The Last Fight - XiuChen/ChenMin

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Siendo aquel día nochebuena, Jongdae tenía claro una cosa, Minseok tenía que pasar esa navidad en su casa con su familia sí o sí. Lo pensó por días y pidió ayuda a Luhan para que le convenciera de ello, porque Minseok le dijo que no pasaba nada, podía pasar la navidad de nuevo en casa de Luhan o solo – que había habido navidades así, cuando la familia de Luhan viajaba a China –. Luhan, por supuesto, estuvo de acuerdo en ello, y había estado detrás de su mejor amigo intentando convencerle.

Por otra parte, se reunieron todos, incluyendo las chicas, para hacer el famoso juego del amigo invisible, donde quien te tocara tendrías que comprarle un regalo dentro de un máximo a gastar de dinero. Jongdae parecía tener suerte, porque le tocó Minseok, pero no fue el caso de Luhan, que le tocó Baekhyun y no tenía ni idea de que comprarle a semejante diva.

Jongdae le propuso productos de belleza, pero sería difícil encontrar uno que Baekhyun no tuviera, por lo que con ayuda de Sehun – que como primo de Baekhyun que era, sabía sus gustos mejor que nadie – le compraron una camiseta muy de su estilo. Por otro lado, Jongdae le compró a Minseok una camiseta muy del estilo roquero punk que, cuando el otro la vio, le brillaron los ojos y besó a Jongdae apasionadamente.

Ahora era su camiseta favorita.

Por supuesto, Minseok – que le tocó Kyungsoo – quiso regalarle algo a Jongdae, aunque no tenía ni idea de que. Estuvo pensando mucho tiempo, y le propuso darle lo que le quedaba de dinero para poder pagarse un tatuaje, Jongdae no pudo estar más feliz con ello.

Pero la cuestión era, donde pasaría las navidades Minseok, si con Luhan o con Jongdae. Minseok quería pasarlas con Jongdae, claro que sí, era su novio y lo amaba muchísimo, pero internamente tenía miedo de traerle problemas con su padre, porque sabía por él que desde que sabía que tenía novio, la relación entre ellos dos era cada vez peor.

No quería empeorarla.

Por eso se resistía, pero al final, después de tanto insistir por parte de Jongdae y del propio Luhan, incluso su hermana – a quien le contó todo – terminó aceptando el veinticuatro de diciembre por la mañana y Jongdae avisó rápidamente a su madre, quien corriendo compró comida de más para la cena de navidad, preocupada por si no llegaba. Ella quería conocer a la persona que hacía feliz a su hijo. Su padre, por otro lado, le montó otra pelea a la cual Jongdae no retrocedió y al final, quisiera o no su padre, Minseok iba a pasar todas las navidades en su casa, durmiendo en su habitación.

Minseok llegó a casa de Jongdae cerca de la noche, cuando algunos familiares de su novio ya estaban en casa reunidos. Jongdae le dio la bienvenida con un largo beso y se llevó la chaqueta de Minseok a su habitación, así como las pertenencias de este para varios días. Minseok saludó educadamente a la madre de Jongdae, y aunque ella pareció un poco asustada por el aspecto de Minseok, no lo dijo. Al menos parecía ser amable.

Saludó a la tía materna de Jongdae y su pareja, igual que al primo de su novio que resultó ser nada más y nada menos que Junmyeon, conocido en corea por ser el sucesor de Soo Man para manejar la famosa empresa de entretenimiento SM Entertainment.

Qué pequeño era el mundo.

Cuando llegó el turno de saludar al padre de Jongdae, el ambiente se volvió tenso. El padre ni le miró a la cara y Minseok, orgulloso como nadie, decidió hacer lo mismo, como si no existiera – Jongdae le dio permiso y ciertas libertades respecto su homófobo padre –. Jongdae, intentado dejar de lado ese ambiente, dijo que mientras no les necesitaran irían a la habitación, Junmyeon les siguió, queriendo conocer más al novio de su primo.

-Bueno, así que este es el famoso Minseok –Dijo Junmyeon –He de decir, me sorprendiste con tu aspecto, es impresionante.

-Supongo que llama la atención.