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Jungkook se encontraba peleando a garras y dientes contra el alfa de leopardos de la nieve; Chanyeol.
Pero no se preocupen, pues es solo una prueba para medir su fuerza y resistencia a la hora de la batalla. Después de todo en estas batallas los tipos de animales de mismas especies (en este caso felinos) se juntan para pelear contra una contraria. (Tal vez, caninos) Aunque muy raramente esto pasaba, pues cualquier inconformidad había quedado en el pasado, pero el saber defenderse ante cualquier cosa era necesario siempre
Muchos de los aldeanos se encontraban admirando a su increíble alfa, aunque uno que otro se encontraba babeando por el alfa contrario.
Aquí incluimos al pequeño Taehyung, quien se encontraba sentado en el piso admirando la pelea de su padre y el alfa de sus sueños.
Su cabeza estaba ladeada y sus manitos jugaban entre ellas por los nervios de no saber a quien irle.
Pero de un momento a otro el alfa Jungkook volteo a verle. Haciendo contacto visual con el, logrando que sus mejillas explotaran en un rojo intenso.
Así distrayendo al alfa, haciéndole perder.
Derrotado, Jungkook cambio a su forma humana igual que Chanyeol, ahora la desnudez ya no era un problema a la hora de las transformación, pues ya existían prendas especiales para cubrirse a la hora de ella.
—Vaya Jeon, pensé que me ganarías ¿qué paso?— Al contrario de sonar presumido o creído, Chanyeol sonaba preocupado a la hora de hacer su pregunta.
Los ojos azules de Jungkook lo vieron. Su hijo me pasa. Quiso responder, pero obviamente no lo hizo.
—No pasa nada Yeol, solo me distraje.
Chanyeol no muy convencido asintió con la cabeza.
—Vamos a mi casa a cenar, después de todo nuestras pruebas ya acabaron— Sugirió el alfa, encaminándose a su hijo acompañado de Jeon.
—Está bien— Aceptó, después de todo estaría más tiempo junto a esa hermosura que era el hijo omega menor de Chanyeol.
Al llegar al distraído Taehyung quien se encontraba aún en el suelo sin notar ambas presencias, fue sacando de sus pensamientos cuando su padre Chanyeol lo tomó por debajo de sus brazos para alzarlo.
Más lo que logró fue, que el pequeño Omega se asustara soltando un gritito, llamando la atención de algunos presentes.
—Tranquilo hijo soy yo— Dijo entre risas su padre.
—¡P-padre me asustó!— Respondió el pequeño con las mejillas sonrojadas, al ver atrás de su padre a su "crush" quien lo veía fijamente sin ninguna expresión en su cara.
—Oh mi bebé— Dijo con voz chillona y divertida— Es hora de irnos, El joven Jungkook vendrá a cenar a casa con nosotros.
Taehyung emocionado asintió tímidamente con la cabeza, tomando la mano de su padre para empezar a caminar.
