#17. Midoriya Izuku

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AU Villano

Las calles estaban como siempre. Llenas, con gente ajetreada de un lado para otro...
Parecía algo normal.
Lo que mucha gente no sabe cuando sale de casa y va a la ciudad a hacer sus recados, es que puede haber cualquier cosa en las calles que pase desapercibida.
Un niño jugando...
Unos ancianos paseando...
Un chico encapuchado...
¿En pleno verano?
Ese es sospechoso.
Si lo seguimos, quizás encontremos algo que...
¡Ay no! Era un señor corriente... Que entraba en una tienda de friki.
Uy, ¿qué compra?
¿Una almohada de una waifu...?
Bueno...
Cada uno hace lo que quiere con su dinero...
Hmm...
Bueno, ¿y qué hay de ese callejón?
Normalmente la gente no se mete por ahí...
Perfectos para que la gente con mala reputación se esconda.
Un chico pelinegro se mete en él y anda disimuladamente hasta un par de edificios abandonados, por un camino estrecho en el que apenas se mete la luz del sol.
Baja por unas escaleras de metal oxidadas y sucias, y se mete por un pasillo lleno de musgo y con olor a cloaca y humedad.
Vuelve a bajar por otras escaleras iguales que las anteriores, puede que incluso peor, y entra por una puerta de hierro, también oxidada.
-Buenas...
-Dabi. -dice un peliazul.- ¿Has hecho lo que te he mandado?
-Claro. Me he divertido bastante la verdad. El niño suplicaba. Aunque lo he dejado para el final. -sonríe, sentándose en una especie de barra de bar. Sale un señor como una especie de portal y le atiende.- Kurogiri, lo de siempre.
-Claro, señor Dabi.
Sale una rubia con moños y con mirada psicópata y mejillas sonrojada de otra puerta y mira a la esquina, con una gran sonrisa.
Estaba un peliverde pecoso, serio, con su móvil en la mano. Parecía distraído. Iba vestido con una especie de traje extraño, una camisa blanca, un chaleco de traje negro, unos pantalones negros, unas deportivas rojas, y una corbata negra.
Parecía tener la edad suficiente para ir a la preparatoria, pero hasta ahora era desconocida.
-¡Izuku-kun! -la rubia se tira encima de él y lo abraza, y el chico, mirándola de forma asqueada, la aparta.
-Te dije que dejaras esas muestras de cariño, Toga. No las quiero.
-¡Pero Izuku-kun...!
-El chico está enamorado, solo las quiere de su amorcito... -ríe Dabi, sentado contra la pared y bebiendo algo de alcohol.
Un cuchillo se clava en la pared, a milímetros de la cara del pelinegro, y cuando se quiere dar cuenta, tiene a Izuku en frente.
-Cuidado con lo que dices. Yo no me meto con los problemas de tu papaíto, ¿verdad que no?
Dabi frunce el ceño y se levanta.
-Solo quiero un mínimo de respeto de compañeros, vamos... -sonríe, malévola mente el pecoso.- Sí. Estoy irremediablemente enamorado, pero, no te metas conmigo. Ojo por ojo...
-... Y todos ciegos, Midoriya-san. -le habla Kurogiri.- en vez de hacerle pagar a Dabi por su maleducación, pase de él y ya está.
-Hm. También es verdad.
Recupera su cuchillo, y vuelve a su asiento.
Mira su móvil y entra en la galería, donde había cientos y cientos de fotos de la misma chica, pero quitadas sin que ella se diera cuenta, desde lejos.
El peliverde, Midoriya, se puso colorado y sonrió, de forma enamorada y algo psicópata.
-Mi amor... Solo espera un poco más...
-Midoriya. -llamó el peliazul, Shigaraki.
-¿Hm?
-El ataque será hoy. Has cumplido con tu parte, si logras cumplir con lo de hoy... Podrás llevar a cabo tu plan. Siempre y cuando siempre vengas a cumplir con alguna misión...
-¡Oh, claro! -sonrió abiertamente.- Si no, ¿de donde saco el dinero? Tengo que ir a trabajar.
Shigaraki le revuelve el pelo con cuatro dedos, y lo aleja.
-Bien. Vayamos pues.

.

.

.

Horas después...

-Dios mío... ¡DIOS MÍO!
(T/N) corría junto con Kirishima y Bakugou, escapando del nuevo ataque de villanos que se ha producido en la UA.
¿Cómo ha podido ser...?
-¡Tranquilízate idiota, no necesitamos que entres pánico!
-¡Es que...! N-no entiendo nada... ¿¡Cómo!?
-Eso me pregunto yo... -dice Kirishima, realmente preocupado.- Por lo pronto será protegernos hasta que el ataque cese y conseguir pedir ayuda... Luego ayudaremos a luchar... ¿De acuerdo, chicos?
-Sí. -asiente (T/N), con una sonrisa confiada, pero nerviosa.
Ambos se giran a ver a Bakugou, para ver qué dice...
Pero...
-No está...
-Oh, dios, ¡otra vez no! ¡BAKUGOU! -llama la chica, queriendo ir a buscarlo y rezando para que no lo volvieran a raptar.
-¡Cuidado! -Kirishima se puso delante de la chica y se endureció por completo, protegiéndola de una viga que caía del comedor, pues estaban dentro de los edificios de la 1-A.
-Dios, Kiri... -algo la envuelve, una neblina negra, casi ahogándola, sin que pueda gritar.
Cuando se disuelve esa neblina se encuentra fuera de la academia, en la calle, en uno de los callejones de al lado.
-¿Qué...? ¿¡Qué!? ¿Pero...? ¿¡Cómo!? ¡Tengo que volver adentro, necesito ayudarlos y...!
Le agarran un brazo y tiran de ella suavemente.
-Eh, espera. -dice una voz que ella conoce.
Se gira sobresaltada y sonríe.
-¡Izuku! ¡Dios mío, cuanto tiempo! ¡No volví a saber nada de ti desde que te marchaste y te mudaste! Por eso no podías asistir a la UA, ¿no? Te quedaba muy lejos...
Él no responde, solo sonríe dulcemente. Ella mira como va vestido y sonríe.
-Qué clase... Me reiría, aunque estás muy guapo, no me malinterpretes, pero es un momento tenso... -se gira, dándole la espalda.- Tengo que volver a la UA, y... ¡Hm...!
-Shh, shh... Tranquila... -agarra a la chica con un brazo alrededor de su cintura, posicionándose detrás de su espalda, y con una mano le pone un pañuelo con una substancia que la hace dormir.
Ella intenta forcejear, pero nota como sus fuerzas se escapan.
Le pone algo en una mano a la chica, y justo en ese momento, cae dormida.
Midoriya sonríe emocionado, y acaricia la mejilla de la chica, con las mejillas sonrojadas y los ojos muy abiertos.
-Por fin... Mi amor... -la coge en brazos y la abraza.
Lleva enamorado desde que la conoció, meses antes de que se uniera a la liga, casi de una manera enferma.
Espiándola, sacándole fotos, dibujándola, cogiendo apuntes en sus cuadernos...
Nunca se le declaró por miedo...
Y cuando entró a la liga de los villanos, se le ocurrió un plan estupendo para que él y ella pudieran estar juntos para siempre, sin que nadie los moleste,viviendo felices y comiendo perdices.
Había cumplido con su misión...
Solo necesitaba que Kurogiri los transportara hasta el lugar indicado por el chico...

BNHA One Shots!! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora