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Al día siguiente, Minseok comprobó que realmente Jongdae no había ido a la universidad debido la pelea de ayer. Puso, inmediatamente, una mueca de disgusto que fue vista por sus amigos.

En el fondo, entendía por qué no había podido asistir. Le había dejado la cara hecha un terrible mapa. Por no hablar de las heridas en el estómago. En conclusión, Jongdae había salido muy herido de la pelea. Aunque, a favor del chico, a él todavía le dolía el costado por sus constantes patadas.

Pero no se arrepentía. Fue divertido pelear con él, y eso que se contuvo bastante. Comprobó que el chico tenía realmente agallas, no era solo palabrería y eso le encantaba.

Lamió sus labios de manera inconsciente y apoyó el codo en la mesa apoyando su cabeza en la mano, y pensó en cómo se debía de encontrar.

Pocas veces se preocupaba por alguien, pero ahí estaba él, pensando en cómo debería de estar Jongdae y que estaría haciendo ahora.

Después de tres clases aburridas para la mayoría de alumnos, Minseok y sus amigos no tenían clase durante una hora entera por lo que era puro descanso para ellos. Como no tenían nada que hacer, acabaron sentados en uno de los bancos del patio de la universidad hablando de cosas al azar como el no novio de Luhan, menor de edad, de Jongdae y de algunas cosas más.

-Luhan, agradeceríamos que dejaras el móvil –Habló Yixing –El chico debe estar estudiando y tú le interrumpes.

Luhan puso mala cara.

-Dicho de esa manera es verdad... -Murmuró –Pero es que no puedo ignorarle si me habla.

-No es ignorarle, solo dile que debe estudiar y que habláis luego –Dijo Minseok –No lo conviertas en un segundo tú. Tu época de instituto fue penosa.

En eso Minseok tenía un punto. Luhan pasó por una etapa rebelde donde no quería estudiar, no hacía los deberes y suspendía todos los exámenes. Cuando vio que ese camino le impedía llegar al futuro que deseaba, hasta que Minseok no le gritó cansado de sus tonterías haciéndole ver que debería preocuparse un poco por su futuro a pesar de odiar los estudios – ¿Quién no los odiaba? –, y cuando vio, por primera vez, el rostro de decepción de su madre cuando esta se dio cuenta que su hijo estaba en medio de un callejón sin salida del cual no parecía querer salir; entonces, cambió.

-Bueno... Supongo que dicho así tendré que decirle que estudie... -Murmuró –En fin.

Le envió un mensaje a Sehun que fue respondido en poco tiempo y sin problemas guardó el móvil.

-¿Sabes cómo está tu gatito?

-¿Gatito? –Cuestionó Minseok con la ceja alzada –No tengo ni idea.

-Dices que se parece a un gato, así que ahora será tu gatito –Dijo Luhan riendo. –Muy cursi, pero que quieres que te diga, mi mente ahora solo piensa esas cosas.

-Esas cosas juntadas con follarte a Sehun –Rió Chanyeol, todos rieron incluyendo Luhan que no se molestó en negar ese hecho. –Por cierto, Luhan... Baekhyun está muy enfadado con eso de que quieres salir con su primo.

-Ah, lo sé –Dijo despreocupadamente –Dile que no se preocupe, no pienso utilizarle.

-Le dije eso cuando me lo llevé.

-A todo esto –Intervino Yixing -¿Para qué te lo llevaste?

Chanyeol sonrió triste y suspiró.

-Bueno, quería solucionar aquello –Habló sabiendo que todos comprenderían de que hablaba –Pero me dijo tantas cosas que eran verdad que ahora estoy entre la espada y la pared.

The Last Fight - XiuChen/ChenMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora