Siempre fuiste tú Juliantina

35

-Estoy pensando
-¿En qué piensas Chiquita?- preguntó Valentina mientras Juliana acariciaba su mejilla
-Pienso en que la vida se volvió bella desde que estás a mi lado... que bonito es despertar cada día para escuchar tu voz

-¿De verdad?- preguntó Valentina sonriendo

-De verdad amor

-Quiero despertar cada día de mi vida a tu lado

-¿Hasta que seamos viejitas?- preguntó Juliana

-Sí, hasta que seamos viejitas

-¿Donde firmo?

-Lo hiciste hace mucho tiempo- respondió Valentina sonriendo

-Muy buena tu respuesta

-Pensé que te irías temprano

-Quería verte dormir

-Quieres decir que ya se te hizo tarde

-Un poco, pero en realidad ya estoy lista

-¿Quieres que te pase a dejar?

-No amor, mejor me llevo mi camioneta, así puedo ir a verte luego

-Esta bien

-Te veré más tarde morrita, el desayuno ya está listo, te lo dejé en la cocina amor

-Gracias

.
-Hola Vale

-Hey Lucía, ¿se te ofrece algo?

-Quería preguntarte ¿qué quieres que llevemos para mañana?

-Nada, según Juliana ya compró todo

-¿Segura?

-Claro, si falta algo la culparé totalmente- dijo Valentina encogiéndose de hombros

-¿Algún vino? ¿Cuál es tu favorito?

-Lleva el que quieras, yo no tomaré- dijo Valentina

-¿Por qué? Si antes...

-Lucía...

-Lo siento, no era mi intención

-Esta bien, no te preocupes, no he probado una gota de alcohol desde hace 3 meses

-Eso está muy bien

-Supongo que si... cambiando de tema, ¿a qué hora llegarán?

-¿Como a las 2 está bien?

-Si, está perfecto

-A todo esto ¿Qué harán de comer?

-Muy buena pregunta, supongo que un montón de hamburguesas, puedo jurar que vi la carne en el refrigerador en la mañana

-Eva se va a morir... y tú también- dijo Lucía riendo

-No te preocupes también vi verduras, algo bueno sacaremos de ahí

-Pues a mi si me gustan, lograré que Eva también coma

-Las tolero pero no puedo decir que sea mi elección para comer

-Tu perdida... Bueno te veré mañana, nos iremos temprano hoy, Eva y yo iremos al cine

-Se les descontará del sueldo- dijo Valentina riendo

-Muy graciosa, deberías venir con Juliana

-No gracias, demasiada gente, prefiero la sala de cine en mi casa

-Sí bueno, ahí no creo que veas precisamente una película- dijo Lucía riendo

-Adiós Lucía, saludos a mi hermana