Septimo capítulo

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No paso mucho tiempo para que Wonwoo volviese a la rutina habitual de ser tentado por el dinero fácil. Al unirse a una banda que se dedicaba a robar por todo Corea del Sur. A los miembros de la banda les pareció que les vendría bien algo de sangre joven en el equipo.
Wonwoo era un buen peleador, pero le basto solo un par de meses para darse cuenta que tenía una excelente puntería. Se interesó más por aprender sobre armas y su puntería, limpieza y discreción se hizo eco en el mundo de los negocios ilícitos.
Un tirador preciso se terminó convirtiendo en sicario y la banda para la que él trabajaba termino por desintegrarse. Trabajar solo era menos emocionante, mas automático y sin sentimientos. Pero ya estaba acostumbrado a sentirse solo.

Joshua, Minghao y Jeonghan eran miembros experimentados que pertenecían a la antigua banda para la que trabajaba Wonwoo.
Esos tres hermanos pagaban sus estudios universitarios con lo que robaban.
Parecía un precio justo para tres hijos de padres alcohólicos, pero era más que solo eso. Su padre los obligo a robar desde que eran niños y no vieron otra alternativa que seguir las enseñanzas de sus padres.
Una vez recolectado lo suficiente huyeron de Corea escapando de sus padres hacia un mejor porvenir dando la banda por desintegrada y su vida de robos acabada.

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En un bar en lo más profundo de Garosu-Gil Wonwoo recibe una llamada muy habitual en estos cinco meses y no, no es para matar a alguien sino para que el termine muriendo un poco más.

- ¿Qué quieres de mí? –Pregunto Wonwoo algo adormilado por el par de copas que había tomado ya hace unas horas.

-Ven a el Hotel Castle a las 3:00 am que no te siga nadie- Y es de esperarse que Wonwoo se pusiese en completa marcha cuando su amor enfermizo le había solicitado.

-Haz llegado -Esa frase se fue como un hilo que se escapa ligeramente de una aguja mientras se desmoronaba en mis brazos y besaba la comisura de los labios del menor. Wonwoo movió su cara para corresponder apropiadamente al beso de Mingyu el cual reacciono jalando la corbata de Wonwoo hasta restringir su respiración.

-No te llame por eso- Sonríe Mingyu de manera maliciosa mientras reacomoda la corbata de Wonwoo con los más grandes e inocentes ojos.

-Si no estoy aquí para complacerte como siempre entonces para que me citaste- Wonwoo rodo sus ojos mientras se dejaba caer en uno de los sillones de la habitación de hotel.

-Tengo un negocio para ti - Dice Mingyu mientras se acuesta en la cama de manera subjetiva atrayendo una mirada curiosa de parte del menor.

-Deja de mirarme así se supone que tú eres la presa- Wonwoo se acercó a Mingyu hasta quedar de alguna forma a horcajadas para así tener más acceso a sus preciosas facciones.

-Tu dime - Wonwoo levanto una de sus cejas en acción interrogatorio bajo hasta el cuello del mayor y soplo lentamente sobre el cuello del mayor.

-Alguien te quiere como su guardaespaldas, matón personal... delincuente de clase alta. – La sensación de aire caliente sobre el cuello de Mingyu le hacía perder la capacidad de formular una oración completa.

-Estoy muy interesado en lo que me estás diciendo- Wonwoo habla sobre su cuello al mismo tiempo en que se apretaba más contra el cuerpo de Mingyu y pasa su dedo índice por la manzana de Adan del mayor mientras mira su expresión sonrojada. Se veía hermoso y adorable como cuando era un niño.

- ¿Que me miras tanto? La tarjeta está en la mesita de noche- Dice Mingyu con una sonrisa de oreja a oreja.

-Te miro todos los días, no me canso de hacerlo- Wonwoo toma la tarjeta y le da un beso en el cuello al mayor haciendo que este rozara la punta de su nariz por su mandíbula mientras reía.

-Lárgate Romeo- Mingyu le lanzo una almohada y Wonwoo la esquivo enviándole un ruidoso beso a Mingyu antes de salir de la habitación.

Disculpen los errores.
Ay me encantan demasiado!!!

Placer Vacío - MeanieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora