-Ele, podrías ordenar mientras voy a la sucursal de al lado a recargar mi crédito, necesito llamar a mamá y decirle que me quedare a dormir hoy en tu casa.-Sin esperar respuesta, Salí de McDonald, camine al estacionamiento de este.
Estaba apoyado en su auto, este estaba estacionado al final del aparcamiento, pude notar su ceño fruncido, esta molesto.
Cuando llegue a el, comenzó a hablar.
-Sube al auto.-Demando seco.
-No puedo, E-Eleanor esta adentro, D-debo volver.-Mi garganta estaba seca.
-¡ME IMPORTA UNA JODIDA MIERDA, SUBETE!.-Me tomo bruscamente por el codo derecho.
Me solté de su agarre y le plante una hermosa bofetada por impulso.
-¡DEJAME EN PAZ, ALEJATE DE MI MALDITA SEA!.-Lo empuje con todas las fuerzas acumuladas, claro que este solo se movió dos centímetros.
Se acerco a mí rápidamente, propinándome una bofetada.
Caí al suelo por el golpe, me acaba de golpear, las lágrimas brotaban a cascadas por mis mejillas, un fuerte brazo me puso de pie, me abrazo fuerte y pego mi cara a su pecho, mientras daba miles de besos rápidos en mi cabeza, yo no podía dejar de llorar.
-Perdóname mi amor, perdóname, ¿ves lo que me haces hacer?, yo no quería, te amo demasiado, perdóname amor, te lo suplico.-Rogaba en mi cabello.
Me separe de el solo unos centímetros, cuando deje de tocar su piel, me atrajo a el de nuevo.
-No puedo dejarte ir, no quiero hacerlo, eres mi aire, te necesito para vivir, eres mía, maldita sea, solo mía, entiende eso.-Me apretó contra el.
-Déjame por favor, necesito volver dentro.-Pedí llorosa.
-Pasare por ti hoy en la noche a las 8 a tu casa.-Levanto mi rostro y devoro mis labios, no era un beso pervertido, este beso sabia mas a una disculpa, movía su boca suavemente sobre la mía.
Se separo de mi, fue entonces que me di cuenta de que tenia los ojos cerrados, ambos respirábamos agitados, el se acerco y planto un escaso beso en mis labios de nuevo y me abrazo.
-Te llevare a cenar, ponte hermosa, ve a tu casa después de lo de Eleanor, y ponte un vestido, uno hermoso para mi, solo para mi.-Dijo con voz ronca, me miraba fijamente.
Se alejo de mí y subió a su auto dejándome parada en el estacionamiento.
Camine de regreso con Eleanor, ya tenia nuestra comida servida, me sonrió y me senté frente a ella.
-¿Que te dijo tu mamá?.-Metió una papa frita a su boca.
-Dice que no podre quedarme, necesita que cuide a Nathan esta tarde, lo siento Eleanor, deberías ir a ver a Perrie.-Me sentí culpable, jamás había mentido a mi mejor amiga.
-Tienes razón, iré a cuidarla hoy.-Me sonrió y comenzamos a comer.
Después de comer, Eleanor me dejo en casa a las 6, Harry pasaría por mí a las 8.
Camine a la cocina, mamá y Nathan estaban comiendo galletas.
-Hija, saliste temprano hoy.-Me dio un beso en la mejilla.
Salude con un beso en la frente a Nathan y tome una galleta.
-Si, hoy Niall terminara mi turno, es nuevo en el trabajo.-Le dije.-Mamá podría, salir hoy, iré a cenar, con... Eleanor y unas amigas.-No quería decirle a mi madre que saldría con un chico, ella va a querer que lo invite a cenar y eso no sucederá de ninguna manera.
-Claro que si hija, no deberías si quiera pedir permiso, no puedo negarte nada, eres tu quien mantiene esta casa.-Me sonrió tristemente.
-Te amo mamá.-Bese su frente y corrí a las escaleras.-Iré a ducharme.
Mire el reloj de mi pared, eran las 6:45 pm, tenia 1 hora y 15 minutos .Fui a mi armario y busque algo que me pudiera poner esta noche, el dijo un vestido y no quiero hacerlo enfadar de nuevo, su mano aun esta marcada en mi cara.