Me quedé unos segundos pensando si decirle mi nombre, ya que ¿Y si era un violador o un psicópata? Seguí meditando en mi mente sobre el asunto.
-Hey, supongo que eres insegura sobre decirme tu nombre o no. No importa, te diré la chica de la botella.
No me molestaba que me dijera así, ya que no lo volveré a ver, es decir ¿Que tan pequeño es el mundo?
-Bien, dejaré que me llames así- Empezamos a caminar.
-Así que, chica de la botella ¿De dónde eres?
-Soy latina.
-No pareces, es decir, tu tonalidad no aparenta a que eres latina.
Miré por un momento la piel de mis brazos desnudos y fue cuando me percaté del hecho de que era tres tonalidades más pálidas desde mi última visita a la playa.
-Bueno no todas las latinas son tonalidades oscuras, ya que somos de gran variedad ¿Nos imaginas a caso a todas como negras carbón?
Soltó una carcajada. -Pues la verdad así no, pero si las imaginaba con piel morena.
-En la mayoría son morenas, pero también hay chicas de tez blanca.
Seguimos hablando de anécdotas, algunas sin sentido y otras sin importancia, hasta que me di cuenta de que ya nos encontrábamos en el supermercado más cercano.
-¿Que hacemos aquí?- Cuestioné al girarme y darle la vista y mi completa atención.
-Vinimos porque te voy a comprar un agua, ¿recuerdas que me la tomé toda?
-Cierto, tienes un pozo en tu boca.
Soltó una carcajada, era una tierna que era agradable al oído.
-Si, bueno. Vamos al pasillo de las bebidas- Dice y yo lo sigo.
Ya allí me quedé parada procesando que bebida escojer, ya que, Dios era toda una estantería de distintos tipos de aguas. En Venezuela era el agua minalba y de vaina.
-Escoje- Me dice haciendo un gesto de que tomara alguna botella.
Tomé la primera que ví, era una botella mediana con agua transparente y tenía el título con letras verdes mostrando el nombre de la marca Fresh.
-Esta, elijo esta- La mostré y el asintió.
Mientras hacíamos retorno a la caja para pagar mi agua un grupo de chicas se nos acercaron. Murmuraban y sonreían como una bobas, dirigí mi vista hacia el punto de visión de ellas y parecían estar embelesadas con el chico a mi lado.
-¿Nos podemos tomar una foto juntos?- Le pregunta una de las chicas.
Shawn asiente y se les acerca haciendo que estas salten de alegría. Luego de unos minutos de fotos con el grupo de chicas Shawn vuelve su vista hacia mi.
-¿Que fue todo eso?- Pregunté volviendo nuestro camino hacia la caja.
-Son unas fans, nada más.
-¿Fans?
-Hago algunos covers, es todo.
Simplemente asentí, no me importaba saber.
-Okey, vamos para que pagues mi agua y nos podamos ir. Debo hacer muchas cosas hoy.
-Veo que eres una chica ocupada.-Llegamos a la caja y el sacó un dólar de su billetera, pagando así mi dichosa agua.
-Todas las chicas son ocupadas, créeme nunca dejamos de hacer algo.- Agarré mi botella y salí del supermercado con Shawn detrás.
-Bueno ya me diste mi agua, ya te tomaste fotos con tus fans y ya sé tú nombre, así que ya me iré. Adiós Chon.- Dije alejándome.
-Es Shawn, chica de la botella.- Dijo casi en un grito.
-Lo sé.- Dije ya al estar lo suficientemente lejos de él.
Al cabo de unos minutos de caminata llegué al parque donde había estado ejercitándome anteriormente. Desde ese punto recordé mi recorrido a casa de mis tíos.
Tomé mi teléfono, conecté mis audífonos y comencé a escuchar cualquier canción que el reproductor me brindara. Luego comencé a caminar hasta donde me hospedaba temporalmente.
Al llegar toqué la puerta no hubo respuesta. Me giré hacia el marco de la misma y en la esquina de abajo comencé a dar pequeños golpes hasta que salió la llave de repuesto. Entré a la casa y todo seguía como lo había dejado, al parecer nadie se había despertado.
Dejé mi celular en el mesón junto con mis audífonos, luego subí las escaleras llegando a mi habitación donde me adentré para buscar prendas de ropa y poder darme una ducha.
Luego de teber mi vestimenta afuera la cual consistía en algo simple, como una camiseta y unos shorts negros, busqué mi toalla para poder ir al baño y darme mi ducha.
Lavé mi cabello, espalda, rostro además de mis piernas, cuello y mis partes sensibles.
Salí de la ducha con una toalla cubriendo mi torso junto con mis piernas y otra en mi cabello.
Me vestí rápidamente colocándome mi ropa interior y top deportivo para estar más cómoda, y la ropa que había sacado anteriormente.
Bajé las escaleras mientras desenredaba mi cabello con uno de los peines que había tomado antes de salir de mi habitación.
Llegando a la cocina pasé por la nevera buscando algo para hacerme de desayuno, no quería abusar así que tomé únicamente algo de frutas para hacerme una ensalada y desayunar con eso.
Al haber ido a hacer ejercicio, hablar con el Chon, llegar, bañarme y hacer mi "desayuno" se me hicieron las ocho treinta de la mañana.
Me senté a comer mi ensalada de frutas y posterior a eso tomé mi celular para poder ver algunas de las notificaciones.
Entre ellas eran de que Instagram, Twitter o algún que otro mensaje. Ingresé en Whatsapp para poder leer los mensajes que me habían enviado, entre ellos salía el chat de Alejandro el cual no estaba segura si abrir hasta que lo hice.
Me había enviado un mensaje disculpándose por haberme despedido que no quería que las cosas terminaran así. Lo entendía, solo que no estaba preparada para responderle.
Un último mensaje llegó de ese chat, el cual decía que no lo olvidará y que siempre seré parte importante en su vida.Eso bastó para que mis ojos se llenaran de lágrimas haciendo que bloquera mi celular y recordara esos hermosos momentos juntos...
««««««»»»»»»
Basado en lo que las acabo de decir, quién piensan que es Alejandro?
Lamento no haber actualizado, les digo enserio que borré este cap dos veces :')
Al menos lo logré terminar.Comenten las palabras que no entienden y se las explico :)
Los errores ortográficos serán editados luego.
-NcJjCsSm
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She [SM]
Fanfiction«Eres perfectamente dañina para mi» Una venezolana que sale del país con esperanzas de tener un mejor futuro y vida se encuentra con Shawn, un chico que ama hacer Vines e intenta tener una carrera en Redes sociales. «No tienes idea de lo que me duel...