Placer Vacío - Meanie

Décimo noveno capítulo

Mina fue recibida por los abrumantes flashes de los paparazzis y los golpeteos a su carro propinados por la enardecida fanaticada. La semana de la moda en Paris era una tradición ya marcada en su calendario anual.
Este año no solo asistía como invitada, sino que también colaboraría con diseñadores que utilizarían sus joyas para ser exhibidas en la pasarela. El carro se detuvo y volteo para mirar a Wonwoo quien parecía muy calmado ante la situación. Era de esperarse que su manera de ser fuera calmada y calculadora. Él la miro desde el rabillo de su ojo y ella parpadeo los ojos mientras bajaba la mirada. Wonwoo carraspeo para obtener su atención y ella dirigió sus ojos a él mirándolo atentamente.

-Es hora de salir- Yo estaré detrás de las filas de asientos para vigilarle- Wonwoo se acercó a ella para desabrocharle el cinturón sin una razón aparente o razonable. Solo porque le nació ser amable.

-Cuando el evento haya terminado, no olvides venir a buscarme- Mina susurro las indicaciones hasta que ya no fuesen audibles. Por una extraña razón, no sintió asco ni desprecio en el momento en el que Wonwoo decidió acercársele. No estaba muy segura si era porque sus traumas estaban ya disipándose o porque él era menor y no le parecía amenazante.

Wonwoo asintió acomodándose el saco y saliendo del carro para poder tenderle la mano y ella pudiese salir del vehículo. Mina pensó que era muy educado como para ser un criminal de tiempo completo. Mataba personas sin miedo evidente, pero también salvaba vidas como nunca antes.
Tomo su mano sin pensarlo demasiado y se estabilizo en sus tacones preparándose mentalmente para sonreír y deleitar a las cámaras para las que ella posaba. La distancia hacia su asiento fue completada y ella lo ocupo mirando atentamente a las modelos que se desplazaban una a una con las colecciones de sus joyas especialmente diseñadas para esa pasarela.

Fascinada por el brillo de las joyas irradiando sobre la piel de los modelos que se desplazaban en la pasarela poso sus ojos en las reacciones de los espectadores de la pasarela.
Las personas anotaban, señalaban y ajustaban sus lentes de diseñador admirados por los diseños. Mina se sintió alagada porque su trabajo estaba pagando lo que había costado. Largas horas de trabajo sin sueño y un ambiente algo insano, la habían dejado al borde de los huesos, pero ahora se enorgullecía de todos los buenos resultados.

El evento había terminado y todo parecía ser bastante satisfactorio para todos los invitados. Mina se detuvo y hablo con los dueños de las marcas con las que había colaborado.

-El desfile de modas fue un éxito gracias a su colaboración -El ultimo diseñador con el que había colaborado se acercó a ella y le entrego una copa para que los dos brindaran. Ella la tomo alagada y la acerco a sus labios para darle un pequeño trago.

Wonwoo le retiro ágilmente la copa de las manos y dirigió sus ojos al inversionista que le había brindado la copa a Mina, mirándolo con una ceja encarnada y aires de superioridad, esperando que el inversionista se creyese su fiasco.

-Lamento interrumpir su conversación señor- Wonwoo lo señalo con la copa preguntando su apellido

-Cardigan- Respondió es sujeto con voz seca esperando no ser expuesto ante los invitados.

-Cardigan, pero Mina tiene algunos asuntos que tiene que resolver en este mismo momento así que si nos disculpa ella tiene que retirarse- Wonwoo apretó sus manos sobre la copa fuertemente mientras mantenía un intenso contacto visual con el inversionista impertinente.

Mina balbuceo intentando decir algo decente, pero opto por asentir levemente mientras miraba a Wonwoo. Se dejó llevar por el chico y se alejaron del lugar llegando hasta los estacionamientos techados.

-Hey ¿Que ha sido todo eso? ¿Por qué sigues conservando ese trago? - Pregunto Mina volteándose para ponerse frente al más alto y tomarlo del brazo para que parara de caminar.

-Ves las partículas en el fondo de la copa luchando por disolverse entre las burbujas del trago- Wonwoo levanto la copa haciendo que a esta la atravesasen la iluminación de las estrellas en lo más alto.

-Ya lo veo- Mina se puso de puntillas y diviso las partículas disolviéndose con desgane– ¿Cómo lo supiste? -Pregunto Mina apretando sus labios de la incomodidad.

-Lo vi todo, incluso vi cuando vertió la droga en tu trago- Wonwoo bajo la copa y miro a Mina preocupado.

- ¿No lo vas a desechar? -Pregunto Mina mirando las sombras que la media noche reflejaba en la cara del más joven.

-No, esto necesita ser analizado- Wonwoo saco una bolsa plástica de su saco y vertió el contenido del trago -Vayámonos de aquí si no quieres salir en los anuncios de Dispatch a mi lado.

-Si claro- Mina rodo los ojos y abordo su carro.

El viaje hacia el hotel fue corto pero calmado aparcando en los estacionamientos y siendo en ambas de sus habitaciones registrados.

-Estaré en la habitación de alado, no dude en llamar si es que necesita algo- Wonwoo espero a que ella asintiese y entrara a su respectiva habitación.

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Mina abrió sus ojos, pero su cuerpo permanecía inmovilizado, las pesadillas habituales de cada noche parecían hacerse presentes cada día más. Forcejeo constantemente mientras permanecía acostada en la cama tratando de permanecer dormida. Sus pesadillas eran frustrantes y a la hora de conciliar el sueño siempre terminaba perdiéndolo a causa de los horribles episodios de parálisis del sueño.

Mina estaba siendo acorralada por sus verdugos. Las oleadas de oscuridad la rodeaban intentando ahogarla. Se llevó las manos al cuello y sintió punzadas en el estómago. Respiro entrecortadamente y grito lo más fuerte que podía haciendo que los demonios se espumaran.

Wonwoo escuchó los gritos atreves de las paredes y corrió hacia el cuarto de Mina tocando la puerta sintiéndose desesperado. Golpeo con todas sus fuerzas después de haber ocupado el timbre sin recibir la respuesta que había buscado.

- ¡Mina! -Wonwoo grito angustiado.

Esta abrió la puerta y se lanzó a sus brazos rompiendo en un desgarrador llanto. Estampo sus manos en la espalda descubierta de Wonwoo sin importarle las formalidades, estaba destrozada por dentro y sentía que no valía nada. Él le abrazo de vuelta lentamente alojando sus manos en el cabello de Mina desplazando sus manos haciendo círculos en su espalda esperando calmarla.

Wonwoo sintió sus pies flaquear y ambos se terminaron arrodillados en el piso de la entrada del cuarto sin mover ni un musculo, sin pensar en absolutamente nada, solo respirar y dejar las lágrimas caer como si estas no valiesen nada.

Mina durmió sobre el pecho de su guardaespaldas esa noche conciliando el sueño sin recibir ningún reproche de parte del menor aquella noche. La calidez de su pecho termino evaporando las lágrimas que había derramado en la aquella noche. Se sentía segura, calmada y agradable entre sus brazos.

Wonwoo acaricio su cabello hasta que ella conciliase el sueño y noto una línea de lunares en su cuello, los repaso uno a uno sin miedo a ser descubierto e ignorando la cercanía que tenían ambos. Recordó los lunares que Mina del orfanato portaba en su cuello y eran parecidos por no decir idénticos. Se prometió preguntarle si talvez, de casualidad serian familiares, aunque no sería muy fiable estaba dispuesto a investigar más tarde.

Disculpen los errores. 

Son muy tontos.