso es que volverá en menos de una semana.

—Hugo... No va a volver.

— ¿D-De qué hablas? —me miró aterrado.

—Lee esto —metí mi mano en el bolsillo del pantalón y le entregué la nota—. De mi tampoco se ha despedido.

—P-Pero... Esto tiene que ser una broma —arrugó el papel furioso—. Me vengo a Madrid por ella, ¿y me deja aquí solo? Ahora mismo me vuelvo a casa.

— ¡No! Noelia no quiere que vayas, son cosas suyas.

—No voy por ella, me voy de aquí porque no pinto nada, ¿qué hago aquí?

— ¡¿Me vas a dejar aquí sola?!

—S... Bueno no... Bueno... No lo sé...

—Me dijisteis que no iba a cambiar nada si vosotros dos salíais —me senté en el suelo apoyándome en la puerta de la entrada.

— ¿Por qué dices eso? Que se haya ido Noelia no significa que no seamos mejores amigos.

—No, lo digo porque no quieres estar aquí conmigo, te quieres ir de Madrid y solo has venido por ella —agaché mi cabeza entristecida.

—No digas eso, también vine por ti, para vivir con mis dos chicas preferidas —puso su brazo sobre mi hombro rodeándome.

— ¿Entonces por qué no te quedas? Los dos solos estaremos bien.

—Bien, bien, no estaremos. Ella era la única que cocinaba bien —reímos.

—Eso sí...

—Me quedaré contigo, pero no llores o lloraré yo —besó mi cabeza con ternura.

Nos fundimos en un abrazo y aclaramos todo.

— ¿Qué hacemos? —dijo Hugo cansado de abrazarme.

—Vete con el vecino si quieres.

—Solo si vienes tú.

—Paso.

— ¿Por qué? Lo pasarás bien.

—No me gustan los videojuegos.

—Pues haremos lo que tú quieras, Rubén quería verte.

— ¿A mí? —me giré bruscamente hacia él.

El chico de al lado. [ElRubius] #Wattys2015Donde viven las historias. Descúbrelo ahora