Capítulo 18| Final

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Estaba enfadada. No pensaba en otra cosa que no fuera las palabras de mis padres.

Hace rato había escuchado la puerta de entrada abrirse y cerrarse, por lo que supuse que Daniela se había ido. Y tal vez era lo mejor.

Estuve varias horas despierta durante la madrugada, pensando en que hacer, iba a decepcionar a mis padres, todo por un enamoramiento.

¿Era lo correcto?

No lo sabía, solo sabía que si nunca lo intentaba, nunca podría saberlo.

Empaque algunas de mis cosas en una maleta mediana, no eran muchas las cosas que había decido llevar. Entre las cosas, siempre iba a llevar dos viejas fotos; Una de mi familia conmigo, todos sonriendo y abrazados. La otra, una de Ginger junto a mi, también abrazadas.

Moría por tenerla de vuelta. Pero no podía hacer nada.

Estuve toda la madrugada armando la maleta, hasta que dió la hora de irse. Mis padres estaban enfadados conmigo, tanto, que cuando quise despedirme antes de irme a las cuatro de la madrugada, se dieron la vuelta dejándome sola, ni siquiera les importó que fuera la última vez que nos íbamos a ver. Papá había murmurado algo antes de abandonar la habitación, lo recuerdo perfectamente.

Nos decepcionaste.

No voy a mentir, eso dolió.

[...]

-Gracias, y buen viaje-Agradeció la persona encargada de verificar los documentos antes de abordar.

Le agradecí, tomé mis papeles y los guardé en la pequeña mochila que llevaba conmigo, luego, pasé la cinta de seguridad dispuesta a subir al avión. Cuando iba en el pasillo, un grito me detuvo

-¡Brooke!

Me di la vuelta confundida, Daniela venía corriendo en mi dirección, un guardia de seguridad la detuvó, ella solo me gritaba que parase, le hice caso y me acerqué lentamente a ella, dejó de pelear con el guardia y se quedó quieta.

-¿Qué haces aquí?

-Brooke, necesito que sepas, que yo nunca te juzgué, si quieres irte vete, pero te sigo necesitando en mi vida.-Hablo con rapidez hasta quedarse sin aire, le tomó unos segundos recuperarse, y continuó- Eres mi mejor amiga, y siempre voy a hacer lo que sea para hacerte feliz.

Con lágrimas en mi ojos, la abracé con fuerza, tranmitiendonos todo lo que sentíamos una por la otra.

-Eres la mejor-Murmuré en su oído.

[...]

Llegue al aeropuerto, era todo ordinario, como normalmente lo era. Había mucha gente, me quedé en el lugar quieta por al menos veinte minutos, viendo a la gente reencontrarse con sus amigos, familias o gente simplemente yéndose por una mejor vida. Nunca iba a saberlo.

-¡Bu!-Me dijeron en el oído.

Di un salto en mi lugar del susto, me di la vuelta rápidamente con una sonrisa encontrándome con la preciosa sonrisa de Shawn. Estaba reluciente; Traía una camisa azul, unos pantalones negros, sus característicos "Zapatos", y en sus manos, tenía una rosa.

Sin perder más tiempo, salté a sus brazos y lo abracé con fuerza, contenta de tenerlo conmigo una vez más. El me abrazó y me levantó, me dio unas cuantas vueltas en el aire mientras reíamos.

Cuanto lo amaba.

-Te extrañe-Confesó con una pequeña sonrisa en su rostro.

-Yo igual.

En el camino a su departamento, nos la habíamos pasado hablando de diversos temas, con suerte, Shawn no tocó ese tema.

Aún dolía.

Mis padres ni siquiera me habían llamado, o mandado un mensaje, ellos eran importantes para mí, y ahora comenzaba a creer que yo no lo era para ellos.

No me había dado cuenta de que estaba llorando, no hasta que Shawn apagó el auto porque habíamos llegado y yo no me había movido de mi sitio.

-Hey, cariño-Shawn llamó mi atención, con su mano quitó las lágrimas que se habían escapado de mis ojos-¿Qué sucede?

Negué con la cabeza levemente, quitándole importancia, él, de todos no dejó de insistir, y terminé contándole mis problemas.

-No quiero fastidiarte...-Insistí tratando de no dar con el tema

-Nunca, nada que provenga de tí, será un fastidio para mí.

Mi corazón dio un vuelco.

-Bueno...-Suspiré y miré mis pies-Lo que sucedió es que me duele mucho que a mis padres no le interese, es decir, no me dirigieron la palabra y me dolió mucho que ni pude despedirme, porque ellos no quisieron verme la cara-Terminé de explicar con la voz rota, aguantandome para no seguir llorando.

Él me escuchó atentamente.

-Cariño -Tomó mi mano y la acarició durante cortos segundos de tiempo, lo miré -Tus padres deben de estar decepcionados contigo, porque tal vez esto no era lo que ellos esperaban, pero te aman, cariño, nunca dudes de cuanto ellos te aman, les tomará tiempo entenderlo, pero siempre volverán a estar juntos.

Estaba feliz, porque esta es nuestra mejor etapa de mi vida, y la voy a vivir con la persona que más quiero en el mundo.

Querida Ginger: Gracias por todo

Latina |S.MDonde viven las historias. Descúbrelo ahora